Me quedaré contigo hasta que te duermas,
el tiempo ya no me importa,
envejecer de cierta manera,
viendo correr nuestras horas.
No se podía imaginar el destino,
que podía salirme con la mía,
escaparme de aquel oscuro sin fin
que me deparaba la vida sin vos.
Y con el corazón lleno de valentía,
cruce tu patio trasero para pedirte la mano y huir.
Nos buscaron como prófugos, hasta que salimos del país.
Con nombres nuevos y vida nueva, arrancamos a vivir. Sin trabajo y sin techo, pero con mucho amor sin fin.
Conforme los años pasaron, conseguimos hogar, tuvimos dos hijos y uno más en camino.
Me quedé sin trabajo por las nuevas industrias que me reemplazaron por maquinas, el extranjero ya no cabía en ese lugar. Los estancieros me echaban ya no querían más negros, ni una miserable moneda me quisieron dar para poder llevarte un consuelo.
Para poder comer, tuve que ir hasta lo más bajo del humanismo, dejando un fuerte clarismo, entre lo que no era y debía ser.
Me vendi a un hombre de mucho poder, me mandaba a secuestrar personas, nunca te dije la verdad, al menos no hasta ahora.
Estábamos en España, y nos corrieron a Francia. Pues este hombre poderoso, sí que tenía sisañas.
"Secuestrame a las chicas de América" decia, "que esas valen millones". "Vas a tener tu parte si me las traes sin moretones."
Hasta que un día me cansé porque vos amor, te enfermaste y no había remedio que existiese para el dolor que tenías.
Ahora te tengo en mis brazos, podes cerrar tus ojos, podes dormir tranquila que está noche ya no salgo. Por algo me quedo tranquilo, moriste en mis brazos sabiendo mi último secreto, lo que yo hacia para mis chicos, para mi jefe y su consuelo.
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SI EL UNIVERSO QUIERE.
Historia CortaPoesía rara y cartas sin enviar, para nosotros los jóvenes.