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Odiaba ir a caminar por las calles pero ahora sentía la necesidad de ir, al principio no le hice mucho caso pero mis ganas aumentaban mucho y no entendía porqué ni para qué. Mirando el piso mojado y personas pasar de un lado a otro era extraño ya qué casi nunca le encuentro sentido.

En un habrir y cerrar los ojos caí al piso, sentí el golpe en mi hombro y seguido de eso me tropecé con mi propio pié. ¡Vaya, que tonta!.

-¡¿Estás bien? ¿no te lastimaste?.-pregunto alarmado

-Podías fijarte por dónde caminas no vaya ser qué a la próxima termines atropellando a alguien.-me levanté con la ayuda suya, un raro ormigueo me dio al sentir su tibia mano, ni siquiera lo vi ya qué me enfoque a sacudirme la tierra

-¿Te llevo a un doctor? tu mano sangra y tu ceja igual. Lo siento

-No es necesario sujeto.-reí, diriji mi vista a la suya, de nuevo me quedé parada como tonta y sin hablar ¿porqué? pues porqué es Jos Canela

-Eres agradable, cualquier chica qué  se hubiera tropezado conmigo me echa hasta más no poder.-río un poco

-No soy igual, ¿cuál es tú nombre?.-pregunté haciéndome la intrigada, era obvio qué sabía cómo se llamaba.

-Jose Miguel ¿y el tuyo?.-extendió su mano tímido

-Ana.-sonreí, tome su mano.

-Bien, vamos te llevo a curarte no puedes irte así.-regreso su mano a su lugar e igual yo

-Nonono así está bien, aparte tengo que ir a comprar cosas y voy tarde. Y lloverá José.-me sentí rara decirle así

-Anda, es más yo te llevo a comprar lo que necesitas Ana. Vamos, acepta.-sonrió delineando sus perfectos labios rosados

-Está bien José.

-Dime Jos, se escucha viejo el 'José'.

Asentí, me guío a su auto, un bonito coche color guindo de 4 puertas y muy cómodo por dentro.

-Está muy bonito tu auto Jos.-observé su auto por dentro.

-Fue un regaló de mi abuelo, es mi primer coche qué e tenido. Tiene 2 años conmigo yo tenía 19 cuándo me lo regalarón y es muy especial.-encendió su auto

-¿Especial?.

-Si, mi família se a subido aquí, mis abuelos hasta mis amigos. Sólo qué la única que no se ah subido aquí es mi novia porqué no tengo también siento qué no merece subirse aquí y el día qué la suba será porqué es la chica indicada. Un hombre siente cuándo es la indicada Ana bueno al menos yo.-me miró y regresó su vista aquel semáforo en rojo qué ahora es verde

Tragué saliva.
-Entonces ¿que hago aquí?.

-Bueno es que no nos íbamos a ir caminando teniendo coche aparte lloverá.

-Correcto, qué tonta.-reí sin ganas

Después de un largo rato de caminó llegamos a ¿su casa? ¡Dios mío acabó de llegar a la casa del mismísimo Jos Canela! ¡mi ídolo!.

-Entra, no hay nadie.-cerro la puerta de la casa y se sentó a un lado mío, moría de nervios

-Bien ¿y qué hacemos aquí?.

-Voy a curarte del golpezo qué te di.

Fue por alcohol y un algodón, tomó mi rostro delicadamente y empezó a curarme la ceja y la mano. Su respiración estaba a centímetros de mis labios y en ningún momento se acercó más, me veía pero hasta ahí.

-Viéndote bien ¿eres la que se paro enfrente mío aquella vez del tráfico?.

-Si, lo siento no era mi intención hablarte así pero quería llegar ami casa a dormir.-me disculpe apenada.

-No te preocupes, no pasa nada. Es que te vi de cerca y tu rostro me recordó al de aquella vez.

No dije nada y el tampoco, acabó de curarme, dejo las cosas en su lugar y vino de nuevo hacía mi.

-Si sabes con ¿quién estás verdad?.-pregunto

-Con José Miguel ¿no?.

-Así es pero me refiero a  que estás con un cantante de una boyband.

-¡¿Enserio?!.-pregunte asombrada, era mentira obvio qué lo conocía

-La banda se llama CD9, tenemos concierto esté 11 de Agosto, estoy muy emocionado.

-Qué bien Jos, tranquilo muchas chicas de aquí son muy lindas y dudo que te agredan.

-Me refiero a cantar aquí.

-Pero si ya vinieron el año pasado.

-Amm si pero como quiera- río- ¿ya has ido a nuestros conciertos?.

-No, sólo qué una amiga me dijo y me acordé.-menti

Asintió, me levanté del sofá y me diriji a la puerta.

-Gracias por todo Jos, fue un gusto platicar nos vemos luego.

-Dame tú número de teléfono.-dijo apenado

¡Me pidió mi número!

-Es el *************, llama cuándo quieras.-sonreí

-Gracias Ana, te acompaño.

-No gracias, mejor quédate aquí.

-De ninguna manera, yo voy a dejarla hasta su casa señorita.

-Ire a comprar cosas Jos te lo dije hace rato, de verdad no es necesario qué me lleves.

-No insistas, anda sube.-me indicó el auto.





































-Gracias por llevarme a comprar la comida.

-No agradezcas, era lo menos qué podía hacer por la caída.

No dije nada, el tocio falsamente eso se notaba. Lo conocía tan bien qué podía jurar saber cuánto le mide.

-Perdón no quería decir eso.-se rasco su nuca

-De nuevo muchas gracias, anda ya vete porqué está lloviendo.

-Me gusta la lluvia y más cuándo estoy acompañado de gente buena onda cómo tú.-cerro puño y chocamos

-Tu también eres muy agradable, bien ahora ya es tarde.

-Adiós Ana.-beso mi mejilla nervioso.

-Adiós Jos, fue un increíble día.-sonreí como boba

-Perdón por la caída, nos vemos luego.-sonrió y se subió a su auto.

Entré a mi casa y me asegure qué ya se hubiera ido, mis papás y mi hermana me estaban viéndome raroy cruzados de manos.

-Te acabas de meter en la boca del lobo Anita.-advirtió mi hermana Sofía

-Era ese Jos ¿cierto?.-preguntó papá

-Si papá ¿porqué?.

-Hija, debes de saber qué el tiene el tal fandom muy importante y sabes como les va a las novias de los chicos.-habló mamá

-Me caí por culpa de el y mía, me llevo a su casa a curarme y después me llevo a comprar la cómida y por último me trajo ami casa papás, no se alarmen.

-Asi empiezan, se lo qué te digo.-hablo mi mamá, cada quien se fue a sus actividades y ami me dejaron sola en medio de la casa.




Dudaba qué llegaramos a más, un ídolo y una fan jamás se involucran al menos en las fanfics sí, pero eso sólo es imaginación.

Ahora entendía el porqué ir a caminar por las calles.

●Cierra Los Ojos●/Jos CanelaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora