Sakura

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--¿Y bien Sakura Qué significa esto?-- ojalá ella tuviera esa respuesta.

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Sasuke no sabía pero ella e Itachi ya se conocían desde antes del accidente, fue por casualidad en un bar, él estaba sentado en la barra ahogado de borracho. La entonces Haruno trabajaba ahí como barista, no era la primera vez que él iba, siempre iba con una chica que aparentemente era su novia, pelo castaño y ojos negros, linda sonrisa.
Ese día ella no había aparecido, él llevaba ahí como dos horas pidiendo tragos ella no se los había negado pero al ver que su estado empezó a negarlos.
--Vamos preciosa, no puedes hacerme esto-- su habla fue más o menos coherente pero ella no podía seguir dándole tragos.
--Mejor regresa a casa-- le sonrió arrebatándole el caballito con tequila que había tomado de la chica de a lado.
--Ella me dejó, me dejó, no quiero volver a ningún lado, no sin ella-- dijo arrastrando las palabras.
Sakura suspiro hondo pidiendo paciencia. --Ella no vale pena-- trato de animarlo
--No vuelvas a decir eso-- se levantó enojado sin embargo debido a su estado cayó al piso, intento levantarse pero era inútil. Al ver que nadie pretendía ayudarlo la pelirrosa, resignada salió de la barra para levantarlo, hizo que se apoyará en su es brazos
--Estas hecho un fiasco-- le reprocho.
--Sakura-chan-- Kakashi el dueño del bar la llamo --Vaya, él esta muy mal-- La pelirrosa rodó los ojos, era más que obvio --Ino ya llego y puede cubrir tu lugar, llamare a un taxi y necesito que acompañes a Itachi a su casa y te asegures de que llegue con bien-- pudo ver la preocupación en la cara de la Haruno --Tranquila, él es amigo mio y necesito asegurarme de su bienestar, no puedo llevarlo yo porque estoy haciendo negocios, en agradecimiento te daré el próximo sábado libre-- Sakura tuvo que aceptar resignada. En el camino a la casa de él fue bastante... irritante no paraba de balbucear sobre su ex novia, lo mucho que la extrañaba y que sería difícil continuar sin ella. Cuando llegaron a la dirección que Kakashi le dio al taxista se quedo sorprendida era una gran casa y había que recorrer un camino para la entrada principal pues primero tenían que pasar por una gran reja negra. Dio el nombre de Itachi y de Kakashi y los dejaron pasar, lo ayudó a bajar del taxi y una señora muy hermosa con largos cabellos negros la ayudó para que entrará a la casa. --Lamento las molestias que Itachi te ha causado-- dijo haciendo una reverencia una vez que lo recostaron en el sillón --No ha sido ninguna-- Sakura le aclaro y le sonrió --Tengo que regresar, un placer-- le tendió la mano y se fue de ahí.

Pasaron dos años luego de eso, la segunda vez que lo vio fue cuando llevo su portafolios olvidado a las empresas Uchiha, lo había encontrado en la estación del metro, al ver que no era de nadie decidió husmear dentro de el y encontró un gafete con su foto y nombre al frente y justo arriba decía "Uchiha Corp." Y atrás tenía el abanico distintivo de la familia --¡Me has vuelto a salvar!-- exclamó sorprendido de que la misma persona que lo saco de as aquel bar a salvo, también había salvado su trabajo de todo el mes --¿Cómo podré compensarte? -- le pregunto aliviado pues los documentos que había ahí eran sumamente importantes para el ascenso en la empresa. Su papá los obligó a empezar desde abajo y escalar con esfuerzo y trabajo duro. --Deja de meterte en problemas-- le guiño el ojo mientras se iba de aquel edificio.

Tres años después lo encontró de nuevo, recordaba correr a lado de su camilla para llevarlo al quirófano, había sufrido un accidente automovilístico y necesitaban operarlo de urgencia --Itachi, no puedes dejarme. Aun tengo que salvarte de más problemas-- tomó su mano y siguió corriendo hasta llegar al quirófano. Vaya forma de encontrase.

A Sasuke lo conoció aquel día en la sala de espera del hospital, estaba preocupado por su hermano incluso se quedo a dormir ahí pues no quería irse y arriesgarse a que algo pasará. Cuando Itachi empezó a mejorar Sasuke la había invitado a salir. Ella no se negó era guapo, interesante y caballeroso. Se había perdido en aquellos pozos negros desde la primera vez mientras le decía que su hermano iba a estar bien. La sed de poder destruyó a la persona que había conocido, cuando su padre murió y dejo aquella condición en su testamento. Ella lo noto después del si acepto y ya era tarde.

La primera vez que lloro por culpa de Sasuke fue tras él para solucionar las cosas y el muy hijo de puta la dejo esperando, se levantó para ir al tocador y cuando salió de ahí arrastrando los pies y con la cabeza gacha choco con alguien, específicamente Itachi Uchiha. Él levantó una ceja y puso una mano sobre su cabeza --¿Quieres que hablemos en mi oficina?-- Ella accedió porqué necesitaba desahogarse, cuando le contó lo que ocurría el llanto no tardó en salir y él la abrazo --Es mi turno de sacarte de problemas--

Cuando le dieron el premio por su labor de investigación y paso al estrado a decir unas palabras paso la vista por todos los asientos buscando a Sasuke sin éxito, él había decidido no ir. Pero si vio a Itachi sonriendo y eso la hizo sentir aliviada. Lo busco por todas partes cuando acabo el evento.

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Itachi: Lo siento cariño, tengo una reunión importante pero no más que tú.
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En el baile de beneficencia le agradeció aquel gesto que tuvo con ella --No tienes que agradecer pero si insistes tanto baila conmigo-- y ella accedió porque le pareció buena idea y por que quería ver a Sasuke rabiar.

--Significa que él siempre esta cuando lo necesito-- le grito.

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