Cásate conmigo [Paulo Londra y tú]

Nuestro primer beso

Me mostró la prueba de embarazo la cual decía que estaba esperando un hijo, las lagrimas comenzaron a caer después de que Paulo me diera la noticia, estaba embarazada a los 16 años de edad y su "padre" no quería hacerse cargo del bebé, no sabía cómo reaccionarían mis padres simplemente no sabía que iba a ser de mi vida después de todo esto, no quería un hijo a esta edad...

-No se que voy a hacer, Martin no se va a hacer responsable, mis padres estarán muy decepcionados de mí-le decía a Paulo entre sollozos mientras él me consolaba- No quiero un hijo Paulo.

-_____, pero lo hecho, hecho está.

-Aún hay solución-sequé mis lagrimas.

-No estarás pensando en abortarlo ¿o si?-dijo serio.

-Entiéndeme Paulo, Martin no se quiere hacer responsable, yo sola no podré con tanto, no quiero traer a un bebe al mundo para que sufra.

-Pero Martin es un idiota, te dije que yo te apoyaría en lo que sea...

-¿De que hablas?-lo miré

-Yo puedo hacerme cargo del bebé-dijo muy seguro de sí.

-¿Estás loco? Si ni siquiera nos conocemos para tener una relación, menos para un matrimonio o algo parecido.

-Pero podemos conocernos más e intentarlo-dijo- Me gustaste desde aquel día que nos presentaron en el departamento de Seven- soltó de repente.

-Y después te fuiste y me dejaste aquí sin saber nada de ti...-dije fría.

-Quería escribirte lo juro, pero estaba muy ocupado trabajando.

-¿Y así quieres hacerte cargo de un bebé?-le dije enojada.

-Pueden venir conmigo en cada viaje que haga-dijo calmado.

-¿Estás consciente de toda la responsabilidad de conlleva hacernos cargo de un bebé?

-Si y por eso quiero ayudarte, quiero que vivan bien los dos.

-¿Lo harías por mi?-Pregunté incrédula.

-Por supuesto-dijo seguro.

-Pero no puedo dejar todo así como así e irme contigo, tengo que hablar primeramente con mis padres para darles la noticia-dije mirándolo.

-¿Cuando hablarás con ellos?

-Esta noche y quiero que estes presente-dije segura.

NARRA PAULO:
Cuando _____ dijo que quería que estuviera presente, los nervios me invadieron, aunque estaba decidido a dar este gran paso, me preocupaba que dirían sus padres ya que ella es muy pequeña todavía tiene 16 años y yo estoy a punto de cumplir los 20, puede ser que no la dejen tener el bebé, o que no la dejen formar una familia conmigo.

-Si, estaré contigo-le respondí de la misma manera.

Se escucho la puerta y varios ruidos en la parte de abajo.

-¿_____?-Gritó una voz femenina desde el living.

-Mis padres-dijo ____ abriendo los ojos como plato.

-Es tiempo-la tomé de la mano tratando de calmarla.

Bajamos y ahí estaban los padres de _____ que aunque no los conocía, sabía que eran ellos.

-¿Quién es tu amigo?-dijo la señora con una sonrisa mientras se levantaba del sofá para saludarme.

-Es mi novio ma-____ me miro, estaba muy nerviosa, lo podía notar en su mirada.

-Me llamo Paulo-dije estiré el brazo para saludarla.

-Mucho gusto Paulo, soy Minerva, madre de _____- dijo dulce.

-Y el es mi padre-dije señalándolo.

-Un gusto señor-estreché su mano.

-Mucho gusto, mi nombre es Ricardo.

NARRA _____:
Presenté a Paulo a mis padres y después de eso no supe que decir, no encontraba las palabras para decirles lo que estaba pasando.

-Papá, mamá, tenemos algo que decirles-nos sentamos en el sofá y mis padres imitaron la acción.

-Paulo tomo mi mano-¿Que pasa hija?-preguntó mi madre.

-Hay algo de lo que queremos hablarles-tomé aire-Estoy embarazada.

-mis padres se quedaron atónitos-¿Que acabas de decir?-dijo mi madre tapándose levemente los labios.

-Que estoy embarazada ma-repliqué aguantando las ganas de llorar.

-Bueno y ¿que piensan hacer?-preguntó mi padre seriamente.

-Ya hablamos sobre esto y decidimos tenerlo-habló Paulo.

-¿Y de que piensan vivir? ¿A que te dedicas?-le preguntó mi padre a Paulo.

-Yo soy cantante y siendo sincero no me va tan mal económicamente, puedo mantener a su hija-respondió completamente en calma.

-¿Están seguros de lo que están diciendo?-preguntó ahora mi madre, no podía creer lo que le habíamos dicho.

-Si ma.

-¿Y piensan vivir cada quien en su casa?-dijo mi padre cruzándose de brazos.

-No pa, vamos a vivir juntos.

-Voy a hablar con Tomas y Maria para que te ayuden con tus cosas en esta semana-volvió a hablar mi padre.

-¿¡Esta semana!?.

-Si, ahora ya no tienes nada que hacer aquí-respondió enojado.

No dije absolutamente nada y salí de mi casa, tenía unas ganas inmensas de llorar.

-escuché a alguien detrás de mi pero no le di importancia-Tranquila-volteé y era Paulo quien se iba a sentar a lado mío.

-Mi padre nunca me había dicho algo así-lo abracé y solté en llanto.

-Entiéndelos, ninguno se lo esperaba, es normal que actúen de esa manera- me correspondió el abrazo.

-Gracias por estar conmigo-nos miramos.

-No tienes nada que agradecer-secó mis lágrimas.

Nos miramos y le di un beso sin pensarlo.