DÍA 13

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Día 13: Jealousy Kagami

(Kagami celosa)

Su sangre le hervia, pero ella no sabía por qué.

Su mirada parecían dagas filosas, pero no sabía por qué.

Su mandíbula la sentía tensa, pero no sabía por qué.

Sus manos la apretaba con fuerza haciendo que sus nudillos se pusieran blancos como el papel, pero no sabía por qué.

Su estómago se contraía que hasta le daban nauseas, pero no sabía por qué.

Pensamientos obscenos llegaban a aparecer dentro de su mente, y eso la hizo sentir confundida y asustada.

No sabía en ese momento lo que estaba pasando a Kagami Tsuguri.

Esa tarde ella se había reunido con sus amigos pues iban a ensayar para un concurso de talentos en la preparatoria de Luka, todo iba bien hasta cabe decir que ese día fue tan amena y divertida para el grupo e incluso para Kagami; quien no dejaba de observar los agiles movimientos de aquellos dedos del chico al tocar aquellas cuerdas de su guitarra. El grupo de adolescentes decidió en tomarse un descanso antes de seguir ensayando, cuando todos dejaron a un lado sus instrumentos Luka dirigió su mirada hacia la japonesa quien se encontraba platicando amenamente con Adrien y Marinette, una sonrisa invisible decoró los labios del guitarrista y justamente cuando él iba a dirigirse hacia ellos la voz de su hermana hizo llamar su atención.

– Luka.

– Sí Jule.

– Eso que traes en el cuello, ¿Es un chupetón? – ella señaló en un punto exacto del cuello de su hermano, a la vez que esto hizo llamar la atención de sus amigos.

– ¿Qué? ¿De qué estás hablando Juleka? – se sintió confundido el Couffine mayor.

– Ahí. Justo ahora donde estoy apuntando es donde se encuentra el chupetón. – volvió a decir la hermana del chico.

Luka quien ya estaba realmente confundido, sacó su celular para luego poner su cámara frontal y verse en la pantalla en el lugar donde apuntaba su hermana el dichoso "chupetón". Para sorpresa de él había un punto rojizo en aquella zona. Y sin que nadie se diera cuenta Kagami comenzó a fruncir un poco el ceño mientras hacía una mueca de disgusto cuando escuchó todo aquello del chupetón.

Todos los chicos comenzaron a hacerle al Couffine mayor uno que otro comentario burlesco sobre lo picaron que era o de quién era la afortunada de darle ese "regalito" a él.

Y claro que esto no ayudaba a que Kagami sintiera ese malestar en su pecho que crecía a cada rato, en tan sólo imaginarse a Luka siendo besado en el cuello por alguien y dejarle un chupetón hacían que ella le hirviera la sangre del coraje.

Mientras que el guitarrista intentaba en convencer a sus amigos de aquello que tenía en el cuello no era más que un simple piquete de mosquito y no un chupetón, Juleka desvió en ese momento su mirada de su hermano para dirigirse hacia la japonesa; al ver la expresión de la chica una sonrisa fantasmal y divertida decoró los labios de la menor de los Couffine.

– Ya Luka no te hagas, a mí se me hace que te andas viendo con alguien y no lo quieres confesar. – Juleka sabía muy bien que ella le estaba echando leña al fuego, pero sería algo divertido en molestar a tu hermano mayor y cabrear por un momento a tu futura cuñada.

– ¿Lo ves? Hasta tu hermana no te cree Luka. – se burló Nino.

– Les estoy diciendo la verdad. Lo que están viendo no es un chupetón es sólo un simple piquete de mosquito. – se defendió el guitarrista pero al parecer el grupo de adolescentes ni le creyó.

– Si claro. – bromearon los chicos, sin darse cuenta de que cierta japonesa ya tenía una sombría mirada y aura.

– Kagami... ¿Te encuentras bien? – preguntó Marinette algo nerviosa.

– Si. Me encuentro bien. – respondió Kagami, pero su voz marcaba lo fría y seria que estaba, lo cual esto hizo temblar de miedo a la pobre Portadora de la Mariquita quien inmediatamente se ocultó detrás de Adrien.

– No me gusta el tono de su voz Adrien, parece que enojada. – le susurró al oído de su novio.

– Kagami, ¿Estás segura qué estás bien? – preguntó esta vez Adrien a la japonesa.

– Sí. – al momento en que ella respondió se volteó a ver al rubio y a la pelinegra, quienes inmediatamente temblaron del miedo después de ver aquella mirada de la esgrimista sombríamente.

Y así toda la tarde se la pasaron; los muchachos seguían bromeando con Luka acerca de su supuesto chupetón, mientras que el guitarrista trataba de convencerlos de que aquello no era nada más que un simple piquete de mosquito, y por ultimo Kagami estaba ardiendo en celos ocasionando que ciertos superhéroes disfrazados de civiles comenzaran a temblar de miedo.

¿Quién diría que Kagami Tsuguri estaba muerta de celos solo por un simple piquete de mosquito que traía Luka en el cuello?

LUKAMI JULYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora