SIETE

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JunHoe regreso en la noche, JinHwan lo recibió colgándose en él para darle un beso apasionado. Risitas traviesas y un toqueteo que se intensifico como un juego lujurioso. Lanzándose en el sillón, disfrutando el dulce sabor, lenguas que se encontraban en sus bocas, saliva, sonidos obscenos y cuerpos que por instinto se iban moviendo con un compás conocido.

"Como la lluvia, el viento y la nieve que son abrazados por el suelo, mi existencia será abrazada en tu intimidad tarde o temprano.

Mientras la lluvia, el viento y la nieve no caigan más, te perderé en la intimidad tarde o temprano.

Sin embargo, no temas tener que acostumbrarte al aire que nos rodea, el cual ya estamos acostumbrados...

No importa cuánto me acostumbre a ti, al final eres mi razón para seguir viviendo.

Koo JunHoe*"

—Espera— la voz de JinHwan sonaba casi rota —Abrázame, solo abrázame.

June no cuestiono el porqué de sus acciones, he hizo lo que le pidió. Lo sostuvo con ternura y escucho un leve sollozo, al percatarse no lo lleno de preguntas, solo se mantuvo en esa posición. Acaricio su espalda, cerró los ojos, deposito un suave beso en su cabeza. El tiempo se detuvo en esos instantes.

—Gracias —dijo JinHwan. —A pesar de parecer una prostituta... no es muy sencillo para mí el llegar a tener relaciones sexuales con alguien.

—Lo comprendo. Yo no soy alguien que solo te pagara, te conozco muy bien, y no se tratara solo de placer momentáneo, o de saciar los instintos más animales —separándose para sentarse a su costado —Creo que soy alguien especial para ti ¿O estoy equivocado?

—Lo eres... me respetas —hizo una pausa —Te interesaste genuinamente por mí. Te has quedado para sanar mis heridas —sus ojos se encuentran —Fue mi decisión el usar el sexo de esta manera, nunca pensé que me lastimaría.

— ¿Hablas de los hombres con fetiches extraños?

—Supongo que solo pensaba que con lucir lindo era suficiente para ellos. Estaba ofreciendo algo que los haría sentir menos miserables, era un trato justo. Yo era joven y deseable ¡Vivimos en uno de los países más doble cara! Entre más prohibido, mas añorado. —deja caer su cabeza en el hombro de June —Me metí tanto en esa mierda que descubrí que no era tan simple. Hay personas que pasan ciertos límites a los establecidos ¿Qué jodidos está mal en sus cabezas? No estaba seguro si eran ellos los que me habían destrozado ¿Era todo mi culpa? Me sentía con la necesidad de pagar una penitencia debido a mis pecados.

—No le debemos nada a nadie.

—Me encantas. Tenía razón cuando dije que no eras un simple ingeniero ¿Ellos te han hecho esconderte? Te aprecio tanto, que solo deseo verte deslumbrar. —Levanta la cabeza y le sonríe —Puedo quererte, fácilmente puedo quedarme contigo para el resto de mis años.

—Al final todos queremos un poco de romance — toma su barbilla con delicadeza —Eres hermoso, pero eso se terminara. Sin embargo pareces resplandecer con sencillez, si, a pesar de todas las cosas que puedan decir de ti.

—La habilidad del poeta. —Niega levemente con la cabeza —Todo lo que dices es arte, cada vocablo se convierte en una pieza digna de admiración. Creo que ya te quiero ¿Puedes aceptarlo?

—Estoy dispuesto a correr el riesgo.

—Durante las madrugadas, iba a presentarme en una especie de bar. Me dejaban cantar, bailar, montar todo un espectáculo. Su temática era del tipo Queer, por lo que me vestía como mujer, y muchos quedaban cautivados. —se detiene, inspeccionando la expresión de June. Este arruga la frente, sonríe de lado —Lo disfrutaba, pero la paga no era demasiada. Por lo que me acostaba con hombres que se interesaban en mí. Algunos eran amables, otros no tanto, y eran esos los que consumía mi poca moral.

AberraciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora