Amor imposible

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Mi perdición. Mi amarga y dulce perdición.

De alguna manera me sentí aliviado de que no se hubiese alejado como Jimin lo hizo. Por que era mi mayor miedo, que él se sintiera el ser mas afrodisíaco del planeta y se pavoneara. Pero era obvio que el trato entre ambos cambiara.

Apenas si hablabamos y en parte era culpa mía. No podía aislar mis pensamientos ni controlar mis sentimientos teniéndolo tan cerca. Y no deseaba obligarlo, hacerle sentir incómodo o inseguro.

El me había confesado una vez que no creía cuando la gente le decía cosas lindas o le lanzaba piropos y que de cierta forma lo hacía sentir vulnerable, yo no quería que sufriera nada de eso estando conmigo, sin embargo cada vez era mas difícil. Es por eso que reuniendo toda la energía posible busqué alejarme.

Exploté.
Le dije como me sentía, le escribía cada vez mas. Él sabía leerme, sabía identificar señales y las asumía. Solo un par de veces me contestó. La verdad sus palabras, cada vez eran mas filosas, sentía cada vez mas odio en ellas pero... Para mi no dejaba de significar todo.

Suga se había convertido en mi razón de vida. Unos cuantos cortes a cambio de poder hablar con el. Porque si. Era nuestro tema de conversación. El tipo tira y afloja.

-Me gusta tu compañía, pero solo te veo como un amigo. No se que tanto sientas por mi, pero sabes que no es recíproco-

Palabras filosas.

Me encanta el dolor.