Amor Incorrespondido

2- Recuerdos

Cuando me levanto me doy una ducha tratando de borrar todo pensamiento que se me cruse por la cabeza. Al bajar a desayunar me encuentro con Martín sentado en la cabecera de la larga mesa, con su periodico en mano y su cara seria. Liza por otra parte esta ordenando la mesa para desayunar, ella siempre fue muy exagerada con la comida.

No he visto a Will en toda la mañana, no ha bajado a desayunar. No es que me importe pero me preocupa como también me preocupa Liza y Martín. Cuando termino de comer ayudo a Liza a levantar la mesa y limpiar, aunque ella me repita una y mil veces que no es necesario.

-¿Que pasa hija?- no soy buena ocultando cosas y Liza se dio cuenta apenas me conoció, tampoco soy buena para mentir pero trato de hacer lo mejor que puedo.

-Nada, es solo que se acerca mi cumpleaños y ya sabes.- hago una mueca.

-Oh tu cumpleaños, vas a ser casi mayor de edad dentro de poco.- me pasa un plato para que lo seque. Mi mentira a resultado y me felicito mentalmente por eso. Liza siempre fue buena para levantarte el animo.

-Si, y dentro de un año más sere mayor de edad y podre viajar por todos lados.- me rió.

-Sabes, recuerdo cuando Will tenía seis años y corría por toda la casa en ropa interior y con una capa de superman diciendo que iba a volar por todo el mundo conociendo muchos lugares.- veo como una lagrima resbala por su mejilla pero la seca rápidamente.- Crece tan rápido.

- Gracias mamá, por arruinar mi reputación como superhéroe.- Will aparece por el umbral de la puerta, reprimo una sonrisa ante su comentario. Liza se da la vuelta y él viene a abrazarla. No puedo evitar que recuerdos venga a mi como un balde de agua fría.

Cuando termino de ayudar a Liza subo a mi habitación. Tomo mi movil y entro a galería. Un  montón de fotos con mis padres aparecen en este,  sin darme cuenta ya estaba llorando. Ver a Will y Liza abrazarse me hizo acordar tanto a mi familia, ya no se si llamarla ex familia, que hace que mas lagrimas caigan. Escucho como tocan la puerta y me seco las lagrimas con el dorso de mi mano.

-¿Puedo pasar?- Will aparece del otro lado de la puerta. Mi corazon se acelera con tan solo pensar que me vino a ver.

-Si claro, ¿Qué pasa?- hago como si nada hubiera pasado, como si no hubiera llorado.

-¿Estabas llorando?- se acerca a mi sentándose en el borde de la cama, pasa sus dedos por mi mejilla quitando algunas lagrimas, con tan solo su toque mi pulso se acelera y trato de tranquilizarme.

-No.- me aparto de él despacio.- ¿Necesitabas algo?- le doy mi mejor sonrisa, aunque se que fue mas una mueca.

-Oh, mi madre me ha dicho que pronto es tu cumpleaños- dice buscando mis ojos, los cuales yo había apartado.

-Si, en una semana.

-Bueno, tratare de hacerte un gran regalo entonces.- dice sonriendo, esa sonrisa que me derrite. Tenia ganas de decirle "Quiero que mi regalo seas tú" y lanzarme encima, pero me contuve. Se levanta y se dirige a la puerta pero antes de irse se gira.- Estare esperando ese día.- me guiña un ojo y se va. Siento como mi corazon late a mil por hora y como en mi rostro se forma una gran sonrisa.