11

21 3 0
                                        

─Es culpa de tu indisciplina que estemos metidos en este embrollo, mas te vale no echar a perder esto por que te juro que no veras ni una sola moneda de la herencia.─ La amenaza de mi padre era tan absurda, ¿A quién mas podría dejarle su herencia siendo yo su único sucesor? ¡Ja!

─Como usted ordene Su Alteza Real─ aproveche para mofarme de él.

─ Jeon Jungkook no tientes a tu suerte  muchacho, quiero que te alejes del hijo del Conde Park. No te le acerques, no le hables, ni siquiera tienes permitido hablarle ¿entendiste? Tiene las mismas mañas que su madre, esa sin vergüenza le dejo lo peor de sí a su hijo.

─ No es como si te hiciera caso realmente padre, jamas he hecho una sola cosa de lo que dices y no lo hare ahora, ¡ah, por cierto! deja de habla de una dama, comportate como hombre por una vez en tu vida. Y si no te molesta, dejamos a nuestros invitados, los Park solos en el salón. Con permiso.

 Salí a paso apresurado sin mirar atrás, me adentre rápidamente al salón buscando a Jiminie pero no estaba, ni rastro de el...

─Disculpe Conde Park, ¿A donde ha ido su hijo?

─Lo he mandado a casa, se sentía un poco mal.

Si claro, y yo soy estúpido. Bastardo mentiroso.

─ Que infortunio y-...

─Pero se ha quedado mi bella YuJin, deberían conversar un poco para que se conozcan mas. Después de todo van a casarse y formar una linda familia...

¿Qué?

─No creo que sea de esa manera, señor así que discrepo con su comentario.Usted y mi padre han hecho un convenio por solo un año y nadie ha mencionado nada acerca de un primogénito.

La cara de disgusto del hombre y el hecho de pensar en que podría darle todos los herederos que pudiera querer pero con Jiminie casi me saca una risa que gracias a Dios pude contener a tiempo.

                                                                       ****************************

Jimin

─ ¿Qué hacías solo con el Príncipe pequeño estorbo? Te he dicho muchas veces que no te acerques a él, pronto se casara con mi hija y no te quiero al rededor siendo una puta.

No podía decir nada, al menos estaba agradecido de que no pudiera golpearme en el castillo del Rey. Sólo asentí sumisamente girándome hacia mi hermana quien se acerco para susurrarme algo al oído.

Los he visto, a ti y al Príncipe en el kiosco de la plaza, así que mas te vale cucaracha alejarte de lo que es mio por que si no lo haces le diré a mi padre todo y créeme que si aun no has muerto, de seguro no dudara en matarte. 

Se alejó de mi y sonrió como si nada hubiera pasado.

─Quiero que te vayas ahora y no quiero verte cuando vuelva a la mansión. ¡Largo!

Salí de allí y mientras lloraba una vez mas, me encamine hacia la mansión para encerrarme en mi habitación donde me sentía seguro, donde aún podía sentir a mamá.

Ahora me encontraba hecho un  ovillo mientras abrazaba mi almohada pensando que no puedo apartarme de Jungkookie ahora, no cuando he vuelto a recordarle. No cuando esta siendo tan bueno conmigo y mucho menos después de aquel beso...

─¡Ay! Fue tan mágico y sentí mariposas revolotear en mi estomago... debería, no... podría arriesgarme un poco, solo por kookie. ¿Qué es lo peor que podría pasar?

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Dec 17, 2019 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Contrato a EscondidasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora