Capítulo 16

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Madison P.O.V.
Un mes hacia que no venía aquí, de una u otra forma me hacia bien platicar con ellos, contarles mis problemas aunque ellos no pudieran responderme.
No he dormido y mucho menos he comido bien aunque el doctor me dijo que tenía que hacerlo y ese maldito dolor regreso ¿porque aquí? ¿Porque en este momento? Tome mi cabeza entre mis manos deje pasar un rato así y el dolor disminuyó.
No saben cuanto los extraño -dije eso último para después dejar una rosa enfrente de la lápida a la que siempre venía, en ella tenía escrito "Aquí descansa Michael Dye, amado esposo, padre y amigo 1973-2013" debajo de este decía "Aquí descansa Caroline Green amada esposa, madre y amiga 1975-2013".
Salí de cementerio y por un momento creí ver a Chris, no le di importancia y salí en busca de un taxi, el dolor se hizo presente nuevamente pero esta vez tan intenso que veía borroso y había un ruido que molestaba mis odios.
¿Estas bien? -pregunto alguien que no pude reconocer ya que no lo veía bien- Madi contéstame -dijo con tono preocupado-
¿Cómo sabes mi nombre? -en un hilo de voz ya que el dolor hacia que mi voz se estrujara-
Madi no me reconoces -más preocupado que antes, y luego todo fue obscuro-
Mason P.O.V.
Estaba llegando al departamento, pase a recepción para asegurarme que no hubiera correo el día de hoy, y no, no hubo pero si una gran Jason con la cara pálida.
¿Te pasa algo Jason?
Es Madi -lo mire- está en el hospital, llamaron hace 5 minutos.
Cuando escuche eso salí corriendo, me subí al auto y para mi mala suerte había mucho tráfico tarde 20 minutos en llegar, estacione el auto y fui corriendo a preguntar por Madison aunque seguramente estaría donde siempre, con el Dr. Max y así fue.
Por favor es mi hermana, necesito verla -frustrado-
No puede hasta que el Dr. Max lo autorice -la recepcionista me miraba sería-
Golpe su escritorio enojado y me miro molesta, yo sólo la ignore y me senté en los sillones de la sala, me tire en una silla y suspire frustrado.
Eres el hermano mayor de Madi -interrumpió un chico a lado mío-
Así es -asentí- ¿la conoces?
Si, la conocí en el CR, soy el encargado de su tratamiento -sonrió- Chris Collins -estrecho su mano- la encontré fuera del cementerio, quizá tomaría un taxi -se encogió de hombros-
Mason Dye -estreche mi mano de vuelta- sabes que le paso.
La vi algo confundida, después le pregunte si se encontraba bien pero...-guardo silencio-
Pero...-dije insistente-
No me reconocía, no se porque -asentí y no volví a preguntar nada más-
¿Mason? -pregunto una doctora después de 10 minutos-
Soy yo -parándome rápidamente-
Acompáñame -dijo para darse la vuelta y llevarme a la primera puerta que estaba allí-
Soy la Dra. Hanna soy especialista en problemas alimenticios -sonrió- el Dr. Max me comento que Madi estuvo ayer aquí debido a los fuertes dolores que presenta por la mala alimentación y mal descanso.
Es culpa mía, no he estado cerca de ella para saber si se alimenta bien, eso cambiara estaré más pendiente de ella, la haré comer siempre sus 5 comidas, bueno 3 y dos colaciones -me interrumpió-
Mason calma -tomando mi mano- este no es problema de unos días, es de tiempo atrás -la mire confundido- esto suele pasar cuando pierdes a alguien muy cercano, como sus padres tenemos que hablar con ella si no quiere caer en un problema del cual será difícil salir -sólo asentí- puedes pase a verla, ya pueden irse a casa.
Fui por Madi, ella no sabía lo que pasaba y me miro sonriente la abrace, realmente lo necesitaba.
Te parece si nos tomamos el día para los dos -ella asintió como niña pequeña-
Pasamos todo el día juntos, primero la invite a comer, me di cuenta que comió muy poco pero no comente nada.
Luego fuimos a la plaza me encantó un reloj que estaba ahí pero costaba algo caro así que no lo compre, en cambio Madi compro muchísimas cosas, al final fuimos por un helado, lo se helado en la noche con el clima más frío en Carolina de norte.
Madi, necesitamos hablar-
De qué -probando de su helado-
Hoy conocí a la Dra. Hanna, es especialista en problemas alimenticios -dije todo de corrido-
¿Y para que la necesitamos? -pregunto concentrada en su helado-
Tu la necesitas -abrió los ojos de par en par- no quiero reproches mañana después del ir al CR la doctora te pasara a buscar para hablar contigo.
Cuando regresamos a casa supuse que Madi se había enojado porque cerró su puerta de golpe, sabía que le molestaba el tema de su alimentación pero necesitaba ayudarla y quizá yo no era el indicado, no cuando a mi también me había afectado la muerte de nuestros padres.

He safe meDonde viven las historias. Descúbrelo ahora