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[Si hay faltas de ortografía escríbemela en los comentarios]

Nota de la escritora: En este capítulo hay una escena de intento de suicidio. Si eres sensible a esto, pasatelo hasta que veas un diálogo. Quedas avisad@.

Antes era Alice Harris, la hija del Señor y la Señora Harris. Una familia un tanto peculiar. Los vecinos no los veían salir nunca de casa, compraban en el supermercado a domicilio y era estrictos conmigo, las normas eran:
No correr, no gritar, no saltar, no hacer ruidos molestos, no salir de casa, vestirse como me lo ordenaban, comer lo que me ordenaban, ser respetuosa, no hablar más de la cuenta, no usar nada que me mostrara o comunicara con el exterior, etc.
Lo único que captaba mi atención eran las ventanas, gracias a dios mis padres no me prohibían mirarlas. Me pasaba las tardes dibujando los distintos paisajes de cada estación en cada ventana de la casa.

Por si os lo preguntáis no, no iba a clases, mis padres me daban clases, ambos estudiaron mucho toda su vida y tenían un laboratorio en casa al cuál no podía entrar a menos que ellos me lo indicasen

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Por si os lo preguntáis no, no iba a clases, mis padres me daban clases, ambos estudiaron mucho toda su vida y tenían un laboratorio en casa al cuál no podía entrar a menos que ellos me lo indicasen. Entrar...para usarme en sus experimentos. Desde muy pequeña me inyectaban cosas y yo debía soportar malos efectos secundarios. A veces pensaba que casi me iba a morir, pero seguramente a ellos les daría igual, ¿o no?
Al ser una adolescente me di cuenta de que realmente me necesitaban como conejillo de indias, por tanto, no querían que muriese o que mi salud empeorara, pero al no ser médicos solo se les ocurría inyectarme más cosas para que resistiera al dolor y todos esos horribles efectos.
Me ha faltado decir lo peor de todo esto. Pusieron cámaras por toda la casa, me vigilaban constantemente, incluso en el baño... Sé que mi padre me miraba sobre todo en el baño, era enfermizo... Pero lo peor era cuando quería hacer otras cosas, cosas a las cuales yo me negaba y por tanto él me pegaba. Jamás llegó ha forzarme a nada, ya que él solo me veía como basura, y por una vez en mi vida me alegré de eso. Mi madre me usaba como esclava en casa, yo lo hacía todo menos cocinar, ya que tenía miedo de que pudiera envenenarlos o algo.
Mi padre también puso una cámara en su laboratorio para saber si le tocaba algo o si husmeaba por ahí. Aquel día empezó mal, mi madre me despertó tirándome de los pelos, y sin siquiera desayunar me llevó al laboratorio de malas maneras. Me ordenaron que me sentara, mi madre salió y posteriormente mi padre también, supongo que para coger algo, y fue entonces cuando lo vi, un gran cristal que emanaba un color presioso. Silenciosamente lo cogí para posteriormente posarlo sobre mi muñeca izquierda, mientras algunas lágrimas brotaban por mis ojos. Fue rápido e instintivo hacer una "A" muy profunda, ¿la "A" de Alice?
Mi cabeza empezó a dar vueltas y noté que debía sangrar más si quería un suicidio rápido, empecé a hacer cortes largos y sin sentido por mis piernas y brazos.

Por último, cuando mi mano se acercaba a cortar la piel de mi cuello entraron mis padres y rápidamente solté el cristal

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Por último, cuando mi mano se acercaba a cortar la piel de mi cuello entraron mis padres y rápidamente solté el cristal. Se abalanzearon sobre mi, mi madre me sujetaba los brazos para intentar inmovilizarme y mi padre me pegaba con fuerza haciendo así que mi ira explotara, literalmente. Todos los cristales del laboratorio explotaron en miles de pedazos. Abrí los ojos y vi todo destruido. Más tarde vi a mis padres en el suelo sangrando y por último mi mirada se fijo en mi cuarto, el cuál tenia un montón de cristales clavados haciendo que me desmayara por la perdida de tanta sangre.

Pasaron las horas y desperté en un cuarto blanco, sentía dolor, y lograba percibir un olor a medicina. Observé a mi derecha y había una ventana con un paisaje bastante bonito que jamás hubiera visto en cualquier ventana de mi casa. A mi izquierda había una enfermera que hablaba con otra mujer vestida de negro. No reconocí a ninguna de las dos, aunque era normal, no veía a personas a menos que pasaran por la calle de mi pequeño barrio deshabitado.

Hill: Hola soy la agente Hill, vengo a hacerte unas preguntas. -Se quedó esperando mi respuesta- La enfermera ha insistido en que debía dejarte descansar pero... -hizo una pausa y observó mis cortes- Sé que lo que pasó hace unas horas no te molesta en absoluto. -dijo esto último susurrando-

Alice: -Mis ojos se abrieron como platos- ¿Cómo lo... -antes de poder acabar la frase la Agente Hill me interrumpió-

Hill: Las cámaras, hemos visto todo y antes de que creas de que queremos hacerte algo malo, dejame decirte que estoy aquí para ayudarte. -dijo esto con pena en su mirada- Esos dos ya no están para hacerte nada malo. -acarició mi mano lentamente-

Alice: ¿Los he...matado? -dije asustada-

Hill: ¿Crees que eso lo causaste tú?

Alice: -Rápidamente pensé que lo que acababa de decir me pondría en peligro- ¿¡Me arrestarán!?

Hill: Por supuesto que no, te esconderemos en un lugar seguro, pero, debes confíar en mí. -Cogió un pequeño micrófono de su bolsillo y dijo- Ya puede entrar señor.

Alice: -Observé como un hombre muy peculiar entraba a la habitación, tenía un parche negro y al igual que Hill, vestía de negro.- No sois policías, ¿verdad?

Fury: Efectivamente, no lo somos, somos mejores. -miró mis cortes- ¿Cómo pudiste hacer explotar todos los cristales?

Alice: -decidí confiar en ellos- Sinceramente no lo sé. -Estuve tanto tiempo tumbada que decidí sentarme en la camilla del hospital para poder hablar mejor- Si de verdad queréis ayudarme, por favor, matadme. Puedo hacer daño a las personas... ¿Alguien más ha visto esas grabaciones?

Fury: El que hace las preguntas aquí somos nosotros, ¿entiendes? -Observó mi preocupación y me respondió- No, nadie aparte de S.H.L.I.E.D. las ha visto.

Alice: ¿Qué es... -nuevamente fui interrumpida por Hill-

Hill: Luego te lo explicaremos, ahora debes venir con nosotros, aquí no es seguro para ti. La prensa querrá hacerte preguntas, además, no estás preparada para el mundo exterior. - Observó la puerta por la que debíamos salir para finalmente decir- Nadie va ha matarte por no poder controlar tus poderes. -Miró a Fury y en sus miradas se entendía un "ya es la hora de irnos"-

Salimos al enorme balcón y ahí estaba un helicóptero esperándonos en el aire, la situación era peligrosa pero me las apañé para montarme. Pude ver que varias enfermeras salían al balcón a observar mi huida. ¿En qué me estoy metiendo?

[Recuerda darle a la estrellita]

Adoptada por Tony Stark [CANCELADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora