Sweet Lies | Sehun

Atardecer ficticio.

La mañana siguiente la familia se preparó para ir a una Isla y disfrutar en familia debido a que había pasado un tiempo sin que se vieran.

Sehun y Chanyeol estuvieron platicando un rato y Yu se preocupaba al no poder estar al pendiente de lo que sucedía, mientras tanto lidiaba con familiares dentro de la casa de la Isla.

Más tarde apareció Sehun.

-¿Él te está haciendo muchas preguntas?

-Más bien muchas amenazas. –Respondió echándose una uva a la boca. –Ven, quiero que hagamos algo.

Sehun tomó la mano de su novia falsa y la llevó a la orilla del mar.

-Cuando se acerque, ambos correremos a la arena seca y luego volveremos, el chiste es que no nos moje.

-Eso no es... ¿infantil?

-Sí, ¿y qué? –Preguntó serio.

Yu miró a su izquierda y a su derecha.

-¿Eso estará bien?

-Entonces voy solo.

Sehun corrió al agua y comenzó a gritar divertido. Yu terminó jugando con él y cuando sus pies se mojaron, Sehun la cargó en su hombro corriendo por la playa, por supuesto que más falso no podía ser, pero lo que ella estaba comenzando a sentir... eso sí que era real.

Sehun colocó una toalla bajo una enorme sombrilla, las personas habían comenzado a irse y los dos se recostaron para ver el atardecer.

Los colores, el viento, el mar y la arena, era parte de un escenario perfectamente montado para una situación romántica y falsa.

Sehun se enderezó y se recargó en un brazo para ver de lado a Yu.

-La manera en que brilla tu piel bajo esta luz, es encantadora. La manera en que tus ojos me miran, es adorable, y me pregunto si es posible que pueda existir tanta perfección.

-Cielos Sehun, realmente eres bueno actuando. –Dijo ella incrédula.

-Si sigues diciendo eso, no disfrutarás tus días a mi lado. –Respondió volteando su mirada hacia el cielo.

-Tienes razón, me dejaré llevar más seguido.

-Que valga tu dinero gastado. –Sonrió.

-Tu cabello... me gusta. –Dijo tierna.

-¿Mi...? Ts, gracias amor. –Respondió tirándose por completo en la toalla.

Sehun vestía un pantalón de mezclilla clara y una camisa semi-abierta blanca. Yu miraba fijo a su pecho.

-¿Qué afecto físico es permitido? –Preguntó Yu.

-Besos, caricias, abrazos... Todo, menos sexo. –Respondió sin timidez.

-O sea que puedo tocar aquí. –Preguntó colocando su dedo índice en la mejilla de Sehun.

Sehun sonrió sin abrir los ojos.

-Sí, puedes.

-Y aquí. –Tocó sus labios.

-También puedes besarlos.

-Y puedo tocar aquí. –Tocó el cuello de Sehun.

-Sí. –Rió cosquilludo.

-Y ¿qué tal aquí? –Preguntó metiendo su mano por completo bajo la camisa de Sehun para tocar su pecho aprovechando que los botones de arriba estaban abiertos.