Soft [TaeKook/Vkook]

Capitulo 4

-Esto no es lo que tenía en mente.

TaeHyung lucia enojado.

La cita había comenzado de lo más normal. Llego por mi puntualmente a las 8 como acordamos. Nos desviamos por un pequeño puesto de rosas.
Con el pretexto que eso le daría un toque hermoso a nuestra velada.

Todo lucia arruinado cuando llegamos al restaurant.

Nos rechazaron la reservación. Alegando que nuestra hora establecida ya había pasado y ahora estaba perdida.

TaeHyung había discutido tanto, que nos habían optado por sacarlo del establecimiento.

Furioso era un sentimiento muy pequeño para el en estos momentos.
Mordí mis labios nerviosamente. Ahora estaba balbuceando lo cuan molesto estaba.

-Hey...- Trate de llamar su atención, y la correspondió. - No todo está perdido.

-Todo esta arruinado, JungKook. - Jalo sus cabellos exasperado. - Te has esmerado tanto para lucir hermoso esta noche. Y simplemente nada salió como lo planee. Lo siento tanto. Comprendo si quieres ir a casa.

Con indignación se sentó en la acera.

Ah no, nada arruinaría mi cita.

Lo imite con el pequeño ramo de rosas rojas en mi regazo.

-Realmente... ¿quieres que me vaya? - Lo mire, el hizo lo mismo. Su mirada suplicaba que no me fuese.

-No, pero- Puse mi mano en su boca para callarlo.

-Entonces, cállate. Y disfrutemos de este momento juntos, no me importa realmente haber perdido la reservación, sé que te has esforzado por esto y me encanta. – Lo meditó y su mirada se suavizo. - Ahora vamos.

Reincorporándome, le extendí mi mano para que la tomara, resignado la tomo. Lucia triste.

A este punto ya no sabia que hacer, el no parecía feliz, es cierto que nada había salido de acuerdo con lo planeado, pero eso no importaba. Estoy con él, el dueño de mis sonrojos diarios. Eso me hacía muy feliz.

¿Qué haría Jimin en situaciones así? Mal momento para pensar en tu mejor amigo.

Sin darme cuenta, íbamos caminando sin rumbo alguno, ninguno de los dos parecía querer hablar. ¿se arrepentiría de haberme invitado a salir?

No, JungKook, no seamos negativos.

A lo lejos, pude divisar un jardín, uno muy hermoso, en el se encontraban muchos árboles estratégicamente acomodados y en ellos había largas extensiones de luces, así como también pequeñas farolas en cada tramo de camino. Una suave música acompañaba este hermoso lugar.

-TaeHyung, vamos.

Tomé su mano sin avisar y lo guie tras de mí. No deje de mirar el lugar, más que hermoso, parecía mágico. Estaba tan absorto a lo que veía hasta que un flash me saco de mi fantasía.

TaeHyung me había tomado una foto.

Inmediatamente me sonroje, sonrió amplio y guardo su celular. Tal parece que su humor había mejorado con este lugar.

-Realmente quería una foto tuya aquí, las luces, el ambiente, te hacen lucir mas lindo de lo normal.

-No digas esas cosas, TaeHyung. - Cubrí mi rostro con mis manos a medias, o como el ramo en mis manos me lo permitía.

El se encargo de apartarlas de mi cara, y situarlas en una banca cercana a nosotros.

- ¿Qué haces? - Soné nervioso. Pensé que esa etapa ya había pasado, tal parece que no.

No respondió, se acercó demasiado a mí, coloco una de sus manos en mi cintura y me acerco mucho más a él.

Se encargo de movernos a un ritmo lento y cómodo, danzando suavemente con la débil melodía del lugar.

¿estoy soñando? Esto realmente es mas de lo que pude haber pedido antes.

Cuando la melodía termino, dejamos de movernos, pero no nos separamos. Sin quitarnos la mirada, nos fuimos acercando poco a poco. Por instinto cerré mis ojos lentamente. Ya sabíamos que vendría después.

Sin embargo, eso no sucedió.

El sonido de personas viniendo hacia nosotros nos hizo separarnos, algunas de ellas mirándonos con curiosidad.

Mierda, que vergüenza.

Deje mi cabeza reposar en el hombro de TaeHyung. No podía con tanto.

-Tenemos que irnos, ya es algo tarde, Kook. – Acaricio lento mi espalda.

De regreso a casa todo fue relativamente normal, como si nuestro casi beso no hubiese sucedido. No mentiría al decir que había cierta tensión entre los dos, porque la había.

Al llegar a la puerta de mi hogar, no sabía qué hacer.

¿esta bien si doy el primer paso?

No, soy demasiado cobarde para eso.

-Bien, aquí estamos. - Hablo sereno, estaba bastante tranquilo.

-Gracias por lo de hoy, fue muy lindo. - Me sonroje, vaya que sorpresa. - Sera mejor que entre o mamá podría matarme.

Tímido, me acerque a él, y deje un pequeño beso en su mejilla. Inmediatamente me di la vuelta para entrar a mi casa. Mas no pude procesar nada.

Tomo mi muleca y me dio vuelta, pegando nuestros labios de una, abrí los ojos de sorpresa. El movía ágilmente sus labios contra mí, lentamente correspondí la caricia.

Cerrando mis ojos, deje caer las rosas para pasar mis brazos por su cuello profundizando mas nuestro enlace. No supe en que momento él me había acorralado contra la puerta.

Para ser nuestro primer beso, esto es bastante caliente.

Nos separamos para poder respirar, con nuestros alientos acelerados recargaos nuestras frentes juntas. Sonrió y me beso cortamente.

Finalmente, me dejo libre. Recogió el ramo de suelo y lo puso de vuelta en mis manos. Mordí mis labios, ardían un poco.

-N-nos vemos luego. - Agite mi mano hacia el y entre al interior de mi hogar.

Me desplome contra la puerta, cerrando los ojos, suspire.

Nada podrá superar este día.

¿o sí?