|Capitulo X|

0 0 0
                                    

Al pasar los días, más me acercaba a mi meta de correr 5km poco a poco me esforzaba más y eso me encantaba. Al igual... se acercaba el día de entrar a la universidad.
Sentía ansias y nerviosismo. Y no les voy a mentir, también me la pasaba pensando en Damon. No sabía nada de él, ni siquiera Landon y eso me desesperaba. Realmente era bueno en desaparecer.

Pensaba en que pasaría cuando lo tuviera frente a mi, ¿realmente me lanzaría a sus brazos o le daría una gran bofetada por ser un ebrio problemático que huye de las situaciones más inesperadas?.
No lo sabía, pero de lo que sí sabía es que quería besarlo...besarlo con toda pasión.

***
Jamie desfilaba ante mi, diferentes vestidos mientras yo observaba el barniz de mis uñas... blanco.

-¿Te gusta más el rosa o el dorado?
Me preguntaba. Señale aquel rosa pálido.
Sonriente se fue a probar el vestido.
Jamie elegía un vestido para su cena de cumpleaños con su gran amor que sería mañana... Pero yo sabía que Landon le iba a organizar una fiesta sorpresa en su casa.

De repente Jamie salió con aquel vestido rosa y unas plataformas.
-¿Me veo bien?- preguntó
-Luces completamente hermosa.

Ella no dejaba de mirarse en el espejo y hacia muecas mientras volteaba.
Me reí.

En seguida se escuchó el timbre de la puerta.
-Yo voy - dije y me retiré.
Baje las escaleras descalza y abrí la puerta. Ante mi me encontré al mismísimo Ezra Flynn.
-¡Hola!- exclame.
-Hola, quería saber cómo estas- dijo
-Excelente.- me limité a decir
-Quería venir antes pero no me fue posible.
-No te hubieras molestado, un mensaje bastaba
-La verdad quería aprovechar para verte y para invitarte a cenar
¡Rayos!
-Claro, está bien- sonreí
- Perfecto, pasó por ti a las ocho
Sonrió y se dirigió a su coche.
Cerré la puerta y medite. ¿Qué rayos estoy haciendo?
Tal vez debería enamorarme de un tipo como Ezra, no como Damon. Pero realmente Damon hacía vibrar mis emociones y nadie podría competir contra eso.

***
Ezra llegó en punto de las ocho y yo bajé con unos jeans, mis converse y una camiseta.
Abri la puerta y un Ezra con pantalón de vestir y camisa se asomó por esta.
-Hola, te ves bien- dijo extrañado ante mi vestimenta
-Gracias... Te parece si vamos por pizza?
-Porque supuesto, lo que tú quieras
Me encaminó al coche, abrió la puerta y me introduje en el.

En el coche note como Ezra estaba algo ansioso. Claro que supuse que era porque él venía muy formal.
-Creo que vengo muy formal- dijo
-Si, creo que si- reí.
Mostró una simpática sonrisa y dijo.
-Porque suerte traigo ropa informal en el coche.
-Vaya, si que estás preparado para toda situación
Reímos.

Una vez en la pizzería escogí un lugar cerca de la ventana mientras esperaba a Ezra que estaba en el sanitario cambiando su ropa formal.
Pasaron unos minutos y de repente vi que Damon entraba a la pizzería.
¡Oh por Dios!
Damon vestía sus habituales jeans negros con chaqueta y botas.

Me miro y sonrió. Se encaminó hacia mi, y cuando pensé que se iba a sentar aquí, llego Ezra y se sentó. Damon tomo asiento en la mesa que estaba antes de nosotros. Ezra estaba de espaldas a el, y yo con solo inclinar un poco la cabeza podía ver a Damon enfrente de mi.
-¿Te parece si pedimos una pizza hawaiana?- pregunto Ezra.
Quite la mirada de Damon y la puse sobre Ezra.
-Odio la piña, preferiría peperoni- respondí
-Peperoni será.- sonrió y fue a pedir la pizza.
Al quedarme sola note la mirada intensa que Damon ponía sobre mi. Tenía un palillo entre los dientes y sonreía.
-En unos minutos nos traen la pizza- decía Ezra mientras llegaba a la mesa y me limité a sonreír mientras veía de reojo a Damon.
Después de minutos nuestra pizza había llegado.
No les niego que sentía nerviosismo ante Damon. En cada momento el inclinaba la cabeza y me observaba.
Mientras yo devoraba mi pizza rápidamente.

