Goodbye To Romance [EDITANDO]

La Fiesta II

Me despertó el ruido de afuera y me di cuenta de lo que había pasado.

Finn seguía dormido y yo sobre él. Decidí bajarme porque pensé que le dolería la espalda.

-No te bajes- soltó Finn agarrandome el brazo. Él seguía boca abajo y no podía ver mi cara roja por la pena.

¿Hace cuánto estaba despierto? ¿Se abrá dado cuenta de lo que pasó? Me dolía el estómago. 

Lo obedecí sin decir nada. No quería arruinar el momento.

De pronto el giró, quedando boca arriba y yo sobre su pecho. Nos mirámos, un momento muy intenso.

-Finn yo...- Estaba buscando una excusa creíble que me justificara de estar dormida sobre él pero su mano en mi mejilla me interrumpió. La acarició muy suave, apoyé ligeramente mi cabeza en su mano y cerré los ojos por un segundo.

Vi como estaba acortando la distancia entre nosotros y como sus labios estaban a sentímetros de los mios. Lo miré cerrar los ojos e hice lo mismo. No tuve que esperar mucho porque me besó.

Nuestro labios apenas y se rozaron. Quemaba. Necesitaba más. 

Pasé mi manos manos a su nuca, atrayéndodo hacia mí. Fue un beso lento pero no nos volvímos a separar. Finn bajó una manos hasta la parte baja de mi espalda casi tocando algo más y con la otra me apretaba más hacia el.

El beso se convirtió en desesperación. Parecía queríamos besarnos hasta quedarnos sin aire, hace años quería besarlo y ahora lo estaba haciendo. -Rachel... Rach...- dijo entre besos- Rachel hay que parar, no puedo- No sabía exactamente a que se refería pero lo callé con otro beso. 

Me senté y quedé sobre su cadera, mis piernas estaban alrededor de su cintura, Finn me miraba atento, como queriendo saber que iba a hacer.

Lentamente bajé el cierre del vestido y su mirada cambió, estaba llena de deseo y sorpresa.

me quité un tirante a la vez. Finn me apartó las manos e hizo que nos paráramos junto a la cama. Pasó los dedos por mi cuello y fué hasta el borde del vestido. Lentamente fue bajando, besando la piel que iba siendo descubierta. 

Cuando el vestido había desaparecido me miró y la pena volvió. Me sentí incomoda pero al mismo tiempo quería su mirada sobre mí.

Me atrajo hacia él. Beso mi cuello, luego subió hasta mi oreja y dijo:

-Eres hermosa, quédate conmigo Rachel-

-Finn- era lo único que salió de mi boca pero yo quería decir más. El deseo me impedía hablar. Busqué su boca y nos volvímos a besar.

Nos recostamos en la cama, esta vez él estaba arriba.

Era tan grande y yo tan pequeña, me sentía protegida en sus brazos. Le fuí subiendo la playera hasta quitársela y descubrí mi nueva vista favorita. Estaba marcado, fuerte y tembló levemente, al igual que yo, cuando nuestros cuerpos se tocaron. 

Puse una mano en su abdomen para tocarlo. Aunque al día siguiente nos arrepintiéramos, quería estar con el.

Mi otra mano se fue al borde de sus pantalones. Con mis pies y su ayuda, me deshice de ellos. Lo sentí duro sobre de mí y casí gritó. Nunca había estado en una situación asi antes. 

Sus besos se dirigieron a mi cuello y fueron bajando hacia el borde de mi sostén, cuando sus manos tomaron el broche e intentaban quitarlo entré en pánico, nunca había estado con alguien y Finn sería el primero en verme, así que lo frené.

-Finn para- puse mis manos en su pecho, empujandolo levemente

-¿Qué pasa? .... ¿Te lastimé?- dijo mirándome

- No, no es eso

-¿Qué pasa Rachel?

Se lo iba a decir porque no quería perder mi virginidad así y no sabía si él estaba borracho, que era lo más probable. 

-Nunca he hecho esto... nunca he hecho nada...- de verdad esperába que captara porque no quería tener que dicer "soy virgen". Se quedó inmóvil mirándome -Oh...- dijo en un suspiro- ¿Quieres que pare?- Asentí y el se levantó. Se sentó al borde de la cama- Perdón si me pasé

-No te pasaste- dije sentandome junto a él- Es sólo que teníamos que parar, además mi hermano esta abajo y tú sabes como es

-Sí que lo sé- Me miro -¿Qué estoy haciendo?- Fruncí el ceño- Perdóname Rachel... No debí besarte- dijo bastante nervioso- Es sólo que lo quería hacer desde hace mucho... y hoy en especial te ves más hermosa

Lo mire extrañada.

-¿Qué?

-Rachel yo vine a tu cuarto para hablar, de... lo de esta mañana- y esas fueron las palabras que me hicieron recordar todo. Me tensé - Antes de que digas algo, déjame explicarte- Me levanté pa recoger mi vestido, pero él se interpuso y no me dejo pasar-Rachel ¿Por favor?

Suspiré- Tienes un minuto

-Rachel desde que te conozco siento cosas por ti, no me mal intérpretes pero yo tenía 15 y tú 13 y eras tan linda... Aún lo eres, muy linda- Mis ojos se abrieron al máximo, mi cara era de asombro y sentía el rojo subir a mi cara de nuevo- Cuando me di cuenta que te quería- lo interrumpí

-¿Quería?.... ¿Tú me querías?-

-Sí y mucho, lo sigo haciendo.... el punto, Rachel, es que Sam me prohíbe estar contigo- lo volví a interrumpir

-¿Por eso me alejas? ¿Por mi hermano?

-Si, pero eso es lo último que quiero

-Pero, ¿Y esta mañana?

-Honestamente no lo sé, en cualquier momento sentía que te iba a besar y me tuve que ir.. no quería herirte ni molestarte, de hecho me parece lindo que te guste leer- dijo seguido de una media sonrisa.

Oficialmente estaba roja, el me había declarado su amor y no sabía que responder, sin mencionar que él sólo estaba en boxers.

-Finn... no lo puedo creer

-¿Tú qué sientes por mi?

Qué no sentía por él, era la pregunta.

-Desde que te conozco sueño con que me digas esto y ahora no se que decir... yo creía que antes había algo entre nosotros y que cambiarás me hizo dudar, pero ahora entiendo porque.... - Nos miramos -Yo también te quiero

Me besó

Nos acostamos juntos en la cama pero esta vez el me abrazó y yo tenía mi cabeza en su pecho.

-Pero, ¿Qué va a pasar con Sam?- pregunte

- ¿A que te refieres?

-A que si tú y yo somos novios...- dije eso y su sonrisa de oreja a oreja me hizo dudar en que había dicho

-¿Somos novios?- dijo alzando una ceja

-Bueno, si no quieres no- respondí

-¡No! Sí quiero, sí quiero que seamos novios- me reí

-Bueno, preguntame- Sonrió

-Rachel ¿Quiéres ser mi novia?

-Si quiero- Lo besé-si quiero ser tu novia- Reí, en parte por nerviosismo pero pronto me calló con otro beso.