Lo que me debes

Capítulo 6

Me voy a dar el lujo de ahora mismo volver el tiempo atrás para contar un poco más de mí estadía en el sótano.
Esos seis meses fueron duros lo admito, supe que eran seis meses después por boca ajena. No hubo un día que no fuera visitada por Till sea para complacerse o no, su simple presencia provocaba en mí miedo y rabia.
El no solo abusaba de mí sino que jugaba con mis esperanzas como si fuera la cosa más entretenida del mundo, me mojaba el alma para después escurrirme las espectativas de libertad que tenía, en base de tenerme encerrada en ese lugar de mierda, lleno de mugre y sangre, que, además era mía, incitaba a que la muerte tomé mí alma en un momento tan desprevenido de mí, que simplemente no lo notaría, y odiaba eso, odiaba saber que teniendo el la libertad de matarme prefería tenerme encerrada y destrozarme poco a poco.
Y así fueron seis meses, en donde me sentía un pedazo de carne, en donde sentía que no valía ni un poco, en donde yo era solo...nada no era nada, hasta que lo conocí a él, la única persona en la faz de la tierra que dio todo por revivirme desde lo más profundo de mí alma.
Gracias John siempre te estaré agradecida.

Presente de John:

Tenia que hacerlo, tenia que ayudarla, ella no tenia la culpa, ella tenia miedo, ella estaba sola, ella era débil pero fuerte a la vez, pero éramos iguales, éramos sobrevivientes.

Vi a Flake entrar en la habitación e intenté ignorarlo, no quería seguir con esto no otra vez. Seguí con lo que estaba haciendo, solo doblaba la ropa mientras intentaba que mis ojos no soltaran las lágrimas. El se pone a mí lado y toma mí cara bruscamente haciendo que lo mire.
-Ni se te ocurra-dijo lentamente con un tono de enojo-NO ME DESAFIES JOHN-grita y me da una bofetada-NO LO HARAS NI LO PIENSES-Me toma del pelo y me arrastra a la cama-NO TE IRAS LEJOS DE MI NUNCA-Me comienza a golpear y yo no intento defenderme por que es en vano-NO NUNCA-Me da un golpe y me deja inconciente.

PDV de Morgan:

Abro los ojos lentamente, y sigo en la habitación, estoy sola y una idea se sigue cruzando por mí cabeza y es una, escapar.
Pero no hiba a intentar escapar como si nada por que así no nos manejamos en la vida, necesitaba un plan, un muy buen plan en donde esté todo muy bien controlado, tenía que saber de cada persona en la casa, de cada rincón de esta, de ese enfermo y también del chico.
Tenia que saber mucho, tenía que prepararme, y también tenia que sobrevivir en este infierno.
Quería venganza, sangre en mis manos, tanto odio acumulado tiene que ser liberado.
El sonido de la puerta me despejó de mis ideas, pero la persona que la abrió, con una sonrisa radiante y fuego en su mirada, me analizaba descaradamente. Mueve su cabeza un poco de una manera un poco tonta y me dice.
-¿Cómo está mí linda princesa?.
Solo lo miro sin decir nada, tengo miedo no voy a ocultarlo-¿Qué te comió la lengua el gato?-Sonríe de lado y cierra la puerta tras de sí.
Yo solo lo miraba, no movía ni un músculo, mí cuerpo no respondía, no sabía que hacer.
Se sienta en la punta de la cama y me mira, está calmado y parece tener buenas intenciones. No debía confiarme de el por qué eso es lo que quería, solo hice una cosa y fue examinarlo. Su cabello negro y algo despeinado me gustaba, parecía suave, su aspecto facial era de un hombre de más de 40, podría apostarlo, tenía unos ojos caídos pero de un color tan celeste que parecían lentillas. Su nariz era un poco larga y cuadrada y sus labios eran pequeño y para mi bonitos, tenía unos enormes brazos y torso, parecía un gran oso, pero más grande que eso era su pene, ,el cual me gustaría poder cortarcelo y dárselo de comer al maldito bastardo.
Un fuerte dolor en las costillas me hizo retorcerme y no evite soltar un extraño gruñido de dolor.
-Lamento que te haya roto las costillas mi amor pero eso es por no obedecer mis simples órdenes de callarte la puta boca-Dice lo último golpeando con sus dos manos la cama de una manera muy violenta y con mucho enojo, me mira y su cara muestra odio, se acerca rápido a mí, sus dos manos a los costados de mí cabeza y su cara a centímetros de mi.
-Por eso para que no vuelva a haber problemas te voy a dejar las reglas muy claras- Toma con una mano mi rostro y me pone la cabeza de lado, recuesta suavemente su cabeza en mi rostro y cuello, siento su tibia respiración y estremezco de nervios-Primero, estamos dulcemente enamorados uno del otro, segundo, tu me amas con locura y yo soy tu mundo entero, tercero amor mio trátame con dulzura, asi como los amantes enamorados hacen, cuarto, todo lo que te diga, haga o mande tendrá que ser obedecido.-Posa una mano en mi rostro y me mira-¿Me entendiste?-Asiento con la cabeza-Muy Bien-Se levanta y se saca la camisa provocando que me asuste por lo que vendrá-Ahora vamos a dormir.
Suelto el aire acumulado y cierro los ojos, siento como se acuesta a mí lado y me abraza un poco.
-Guten Nacht Mein Liebe.
-Guten Nacht- respondo casi inaudible, intento centrarme en volver a dormirme y lo consigo.