Paredes destruidas que simulan darme asilo,
me dan un poco de respiro antes de hundirme en la miseria,
y en mi mente los desastres hacen de inquilinos,
desde la noche que inhalé la más severa de mis consecuencias.
Con sabor a sucio en mi boca y un amasijo de pensamientos vacíos,
me pregunto si esto es la realidad o es un sueño siniestro,
con sombras a mi alrededor que bailan en honor a mis vicios,
para decirme que no he descendido lo suficiente en este infierno.
En la mesa hay una entrada para el espectáculo más perverso,
son líneas blancas tan perfectas junto a un cenicero,
esas que irrumpen hasta en mi espina dorsal, me dan alas para volar,
y me dejan soportar el peso de esta oscuridad.
Disfruto del aroma sangriento que brota de mi nariz tras un respiro,
mientras me aturde el silencio, los fantasmas se mofan de mi destino,
pero la suerte me complace con voces que son música para mis oídos,
unas que discuten para saber cuál de ellas me arrastrará al abismo.
Empiezo a ver criaturas que solo pueden verse en cuentos de hadas,
un elefante verde surcando las nubes para caer justo en mis entrañas,
con ilusiones que se hacen peor con el tiempo,
justo antes que los demonios se roben mi último aliento.
La decadencia es inminente,
y esa sonrisa demente no se borra de mis dientes.
Alucinaciones que traen emociones,
con un dolor que aniquila mis articulaciones.
Poco a poco se desvanece todo lo que percibo en el exterior,
voy perdiendo en euforia y me vence el descontrol,
mientras me despido tras una caída libre que me deja sin noción,
y mi corazón late cada vez más lento, tal vez en señal de un adiós.
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Vicios y placeres (Vol. 2)
PoetryUna dama hace de la seducción y la mentira una rutina solo por superar un desamor, pero sin darse cuenta, el placer la va conducir a un camino demencial repleto de vicios. Ganador de Premios Luz de Luna - Noviembre 2018
