2

3.1K 401 63
                                    

2

Al día siguiente despertó con los preparativos del festejo del cumpleaños de Scott y ayudó a decorar dentro y fuera de la casa, al igual que en Beacon Hills los cumpleaños también se festejaban con los vecinos y cada pueblo acostumbra tener una prueba de iniciación al mundo de los adultos, en Beacon Hills debías caminar treinta metros sobre brasas encendidas, a Stiles no le gustaba mucho el fuego pero le parecía divertido e incluso desafiante, no sabía cuál era la costumbre ahí pero estaba ansioso por descubrirlo.

Luego del almuerzo, Scott y sus amigos le llevaron a un lado detrás del pueblo, allí pudieron darse algunos chapuzones y pescar, a Stiles le gustaba pescar y disfrutó hacerlo con Scott. Además pudieron hablar sobre ellos mismos, lo poco que habían hablado había sido por medio de cartas y no era mucho lo que podían decirse, ahora sin embargo no dejaban de hablar y de contarse cosas.

Por la noche, Scott se estaba preparando en su cuarto y Stiles lo esperaba afuera junto con el pueblo y su madre. El moreno salió vestido con armadura hecha por ellos y Stiles le miró ceñudo cuando vio un arco y flechas en su espalda.

-¿En qué consiste?- preguntó en un susurro a la madre de su amigo

-Debe cazar un lobo- dijo ella y Stiles soltó una risita –Debe durar como mínimo toda la noche en el bosque y volver con la cabeza de un lobo- le contó y a Stiles se le borró la sonrisa del rostro, miró como todos despedían a Scott y éste se despedía de todos con la mano mientras se adentraba en el bosque. El castaño tragó saliva y las personas comenzaron a esparcirse cada uno a sus respectivas casas, Stiles sin embargo no pudo dejar de mirar al bosque. Le preocupaba Scott, él mismo sabía lo que era estar en ese lugar pero aunque quisiera negarlo...le preocupaba Derek, sabía que no tenía de qué preocuparse pero no podía evitarlo. Y tampoco pudo evitar caminar al interior del bosque él también. No buscaba detener a Scott, no, buscaba encontrar a Derek antes.

Caminó varios minutos hasta que oyó a un lobo aullar y comenzó a correr en su dirección. No era Derek y lo sabía pero aun así, el lobo sonaba asustado o incluso herido. Corrió esquivando ramas y saltando sobre troncos caídos y llegó hasta donde su amigo estaba.

Scott tenía una flecha apuntando directo a la cabeza de un joven lobo, era hermoso, su pelaje era amarillo y tenía los ojos del mismo color y brillantes como el oro.

-Scott...-dijo y su amigo le miró sorprendido. Quería ganar tiempo y que el lobo pudiera huir pero sabía que no sucedería ya que tenía una flecha en la pata trasera. Apretó los labios y miró a su amigo –Déjalo ir- le dijo y éste frunció el ceño

-¿Qué demonios Stiles?-

-Deja ir al lobo, por favor- le pidió y el moreno negó volviendo a apuntar al animal -¡Scott!- le gritó y corrió colocándose frente al lobito, no iba a permitir que lo matara, era un niño.

-¿Qué haces? Quítate- le dijo pero el castaño no se movió, el animal no era tan grande pero aun así Stiles no lograba cubrirlo por completo. Negó.

-No pienso dejar que lo mates, no es justo- dijo y Scott rio

-¡Ellos nos intimidan desde hace siglos! ¿Y no es justo que mate a uno?-

-¡Quién eres para decidir nada!- le gritó y Scott volvió a apuntar con su flecha, ésta vez directo al pecho de su amigo

-O te quitas o yo lo hago Stiles- le dijo enfadado. Stiles tragó saliva y suspiró -¡Por favor amigo!- le dijo tensando más el hilo y apretó la mandíbula soltando la flecha.

Stiles cerró los ojos y esperó, pero nada sucedió, el sonido sordo de algo cayendo le hizo abrir los ojos de nuevo y vio a Derek parado frente a él con la flecha en su hombro derecho, más allá de él estaba su amigo desmayado sobre el suelo y las hojas secas.

EL CHICO DE LA CAPA ROJADonde viven las historias. Descúbrelo ahora