Ezra hablaba sobre la universidad y realmente no le prestaba mucha atención. Damon seguía observandome y trate de que no notará mi nerviosismo. En ese momento se levantó de su mesa y venia hacia nosotros.
Ezra lo vio confundido y dijo.
-¿Se te ofrece algo amigo?
Damon sonrió y me miró.
-Solo quería saludar. Creo que mi cita me dejó plantado
¿Su cita?
-Un gusto viejo, eres Damon ¿No? Ezra le tendió la mano y Damon le respondió el saludo.- Ezra.
-El mismo...muy bien Ezra supongo que no te molestará que compartamos pizza.

Damon se sentó a mi lado empujándome, tomo un trozo de pizza y le dió un mordisco.
Damon puso la mirada en mi y yo solo continue tomando refresco del popote. Damon sonrió.
-¿No perteneces a la familia ST. John?- pregunto nuevamente Ezra.
En ese instante la sonrisa burlona que mantenía se borró por completo.
- Te sugiero que si quieres conservar tu cara intacta, no hagas preguntas- contesto fríamente.
-Tranquilo viejo, solo quiero conversar

Ezra levantó sus manos en modo de defensa. Damon tomo un palillo y lo puso entre sus dientes.
-Quieres tranquilizarte Damon- dije
-Por supuesto- dijo y sonrió sarcásticamente.
Damon tomo mi mano.
-Tienes unas manos tan suaves- dijo. Entrecruzó sus dedos con los míos y elevó su mano junto a la mía dándole un tierno beso.
-¡Oye viejo suéltala!- exclamó Ezra y golpeó la mesa con la mano.
-No te voy a robar a la chica Flynn, a menos de que ella quiera irse conmigo- dijo en tono de burla.
-¡Basta de estupideces Damon!-exclamo Ezra levantándose de la mesa.
-¿Cuánto apostaste Flynn?¿300 dólares? - preguntó Damon
¿Apuesta?
-¿De que demonios hablas viejo?
- Tienes 30 segundos para irte Flynn antes de que te rompa la cara- exclamó Damon mientras sostenía mi mano aún.
-¿De que apuesta hablas Damon?- pregunté confundida
Damon soltó mi mano.
-Tic, Tac Flynn- Damon señaló su reloj.
Ezra tomo el móvil de la mesa y se fue.
Me levanté de la mesa y fui tras Ezra por una explicación, abrí la puerta y exclame
-¡¿De que apuesta habla Ezra?!
Se detuvo en seco y volteó.
-Lo siento Nora.
Se limitó a decir y se fue.
¡Maldito imbécil!

Me senté en la orilla de la banqueta y recapitulaba una y otra vez aquel momento.
Damon salió de la pizzería y se sentó a mi lado.
-Nora
-¿Como sabías de la apuesta?- pregunté.
Sostuve mi cara sobre mis manos encima de mis rodillas juntas.
- Es típico de Flynn, lo hizo con Rachel

¡Maldito imbécil, mil veces maldito!

-Es un imbécil- dije
-¡Hey! Pensé que no decías malas palabras- dijo sonriente
-No me conoces aún
Reímos juntos y luego coloco un mechón de mi cabello suelto detrás de mi oreja.
Era inevitable que me sintiera nerviosa ante el. Tenía tantas ganas de que me rodeará con sus brazos. Podía oler su penetrante fragancia que me volvía loca. Sus manos varoniles y todo el, me hacía pensar lujuriosa mente.
-Damon
Asintió con la cabeza.
-Lo que dijiste aquella noche que estabas ebrio.... ¿era verdad?
-¿De que estoy enamorado de ti?
Asentí.
Se levantó y me tendió la mano para levantarme.
Rodeo mi cintura con sus fuertes brazos y me atrajo hacia el.
Se fue acercando lentamente a mis labios y me plantó un tierno beso.
Sentí su calidez y la gran suavidad de sus labios. Comenzó a besarme con pasión, mordía con ternura mis labios y nuestras lenguas danzaban en un abismo de perdición. Realmente esto era bueno.

No podía pensar en otra cosa pero si sabía que Damon era precisamente lo que yo llamaba tentación

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 22, 2019 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

|El Amor Realmente Duele Sin Ti|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora