Introducción

591 28 3
                                    

Su piel exageradamente pálida y sus labios que habían perdido el color hace apenas unos minutos, cuando su joven corazón se detuvo aparentemente a consecuencia de un infarto fulminante me hizo sorprender. Estaba entre mi moral o mi morbosidad; decisión difícil de tomar para cualquier ser humano.

Quizás debería contenerme pero su cuerpo inmóvil yace frente a mí, mi compañera de cuarto estaba muerta justo frente a mí. Con inmensa curiosidad me arrodillo junto a ella y miro detenidamente cada parte de su cuerpo, deleitándome cada vez más con su piel. Deslizo mi mano derecha lentamente por su vestido hasta llegar al final de este y levantarlo con suavidad, sus pequeños pechos quedan desnudos ante mis ojos y mis pupilas se dilatan, siento un montón de emociones que me hacen esbozar una perversa sonrisa.
—Estoy viéndote desnuda, ¿No te da vergüenza?

Como era de esperarse, no obtuve respuesta a mi pregunta.

Sólo podía ver sus grandes ojos color avellana mirando fijamente al techo, tan fríos como su piel misma. Acaricio sus pechos con notable excitación y siento cómo una erección está a punto de surgir, nunca había visto a una chica desnuda de forma tan cercana, era como un arte que cualquiera desearía admirar. Dirijo mi mano a su entrepierna y acaricio aquella piel suave encima de sus panties color rosa. No podía aguantar más, mi líquido preseminal ya estaba brotando y mi mente virginal deseaba algo más que caricias. Volteo bruscamente el cuerpo de quien se supone era mi compañera y hago que quede de espaldas frente a mí. Acaricio sus glúteos suavemente y no puedo evitar golpearlos con fuerza. Cierro los ojos y meto mi mano en mis pantalones, procediendo a masturbarme.

Me estaba masturbando frente al cadáver de Amelia, mi compañera de cuarto...

Este pensamiento me hace abrir los ojos de golpe y parar con aquél enfermo e impuro acto. Volteo el cuerpo de Amelia y la cubro con su vestido justo como estaba anteriormente...
—¿Hola? Sí... Encontré a mi compañera de piso muerta.

PerversoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora