Capítulo 5. Un Nuevo Desafío

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La Estación Espacial se agitaba, no era ocasionada por alguna fuerza externa sino por los mismos visitantes que allí se encontraban, debido a el escape del Crucero Espacial de Oxar, muchos de los habitantes que se hallaban a resguardo dentro de la Estación se acercaron rápidamente a mirar el paisaje del espacio por las distintas ventanillas que esta proporcionaba, la mayoría se alegraba que el ataque al fin terminara y daban gracias a los soldados de La Confederación que lucharon para alejar a los piratas, quienes estaban muy ocupados acercándose al Planeta Droe para comprobar el porque la retirada de estos últimos, puesto que, no habían logrado dañar al Crucero lo suficiente para que estos se fueran y/o rindieran. Tras la expectación inicial, la zona de aterrizaje estaba muy transitada, con muchas naves saliendo de las placas de alunizaje para despegar y volver al planeta, llevando mucho tiempo debido a los registros sobre cada nave que llegaban o se iban de la Estación que el pobre Vy'keen en la entrada debía llenar, pero fuera de todo esto, la tranquilidad se sentía en el ambiente.

Temis y Azur bajaban a la zona de puestos por el ascensor, apoyándose ambos al costado y atrás de este respectivamente, debido a las heridas ocasionadas por la batalla. Cuando se detuvo, ambos caminaron intentando no tropezar, lo que se les hizo fácil, debido a que los pasillos se encontraban algo vacíos, por lo que entraron en la taberna, donde pocos viajeros se hallaban sentados en la barra y muchos menos en las mesas, acercándose a una y tomando lugar. Temis sacó de su mochila algunas vendas, cubriéndose su brazo izquierdo y dándole las restantes a Azur, quien se las amarraba a su hombro, a la vez que el androide se les acercaba, notándolos exhaustos y hambrientos, ofreciendo si querían comer algo sin tardar debido a que su compañero chef había sido reparado.

-Jajaja, veo que el viejo cumplió su promesa- dijo Temis ordenando helado y comida congelada, mientras que Azur ordenaba un tazón cocinado de distintos tipos de insectos.

Pasaron unos minutos descansando, hasta que el nuevo androide se acercaba llevando un delantal de cocinero y su orden en ambas manos, apenas puso este los platos en la mesa, ambos comieron a toda prisa como si no hubieran comido en mucho tiempo, ordenando más sin haber terminado antes su porción, yendo el androide rápidamente a la cocina cumpliendo sus demandas.

-Si me permiten un comentario subjetivo, sus órdenes son fáciles de atender jovencita, es un placer atenderla...pero en cuanto a usted, en el Sistema Shinka-XXII la raza Insekter habría considerado su orden como homicidios- decía con su voz robótica, mirando a Azur-. Debería darle vergüenza, fuera de mi comentario...gracias por comer aquí, disfruten y vuelvan pronto- dijo alejándose.

Azur miró con seriedad al androide, a la vez que volvía a comer, pasando el rato y terminando ambos satisfechos.

- ¡Ahh, listo! Ya estoy recuperada- dijo Temis estirándose en la silla y sosteniendo su panza al igual que Azur- me sorprendió que esa granada no te haya volado la cabeza-.

-Gracias a mi piel puedo resistir impactos como esos, cambiando de tema ¿Qué haremos ahora? -.

-Pues primero repararemos mi nave, aunque si tienes una podríamos salir más rápido de aquí-.

-Ya no tengo nave, cuando llegué al sistema aterricé en Droe y paseaba por el lugar hasta llegar al campo para dormir un rato, cuando desperté los habitantes empezaron a evacuar, los piratas de Oxar destruyeron mi nave, aunque pude devolverles el favor...- dijo levantándose mientras continuaba-. En fin, si no tienes dinero tengo un poco, algo podremos hacer-.

Temis también se levantó pagando la cuenta, yendo ambos hasta la Zona de Aterrizaje, mientras contaba las Unidades de Azur más las suyas, que con los gastos que habían realizado, les quedaban 152.000 Unidades. Se acercaron a hablar con el Vy'keen encargado, diciéndole Temis que ya tenía para pagar los costes de reparación, este último sacó su nave a la placa de alunizaje, donde le echó esta vez un buen vistazo incluso entrando para comprobar las funciones disponibles, saliendo este y dando su veredicto: La nave ya no tenía forma de repararse completamente, argumentando que viéndola detalladamente solo permitiría un par de saltos entre los sistemas si era reparada pero no garantizaba el funcionamiento óptimo de esta, por lo que viajar en ella ya era casi imposible rebajando el precio anterior. Temis se tomó un momento para reflexionar, sabiendo esto, debía deshacerse de la nave de Ras, <<Algo importante para él>> pensó, sin embargo, no podía dejarla allí, ya que las naves abandonadas eran reclamadas por la misma Estación para venderlas o extraer sus piezas, finalmente tomó la decisión de reparar lo que se pueda de la nave, comprar una Célula de Transposición y salir simplemente del sistema, puesto que, si no podía movilizarse, tampoco podría llegar hasta Ras o al Centro del Universo. Le pidió al Vy'keen reparar la nave, seguido de ir a los puestos de comercio junto a Azur a comprar el combustible para el Hiperturbo, comprándolo quedándose al final con solo 36.000 Unidades. Mientras iban de vuelta a la nave, notaron como algunos soldados de La Confederación caminaban por el pasillo llegando a la taberna, pensando ambos, para descansar. El Vy'keen finalmente terminó de reparar la nave, pero admitió que no pudo reparar el mapa galáctico, dejándola otra vez saltar a su suerte por el Hiperespacio, de todas formas, no sabía cómo utilizar el mapa para encontrar algún sistema en específico y Azur admitía exactamente lo mismo, diciendo que había llegado al sistema tan solo porque era el siguiente en su mapa galáctico, ambos subieron a la nave tomando Temis el control, acostándose Azur en el suelo, a la vez que despegaban, volviendo nuevamente al espacio. Lo primero que notaron fue como el Crucero de La Confederación se hallaba muy alejado de la Estación, además de muchas naves rondando la atmósfera del Planeta Droe, mirando por última vez el Sistema Nor, recalibrando las funciones y activando el Mapa Galáctico, dando una mirada sonriente a Azur para asegurar que estaba listo, quien semi-dormido gruño un poco para responder, oprimiendo el botón del Hiperturbo y abriéndose el ahora denominado Túnel del Hiperespacio, la nave se movía lado a lado de vez en cuando, mientras Temis con su cuerpo pegado al asiento sonreía de la emoción. Luego de varios segundos, la nave se detuvo de golpe, dando enseguida alertas que no se lograban leer, abriendo paso a un extenuante y bello paisaje, donde solo se podía divisar un planeta y su luna demasiado alejados de su posición.

A No Man's Sky StoryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora