¿Cómo era posible que el más vago de su aula supiese siquiera quien fue William Shakespeare? No había forma posible en esta dimensión que el pelirrojo leyese algo como Hamlet, y Jungkook no podía dejar de pensar sobre eso. No era que lo vigilara todo el tiempo, pero era bien sabido que Kim Tae Hyung pasaba los exámenes por milagro, estaba dormido en todas la clases y con trabajos alcanzaba las tareas necesarias para pasar de año. ¿Había cambiado algo? Jungkook creía que era imposible.
¡Aparte no le había querido ayudar! ¿Qué le costaba? Dudaba que fuese tan descuidado como para no darse cuenta de siquiera una característica del sujeto quien ingresó.
Bien, por lo menos sabía que sí se trataba un chico.
Habían transcurrido tres semanas, veintiún tortuosos días en los que Jungkook seguía sin saber quién era su admirador. Después del encuentro que tuvo con Kim, éste no volvió a dirigirle ni una mirada. Lo cual agradecía, pero seguía maldiciéndolo porque según el azabache, no quiso ayudarlo únicamente para fastidiarle.
Su almuerzo transcurría en silencio, una de las cosas favoritas sobre tener como amigo a Yoongi es que su silencio era acogedor y entendía cuando no se encontraba con el humor para hablar, y viceversa. Usualmente bromeaban sobre otros alumnos o simplemente criticaban el almuerzo que les era vendido como si se tratase de algún platillo gourmet, a veces contaban sobre sus fines de semana pero justo ahora Jungkook no deseaba hablar, y el rubio pareció querer encender aun más la mecha.
¿Algún día iba a enterarse, no?
ㅡ¿Ya viste las calificaciones de este mes? ㅡcuestionó extrañamente sonriente, mientras revolvía su arroz con los palillos
Jungkook se consideraba así mismo un alumno destacado, su esfuerzo le había costado llevar las mejores notas del curso. Estudiaba hasta el cansancio y según su madre, era un obsesivo al respecto. Sin embargo no le importaba, Jungkook quería ser reconocido al menos por algo.
Él encabezaba las listas cada año.
ㅡNo necesito verlasㅡfue inevitable la arrogancia que inyectó sus palabras, haciendo sonreír más a su amigo.
ㅡ¿Seguro? ㅡrelamió sus labios, comprimiendo su propia sonrisaㅡPues deberías, hay algunos... cambiosㅡmurmuró aquello último, no, no quería darle la noticia. Necesitaba que Jungkook lo viese por si mismo.
Yoongi agradecía malditamente al cielo porque la pizarra con calificaciones estuviese de paso a su aula, porque se sentía bendecido de ser el primero en enterarse. Jungkook sabía que nada bueno podía salir de aquella sonrisa burlona, y no tardó ni una fracción de segundo en correr hacia las listas.
Se esperaba todo, menos lo que sus ojos vislumbraron en tinta desgastada.
Lista de calificaciones por
examen parcial
Kim Tae Hyung (김태형) ㅡ 95/100Jeon Jung Kook (전정국) ㅡ 90/100
El rubio se arrepentía de pocas cosas en su vida, una de ellas fue no tener su celular a la mano para poder grabar el momento exacto en que la quijada de su amigo cayó directo en el suelo al verse debajo del pelirrojo en las listas.
ㅡP-Pero... ¿C-Cómo? Si él...ㅡfueron demasiadas emociones explotando en su pecho, que no supo a cuál escuchar.
Debía ser un mal chiste. Uno muy muy muy, muy malo.
ㅡCreo que al fin aprendí a leerㅡesa profunda voz le crispo cada centímetro de la piel, haciéndole rabiar de sobremanera.
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Love Gummy
Fanfic---El destino sabe a caramelo--- Juzgar a un libro por su portada lleva a Jungkook directo al desastre, cuando descubre que posiblemente su "bully" personal es literalmente lo opuesto a aquello que le muestra. ...