Al día siguiente Luke no cerraba el hocico
-¡Si los hubieras visto!, ¡son como animales salvajes, Cashfod!- alzaba los brazos de manera dramática mientras me contaba que maldad habían hecho sus hermanitos la noche anterior- juro que a la próxima le cobraré a mi madre.
Reí ante ese comentario, imaginándome la cara de Luke al recibir una cachetada de parte de su madre cuando le dijera eso.
-Son niños, no puedes esperar a que se porten a la perfección-....- o como personas decentes.
Luke soltó un gemido y puso su brazo sobre mis hombros
- hoy iré a tu casa definitivamente
Entramos al salón, ocupamos los asientos de siempre y esperamos a que la clase empezara
-no creas que me olvidado de quien cumple años en dos días- canturreó
Sonreí y me señalé con mis dedos índices
-exacto- agarró mi mejilla y la sacudió levemente- y estaba pensando que tal vez podrí-
Giré la cabeza extrañada hacia Luke, se había quedado congelado en media oración con sus ojos fijos en la entrada del salón, no fue hasta que miré que entendí el por qué de su congelamiento.
Un chico con casaca de cuero estaba apoyado contra la puerta, mirándonos, sus ojos eran igual de verdes que los de Tyler, piel igual de pálida, en lo único que se diferenciaban era que el color de pelo de este chico era de un gris claro.
Apartó la vista hacia nosotros y caminó hacia la carpeta frente a mi
Luke apretó mi mano llamando mi atención
"es como un Dios" Dijo moviendo los labios, me quedé mirando su nuca y su pelo, las chicas que entraban paraban un momento para reaccionar y sentarse lo más cerca de él posible.
Hasta Molly, la chica más hermosa de la clase 4 E y probablemente de todo el ciclo 4, frenó un momento al verlo, fulminó a todas las chicas, yo incluida, que se habían sentado cerca a él, hasta que una de ellas se dejó vencer y se cambió de asiento para que ella pueda sentarse junto a él.
Él no parecía notarlo o tal vez no le importaba.
Tyler no apareció hasta unos segundos después de que el timbre sonó, no notó la presencia de su competencia y de la competencia de los otros dos chicos que siempre estaban junto a él, hasta que volteó ha verme
Juraría que sus ojos oscurecieron y las facciones de su cara se endurecieron, sus "perros", los dos chicos detrás de él, siguieron la mirada de su alfa y retrocedieron un paso
-Hola Michael- era la primera vez que escuchaba hablar tan claramente a Tyler en el salón
Todos voltearon, como si todos se llamaran Michael, el muchacho con la casaca de cuero, Michael, se levantó con una sonrisa y caminó hacia Tyler
-Vaya sorpresa... Tyler- casi soltó una carcajada a juzgar por su cara- te ves bien como siempre- miró a los dos chicos también- ¿ustedes ya hablan?, hace tiempo que no los veo, Joshua- miró al de pelo largo y luego se giró hacia el castaño- Simon
Todos miraban expectantes como si fuera el episodio final de su serie favorita, el profesor aun no aparecía y yo ya quería que venga para sentar a todo el mundo y acabar con este momento tenso.
-Me pregunto si también aparecerán las hermanas Melody
Simon negó con la cabeza y se sentó junto a la ventana, ignorando la situación, Joshua encontró más entretenido sentarse y ordenar sus cuadernos.
Tyler se mantuvo frente a Michael, ignorando su comentario anterior
-Buenos días clase- el profesor cortó la tensión con un cuchillo de carnicero- por favor todos sentados
Michael mantuvo una sonrisa de costado, me miró y guiñó un ojo antes de sentarse, sin antes observar a Tyler, quien tardó unos segundos más en sentarse, estaba rígido y de mal humor.
-Me sentí como en una novela mexicana- susurró Luke con una sonrisa esperanzada- como la de la maldita lisiada.
La siguiente clase Luke no la tenía conmigo, odiaba quedarme sola, irónico ya que pasé muchos años de esa manera, cuando Luke iba a casa con sus padres yo me quedaba sola con Coroline.
Caminé por el pasillo, mi próximo salón era en el segundo piso, metí todo lo que no necesitaba en mi casillero y subí a paso apresurado.
-Oye!, disculpa- una mano me tomó del brazo y me volteó suavemente, los ojos verdes y pelo gris llamaron mi atención inmediatamente- hola, soy Michael, tu debes ser Shinee.
-¿tan popular soy?- abrí los ojos de par en par
-Algo así- dijo riendo, su risa me relajó, no era como Tyler, todo nervioso y raro, este chico lucía como un chico normal, con la diferencia de ser extrañamente lindo- no tengo ni idea de donde es el salón "H", lo he estado buscando pero creo que no sirvo para ubicarme.
Le sonreí, era el mismo salón al cual me dirigía, le indiqué que me siguiera, caminamos juntos hasta el segundo piso, llamando la atención de todos los que estaban en el pasillo de arriba, que vergonzoso.
-no están acostumbrados a chicos nuevos eh?- volteé a verlo y por primera vez noté un rubor en sus mejillas a la vez que bajaba un poco la cabeza.
-No tantos, este ciclo han entrado siete contándote a ti- Frenamos frente a la puerta con una "H" dibujada bruscamente con plumón indeleble- aquí estamos, Salón "H"
Me sonrió una vez más y entramos, nos sentamos contra la ventana, él frente a mi, antes de que el profesor comenzara la clase un papelito cayó sobre mi carpeta.
"Mala elección de chico Shinee" estaba escrito de manera impecable con plumón verde.
Volteé con el ceño fruncido, los únicos ojos que me respondieron fueron los de una chica, una de las chicas nuevas, me miraba seria con un plumón verde entre los dedos.
