I | ❀

4.7K 346 27
                                    

~•~

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

~•~

— ¡Jefe!— uno de los subordinados de Chūya entro a la habitación apurado, haciéndolo despegar la vista de sus papeles—. Tiene que ver esto.

— Estoy ocupado— dijo sin más.

El pelirrojo se estaba ocupando de un nuevo trabajo que le habían encargado pero se encontraba saturado de papeleo así que se lo encargado a sus subordinados; era sobre una persona que ha amenazado con acabar con la Port Mafia, además de que ha estado matando a unos cuantos miembros, y eso no lo podían permitir. Pero a pesar de ello no le dio mucha importancia, mucha gente en la ciudad quería lo mismo, acabar con la mafia.

— Dice ser un antiguo miembro de las ovejas.— sus palabras cambiaron todo.

En menos de un segundo el mafioso se encontraba en dirección a la habitación donde se encontraba la persona. Miles de preguntas se le vinieron a la mente, ¿Cómo era posible? Se supone que años atrás la Port Mafia había acabado con todos ellos. Estaba comenzando a sudar frío, esto le estaba preocupando.

Al entrar a la habitación, se encontró con un sujeto cubierto con una gabardina de cuero negro, el pelirrojo fue precavido en todo momento, sin embargo era totalmente capaz de manejar la situación así que le pidió a su subordinado que se retirará junto a los demás que se encontraban en la habitación dejándolos solos, después se fue acercando poco a poco pero a paso firme cuando estuvo a solo un metro se detuvo, el sujeto en todo momento mantenía la mirada al suelo dejándolo aún más con la duda.

— No se cuál es tu plan infeliz, sin embargo no permitiré que..— hablo fríamente, pero fue interrumpido, y al escuchar su voz quedó helado.

— Ha pasado mucho tiempo, Chūya— levantó la mirada, dejando a la vista su rostro—. ¿Me recuerdas?

— Hana...— pronunció su nombre, y después no dijo más, se quedó sin palabras.

Sin duda había cambiado mucho desde la última vez que la vió, deseándole suerte en su misión con una sonrisa alegré con la esperanza de que volviera a salvo pero no fue así, recibiendo la noticia de que todos los miembros de las ovejas habían sido asesinados, ahora su rostro reflejaba enojo y sufrimiento, no quería imaginar por lo que estuvo pasando todos estos años, sola.

La analizó, su cabello marrón ahora era corto hasta la barbilla a comparación de su larga melena con la que la recordaba en sus años de adolescente, su ojos cafés ya no reflejaban ese brillo de esperanza si no de sufrimiento. A no se asemejaba para nada a la linda niña que lograba ponerlo nervioso con solo dedicarle una sonrisa.

— Ya no eres la misma.— hablo, con la voz rasposa.

— ¿Qué esperabas?—pregunto como si fuera obvió, con una sonrisa burlona pero totalmente falsa —. Después de haberme abandonado.

— No te abandoné.— se defendió, seguro de lo que decía.

— Lo prometiste...—murmuro, hasta que poco a poco su furia se fue mostrando — ¡Tú lo prometiste! Me prometiste que te quedarías a mi lado, que no me abandonarías.... Solo fueron palabras bonitas.

— Pensé que habías muerto— explico, dolido por lo que estaba pasando, y también al recordar el pasado —. Todas las ovejas murieron.

— ¿Pues adivina qué?— entrecerro los ojos, dándole una pequeña sonrisa de burla —. Yo no. Escúchame muy bien, Chūya. Esta vez seré yo la que te prometa algo y lo voy a cumplir, eh— afirmo, con certeza. Convencida de que lo cumpliría, y con enojo prosiguió: —. Acabaré con todos, con cada uno de los miembros de la Port Mafia, vengaré a mis hermanos... Y tú serás el postre mi querido Chūya.

A pesar de los años, al escuchar sus palabras algo dentro de él se rompió, no quedaba nada. Nada de la linda chica que lo hacía suspirar, que lo hacía tartamudear cada vez que la tenía cerca, que lo motivaba a seguir viviendo cada día, nada.

~•~

Corruption [✿] Chūya NakaharaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora