Capítulo 7

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Morgan fue despertada por un exacerbado Till que le hablaba de algo que no entendia mientras la zarandeaba.
-Levantate ya es tarde-Con voz ronca-Vamos a desayunar y a presentarte.
¿Desayunar?¿Presentarse?Estaba fuera de órbita, no entendía nada de lo que pasaba.
-No puedo levantarme-Dijo débilmente.
-¿Ah no?-Dice enojado y tomandola de un brazo la sienta en la punta de la cama mientras ella grita del dolor.
Justo cuando Till estaba por golpearla tocan la puerta de la habitación. Suelta el brazo de Morgan y ella cae al piso adolorida.
Abre la puerta y ve a John del otro lado.
-¿Qué?-Le dice enojado.
-Christian me mandó a decirte que tengas cuidado con la chica por qué no quiere vivir atendiendola por tu culpa.
-Pero que mier...-Se queda callado mientras se contiene para no golpear al chico, nadie lo mandaba pero era su amigo Christian quién se lo pedía y no quería problemas.
-Ah y que bajen a desayunar-Dice dandose la media vuelta para irse.
-Quien mierda te crees que eres para decirme que hacer-Sale de la habitación.
-Yo solo cumplo órdenes-Dice indiferente sin voltearce y sigue su camino del pasillo a la escalera.
A regañadientes Till entra a la habitación y le da un vistazo a la cama donde Morgan ya no esta, sin acelerarce la rodea viendo que ella estaba tirada en el suelo.
-Como dije muchas veces te ves patética-Se ríe y la levanta del brazo.
La sienta en la cama y la mira.
-Escucha-Dice suavemente mientras le pone un mechón de pelo atrás de la oreja-Vas a bajar ahí y vas a hacer como si todo esta jodidamente perfecto-Gesticulando lentamente-No quiero uno de tus PUTOS-alzando la voz mientras se altera-numeritos-baja la voz-de drama que me arruinen la mañana-lo último con vos muy gruesa-Así que por favor colabora cielito.
Morgan asiente asustada y es interrumpida por Till al intentar hablar.
-Y con esta mierda-Señala alrededor de ella-De tu-Se detiene-De ti-Rie-Llamare a una mucama para que te ayude a vestir-Le pasa la mano por la cara mientras se dirige a la puerta-Por que ni eso puedes-La mira-Puta idiota.
Ella solo mantiene gacha su cabeza.
-No puedes dirigir ninguna palabra en la mesa-Le advierte-No sin mí consentimiento obvio ni menos hablar con las mucamas.
Se va de la habitación.

Morgan se larga a llorar desconsoladamente, ¿Era esta ahora su vida?, No quería averiguarlo, estaba más que segura que moriría pronto, eso deseaba.
Una mucama entra por las puerta y tan callada como Morgan lo está la ayuda a vestirse. Un bonito vestido blanco, por suerte largo le cubre el demacrado cuerpo. Unas sandalias también blancas adornan sus esqueléticos pies, su cabello es peinado delicadamente y dejado suelto.
La mano de la mucama se extiende hasta Morgan para ayudarla a pararse y juntas salen de la habitación hasta las escaleras.
-Abajo a la izquierda.-Es lo único que dice la mujer antes de darse la vuelta e irse hacia una habitación.
Morgan suspira y empieza muy despacio a bajar los escalones de la gran mansión la cual no se detiene a mirar. Las risas de los comensales se hacen presentes en toda la sala hasta verla entrar por el marco de la gran puerta cuando se callan y dirigen su mirada a la recién llegada. Antes de que ella pudiera decir algo alguien la interrumpe.
-Ah Morgan Cariño te estábamos esperando.

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⏰ Última actualización: Nov 13, 2019 ⏰

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