Toda vida tiene fin

Capítulo 5

Realmente me siento mal, no sé que pensar, todos me odian pero Daniel no me ha demostrado ese odio aún, aunque también es cierto que me conoces sólo de hoy. Han pasado muchas cosas durante este día y tengo que procesarlas, con mucha delicadeza para no hacerme más daño del que me hago día a día.

- Bien... y... ¿a dónde vamos? - digo espectante de una buena respuesta.

No para de mirarme y eso hace que me ruborize aún más de lo que me encuentro, la pregunta la he soltado medio en el aire, porque el ni caso me ha hecho o eso creo. El silencio es tan normal en mí, pero entre él y yo, ese silencio, lo encuentro incómodo, quizás demasiado incómodo.

- Vamos a aquel sitio dónde tu te sientas cómoda y no mientas. - al fin me responde, pero hubiese preferido otra respuesta.

Mantengo el silencio, realmente no se dónde me encuentro cómoda para no mentir, un momento... se supone que el no sabe que yo le he mentido. ¡Mierda! Se ha dado cuenta de que le he mentido, ahora si estoy en un buen lío.

- Daniel, no sé cual es ese sitio en el que no debo mentir porque me sentiré cómoda. - espero que cuele, tiene que tragárselo para poder librarme de esta. - No mentí, así que no entiendo el por qué de todo esto.

Se ríe como si yo dijiese algún chiste y no ha sido así, sólo he vuelto a mentir sobre mentiras, me resulta un tanto irónico lo que estoy haciendo.

- Desde luego que sí has mentido.

- No, no lo he hecho. - intento que en mi voz se note algún tono de enfado y lo consigo.

-Sí lo hiciste, me dijiste que tenías muchas cosas que hacer. - dice con ánimos de continuar. - En cambio estás aquí conmigo.

Me ruborizo porque acabo de quedar como una auténtica estúpida frente a él y eso me causa cierta vergüenza, aunque no se por qué crea este efecto en mí. Aunque me encuentro aliviada de que no haya sido nada de mi estado de ánimo y sólo haya sido la bobería de que tenía cosas que hacer que sólo dije para cortar y terminar de hablar con él durante esa llamada inesperada.

                                                                                                                 *   *   *     

Hemos llegado a un parque donde apenas hay gente y al cual nunca había venido anteriormente. Apenas hay gente y agradezco de que este parque se encuentre lejos, porque me ha dado la oportunidad de hablar con Daniel sobre muchísimas cosas durante el camino, es mas, siempre contestaba a mis preguntas muy sincero, tanto con la mirada como con el tono en el que me respondía a las cuestiones. Al parecer mi número se lo pidió a un amigo con el que estaba ayer, se llama Miguel, me lo ha descrito un poco por encima y me quedé con lo más sencillo de su largo discurso. Es bajito, de diecisiete años de edad, moreno y como me dijo el con un tono que imponía "canarión", al parecer es su mejor amigo, es como su hermano. Dice que cogió mi número porque en la fotografía le parecía muy mona, pero que se equivocó, porque cuando me ha visto en persona pensó que era preciosa. Cuando el me ha dicho eso, simplemente me he avergonzado, no he negado lo que me ha dicho, simplemente he sido normal por momentos, el crea esta reacción en mí, la reacción en la que me convierte en alguien normal y sólo porque me siento querida por el, necesito y quiero tenerle cerca.

- Tus ojos me encantan, parecen perlas.

Adoro que me diga esas cosas sin perder su sonrisa, es tan adorable que nunca me cansaría de él. Una vez más, logra ruborizarme y hacerme sentir con cierta inferioridad a su lado, inferioridad que no molesta, en cambio me encanta sentirme así y me hace sentir bien, tanto como para sonreír y que no sea de una manera falsa como de costumbre. No soy lanzada así que no sé que contestarla y permanecemos un tiempo en silencio.

- Gracias, supongo. - murmuro.

- Supones bien, la verdad que no te esperaba tan guapa, eres increíblemente bella.

Me ruborizo aún más. Continuámos hablándo cierto tiempo cuando alguien me tapa los ojos con las manos y me hace la típica pregunta de "¿quién soy?". Desde luego Daniel no es, porque se encontraba hablándome hasta que me taparon los ojos y paró de hacerlo justo antes de que hiciera la pregunta esta persona.

Le toco las manos para intentar reconocerla, subo lentamente mientras río preguntandome quien es, al llegar a la muñeca noto que tiene una chaqueta de manga larga, por las tres líneas que hay supongo que es adidas. Pienso que son las 19:30 y que la llevará porque hará frío pero inmediatamente niego mentalmente, porque no hace nada de frío. Mi mente es rápida así que pienso en alguien.

- Manga larga cuando no hace frío, ¿Jessie?

Enseguida me destapa los ojos y me viro, es Jessie, he acertado. Me crece una sonrisa de oreja a oreja, ha pasado meses desde que no la veía y que me de esta sorpresa es impresionante, es muy importante para mí.

- Melona, ¿cómo lo has sabido? - dice con un tono suave y una sonrisa muy sincera.

Debo admitir que su sonrisa me encanta y tiene esa manía de decir melona, no querría perderla por nada del mundo.

- La chaqueta adidas de manga larga, que tanto te gusta la llevas puesta cuando no hace frío y esa piel tan suave que tienes. - digo satisfecha de haber acertado. - Te echaba de menos Jessie.

La abrazo con tanta ternura que es incalculable saber cuanto la quiero, nos conocimo hace un año, resulta que ella no solía confiar en nadie y se abrió conmigo, es mi media naranja. Hace y ha sufrido igual que yo, pero quizás ella muchísimo más y siempre me dolía no poder estar a su lado y abrazarla en sus peores momentos. Nada ni nadie, hoy día, logrará separarnos, ambas lo tenemos muy claro. Tiene el pelo largo, lacio y oscuro, grandes ojos verdes que tanto me encantan al igual que su sonrisa y tez blanca. Es perfecta de cabeza a pies, con un físico bonito y casi perfecto. Pero odia su físico igual que yo y a veces es muy cabezota cuando le digo que no esta en lo cierto cuando dice que está gorda o cosas de ese tipo.

Daniel está de pie detrás de mí, creo que debería presentarlos, pero me da algo de vergüenza.

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Hola bebes, aquí tenéis el nuevo capítulo, sí es un poco cutre, espero que no os importe (que sé que sí).

Bueno tengo malas noticias y buenas jiji, primero las malas: no tendré internet durante una semana y eso quiere decir que no subiré capítulo.

Y las buenas es que intentaré buscar internet para poder subirlo y que en cuanto pase esta semana subire el capítulo 6 dejando un día de margen para el capítulo 7.

Espero que sigáis leyendo mi novela, cada vez somos muchísimos más y eso me agrada bastante la verdad y mucho. Dudas, preguntadlas cuando queráis, comentad y votad si os  gusta.

Muchísimmmas graciass mis amoress y besitoos jijiji