Parte IV

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 *2 años después*

Deban (pov's)

No supe nada de Carla desde aquella vez qué la vi en el funeral de Patrick, recuerdo qué ese día no hablamos mucho, de hecho su padre y su hermano no dejaron qué casi nadie se le acercará. Había pasado un tiempo desde aquella vez y por alguna razón me enteré qué estaba en la ciudad con su hermano, así qué decidí invitarla a tomar algo en casa.

Nunca aceptó mi invitación para venir a casa y tomar algo, supongo qué estaba bien, quizá aún no estaba lista para verme de nuevo después de todo lo qué pasó hasta qué un día llegando a casa me di cuenta qué había una camioneta negra frente a mi casa. Baje de mi auto y me sorprendí al ver a Carla esperando frente a mi puerta, parecía qué quería tocar el timbre, pero no lo hizo, se dio la vuelta, pero ya era tarde para irse, yo estaba ahora frente a ella.

— Hola - me acerqué a ella y la abracé, tenía mucho tiempo de no verla.

— Perdona por venir sin avisar, es solo qué estoy unos días en la ciudad y pensé en pasar a saludar - dijo mientras tomaba sus manos de manera nerviosa.

— Sabes qué puedes venir cuando quieras, es bueno verte de nuevo, pero entremos así, estamos más tranquilos - pase frente a ella para abrir la puerta y dejarla pasar - intente escribirte, pero parece qué cambiaste tu número, quería saber cómo estabas, no te he visto en mucho tiempo y desde la última vez no volvimos a hablar. ¿Quieres tomar algo?, voy llegando del trabajo y pensé en preparar algo para comer. — pregunte mientras entraba en la cocina.

— No quiero molestar, además ya es tarde - comenzó a hablar y sus ojos estaban cristalizados - no puedo - dijo en un susurro casi inaudible mientras tomaba su teléfono y se apresuraba a la puerta.

— Por favor quédate, no puedes solo llegar de repente e irte así nada más - dije mientras la tomaba del brazo - tengo pasta con crema y pechuga, sé qué te gusta, por favor acompáñame.

— Está bien, déjame ayudarte, yo pondré los platos - se acercó al gabinete y tomo dos platos para ponerlos en la mesa.

Comencé a servir y después nos sentamos a comer juntos, después de aquella vez no la volví a ver, ella simplemente se fue.

Carla (pov's)

Habían pasado cuatro años desde la muerte de Patrick, habíamos decidido mudarnos, pero de vez en cuando volvíamos a la ciudad. Después de qué nos fuimos conocí a personas increíbles, pero el recuerdo de aquel chico seguía presente en mí.

Eran las once de la noche cuando mi hermano mandó a buscarme para qué me llevaran a casa, cuando llegamos lo primero qué vi es qué estaban cargando las camionetas, así qué me apresuré a entrar a casa para preguntarle a mi padre qué era lo qué estaba pasando; vi varias maletas en el recibidor, pero no vi a mi padre. Fui a la cocina y me encontré a Malu hablando con papá.

— ¿Qué está pasando? Vi las aletas en la entrada - pregunté mientras veía qué Malu tenía los ojos rojos.

Subí a mi habitación, pero no había nada raro, todas mis cosas seguían en su lugar. No entendía lo qué estaba pasando y menos me imaginaba lo qué iba a pasar después. Baje y me di cuenta qué mi hermano y mi padre estaban discutiendo en el estudio, decidí salir de la casa hasta qué papá me llamó para hablar, lo primero qué vi fue a ellos en aquel sofá marrón.

— Linda, tenemos qué irnos, no sé cómo hacer esto, no quiero despedirme, recuerda qué siempre serás mi hija - dijo papá mientras se acercaba a mí y me abrazaba.

— No entiendo lo qué está pasando, ¿nos iremos? - pregunte extrañada.

— Tenemos qué irnos, pero esta vez no vendrás con nosotros - dijo mi hermano.

Papá me abrazó y sentí como si me fuera a desvanecer, nunca había tenido que separarme de ambos por un tiempo indefinido, papá se separó de mí para besar mi frente y después se apartó para salir hacia su habitación.

Cuando papá salió de la sala, mire a mi hermano y me lancé a sus brazos para abrazarlo como si fuera la última vez, aunque quizá está si era la última vez, no lo sabía, lloré en su hombro, después levantó un poco mi mentón y besó mi frente. Más tarde papá apareció en el salón con un maletín y de este nos entregó varias identificaciones y pasaportes.

— Pero, ¿por qué?, dijiste que no iría con ustedes - dije mientras revisaba lo qué me había dicho

— Es por precaución mi niña, por cualquier cosa tienes esto para irte a cualquier lugar - solo asentí a lo que dijo y me limité a guardar las cosas en mi bolsa - Por favor cuídate mucho mi pequeña, Alex se quedará contigo y te cuidará, dejaré a algunas personas contigo;  ellos estarán al pendiente de ti, recuerda qué no debes de hablar con nadie si no es necesario, cierra bien la casa y ten cuidado con la moto - asentí a lo que dijo y después lo volvía abrazar.

Salimos al patio donde ya las camionetas estaban listas y solo quedaba el momento en qué se fueran, me despedí por última vez de ambos y me quedé fuera hasta qué cerraron las puertas de la entrada, hasta qué deje de ver la calle por donde salieron, hasta que se fueron.

Y ahora estaba completamente sola y yo no sabía lo qué pasaría luego de esto.

© MI PECADO (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora