-----------------------------------------------------------------------------------
— No permitiré que-
— Palette nunca te ha importado, ni siquiera te ves sorprendido. Lo sacrificarías con tal de que tú seas libre, ¿no es así? felicidades. Ahora es tu oportunidad — Lotus le sonrió de manera maliciosa a Rurik, abrazando a Palette por la espalda y recargando su cabeza contra la suya.
Rurik se cruzó de brazos irritado, haciendo una mueca que hacía que Lotus se sonrojara de manera inconsciente, desvió la mirada un poco apenado — Dime sino por qué lo trajiste aquí.
— Quería despedirse de ti.
— Y ahora no tiene que hacerlo
Palette hizo un puchero tomando sus manos y apartándolo un poco — Ah... ¿podrían por favor dejar de hablar como si yo no estuviera presente?
Lotus soltó una risita, tomándole de la mano para acercarlo de nuevo. Rurik ignoró a su hermano para seguir hablando — ¿Entonces te rendirás tan fácil?
— ¿Preferirías que no lo hiciera? — habló extrañamente esperanzado, Rurik se rió apartándose instintivamente.
— No. Exigía más bien una garantía — guardó su arma, Lotus buscó en el costado de su pantalón la que llevaba y la lanzó al suelo cerca suyo.
— La garantía es amor. — contestó en un suspiro. Había sido la conversación más larga que había tenido con él.
Rurik tenía curiosidad, igual que muchas preguntas, pero prefería usar a Dante como intermediario a tener a Lotus encima suyo, de nuevo. Palette se separó de Lotus por un momento acercándose a su hermano mayor, discutiéndole entre susurros.
— Me quiere, iré aunque no quieras. Te prometo que estaré bien, terminaré de estudiar y-
— Promete que no terminaras en una fosa clandestina o en la cárcel — dirigió su mirada un segundo hacía Lotus — Quizá sería mejor si te doy por muerto desde ahora.
Palette soltó una risa intentando tomarlo como una broma — Él me cuidará.
— Él mató a Goth — le replicó, mirando a su hermanito con pena. Pero después de todo, Lotus tenía razón. Abandonaría a su hermano por su propio bien, y sentía poco remordimiento en ese momento.
— Lo sé — contestó sonriendo. Rurik notó lo diferentes que se veían sus ojos, tan oscuros y vacíos, tanto que le recordó de manera desagradable a los de Lotus.
Recordó la noche que se escurrió a su habitación tentándose a un homicidio, los días que había vuelto a casa en las madrugadas cubierto de tierra o sangre. Hacía tiempo que su hermano no era él. Hacia tiempo que no lo quería volver a ver.
Rurik se dirigió a su acosador de nuevo, levantando la voz para dejar las cosas claras.
— Los dos se alejaran ¿ese es el trato?
— Lo dices como si te estuviera cambiando por él. Ru, yo siempre te querré a ti — un escalofrío le recorrió la espalda antes de que Lotus pudiera completar sus palabras — Pero que te quede claro que a él lo amo. Es la clase de amor que mis padres nunca conocieron. Es un deseo enfermo de querer estar a su lado.
Rurik lo miró haciendo una mueca intentando sonreír. Su manera de amar estaba tan deformada que prefería no discutirle — Quiero volver a ver a mi hermano vivo después.
Palette le abrazó separándose rápidamente para correr de nuevo hacia el lado de Lotus, tomando su mano y abrazando su brazo esperanzado. Lotus continuaba mirando a los ojos a Rurik, sonrojándose mientras movía sus labios sin silencio.
"Adiós"
Lo dejaría ir por amor. Para amar.
-----------------------------------------------------------------------------------