Eres mía [Sebastián Villalobos]

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Narra _______

Desperté y busque con mi mano a Sebastián, no estaba.

Me pare y caminé hasta el baño a lavarme los dientes. Una vez que termine me marché y baje hasta la cocina.

Ahí estaban los chicos, hablando seriamente de algo. Podía sentir la tensión, no entre ellos, era algo.

— Chicos — saludé.

— ¿Podrías ir arriba, o a la sala? — pregunta Sebas mirándome.

— Sí, está bien, cualquier cosa me llaman — sonreí y ellos asintieron.

Salí de ahí y fui a la sala de estar. Prendí el televisor y puse ‘bob esponja’. Miraba atenta el programa y alrededor de media hora después un grito me interrumpió.

— ¡CLARO QUE QUIERO IR Y SACAR A JUAN PABLO DE AHÍ, ES MI HERMANO, PERO ELLA ES EL AMOR DE MI VIDA, CARAJO, TAMBIÉN LA QUIERE, ¿QUE QUIERES QUE HAGA? — escucho la voz de Sebastián y me preocupo rápidamente.

Sebastián sale de la cocina y me mira.

— Sebas — hable, pero el sonido de la puerta me interrumpe.

Está enojado. Salió enojado.

Camino hasta la cocina asustada y los chicos me miran.

— ¿Qué pasa?, ¡que les pasa! — exclamó golpeando la mesa con la palma de mi mano.

— No pasa nada — dice Bautista y yo río sarcástica.

— Claro que pasa algo, Zurita está vivo, quieren salvarlo pero no trabajan juntos, me quieren a mí y Sebastián no dejará que me pase nada, pero yo no pienso así. Zurita es su compañero, está antes el que yo, hablaré con Sebastián. Pero ya dejen sus estupideces y trabajen como el equipo que son, idiotas — suspiró y los miró.

— Sebastián no te va a escuchar, pero la intención es lo que cuenta — dice Ruiz tomando un poco de agua.

— ¿A dónde salió?, traté de detenerlo pero no me hizo caso —

— Ni idea, siempre hace eso cuando algo está fuera de lugar o le sale mal.

Salí de la cocina y caminé hasta la habitación de Sebas, en donde me quedé ayer, me recosté y mire el techo. Poco a poco me quedé dormida. Muy dormida.

›Más tarde.

Desperté porque sentí como la cama se hundía a mi lado. Alguien se había acostado.

Abrí mis ojos lentamente adaptándome a la luz y mire a Sebas quién me veía fijamente.

Se acostó boca abajo a mi lado y mirando hacía el lado contrario.

Suspiró y hundió su cara en la almohada.

— ¿Qué pasa, Sebas? — pregunte acariciando su cabello.

— Zurita, tú, todo, todo pasa — lo escucho decir.

— Hablé con los chicos y ellos no tienen nada que ver con ésto. ¿Sí?, quiero ayudar, Sebas. Escucha Juanpa está antes de mí, no voy a detenerlos solo porque mi vida corre peligro. Si tenemos que ir por Juanpa iremos. Los dos — susurré para que lo escuché — no te voy a dejar solo, Juanpa es tú hermano, tú amigo, tú complice. Y si lo pones antes que a mí, no me molestaría, lo entendería —

— Gracias, mi amor — responde y se voltea para mirarme — pero no quiero que te pase nada, estoy seguro que eres lo mejor que tengo ahora mismo —

— Todo estará bien, juntos lo podemos hacer — susurró y el asiente.

N/A

¡Hola!

Tengo una pregunta.

¿Por qué demonios creen que hicieron algo sucio el capítulo anterior?, ¡SOLO HABLARON!.

Sucias, vayan a la iglesia.

¡MENTE SANAA!

Ahre no, no hicieron nada, solo lo quería aclarar.

Y si lo hubiesen hecho no lo hubiera narrado, sucias.

— Angela