Capítulo III

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Todo el día paso lentamente, la única vez en la cual fue divertido fue cuando Cristina me acompañó a hacer locuras, las cuales fueron interrumpidas enseguida por los deberes. Estaba en la biblioteca buscando unos libros, las imágenes de anoche se repetían en mi cabeza una y otra vez, las sensaciones que su toque enviaba por todo mi cuerpo no dejaba de recordarlas. Sus besos, su sonrisa, todo enviaba escalofríos por mi cuerpo de una forma placentera. Daniel entró exaltandome de mis pensamientos.

-Kat, hay alguien que quiere verte, esta afuera-dijo y asentí. Dejé el libro en la mesa y me levanté con dirección a la puerta. Salí y allí estaba él otra vez, apoyado despreocupadamente contra la pared del edificio.

-¿Que haces aquí?-pregunté.

-Vine hablar contigo-dijo y se acercó.-Te tengo una propuesta

-Si tiene que ver con que te largues de aquí, con gusto acepto-dije.

-Que lástima tener que decepcionarte otra vez-respondió.

-Habla ya-mascullé.

-Sabes que si quisiera te delataría, pero no lo haré si tu te quedas durante un mes conmigo y mis amigos-dijo.

-¿Por que quieres eso?-pregunté.

-Que digamos, si tu sales corriendo antes de que se cumpla el tiempo sería una demostración de que eres débil y eso es lo que quiero-dijo.

-No soy débil-dije.

-Si logras "sobrevivir" conmigo, demostraras que no eres tan frágil como realmente eres-dijo.

-Esta bien, acepto. Pero con una condición, Cristina viene conmigo-dije.

-¿Que parte de sola no entiendes?-dijo.

-¿Y quien me garantizara que tu no eres un violador y asesino en serie profesional?-pregunté.

-Touche... Esta bien, Cristina vendrá contigo-dijo-Vamos, llamala. Nos iremos ahora-continuo.

-¿Ahora?

-Lo que escuchaste, hoy comienza el reto-dijo. Rodee los ojos y le envíe un mensaje a ella.

-Una pregunta... ¿Como es que sabes lo de la marca?-pregunté abriendo los ojos.

-Es sencillo darse cuenta si analizas el cuerpo entero de una belleza como tu, además de que si piensas seducir a alguien debes saber sus secretos-dijo.

-Hay una simple traducción para eso, chantaje-dije.

-Incorrecto, significa seducción-respondió y dio un paso mas acercándose mas a mi.

-¿Seducirme a mí? Ni en sueños-dije.

-No era lo que pensabas anoche-dijo y acaricio mi espalda enviando millones de escalofríos por mi cuerpo.-Algún día terminaremos lo que comenzó ayer -susurró en mi oído. Luego de unos minutos Cristina y yo estábamos en el auto de un amigo de Martin mientras que él hablaba con su amigo. Pasaron 10 minutos, y habíamos recorrido un moderno vecindario lleno de casas con enormes ventanales y cosas modernas. Finalmente llegamos a una gigante mansión que estaba apartada de las demás viviendas, como dije antes, esta también era moderna. Todos descendimos del auto y Cristina y yo seguimos a Martin y Josh, al parecer así se llamaba su amigo.

-Dime otra vez por qué hacemos esto-susurró Cristina.

-Ya te lo había dicho, si demuestro que no soy frágil cómo una florecita así Martin dejará de fastidiarnos de una vez por todas-dije a lo que ella asintió. Martin abrió las puertas dejándonos ver el hermoso interior de aquella casa. Una gran escalera tipo caracol baja del segundo piso hasta el primero, los muros eran de un azul oscuro combinado con los sillones blancos y los muebles negros o café oscuro, y un enorme ventanal que dejaba ver un extenso lago por el cual podrías ver el amanecer, afuera una terraza bordeada por barandillas de vidrio y una hermosa piscina iluminada. Realmente una hermosa casa.

You. Me. Together (Martin Garrix) CANCELADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora