Bittersweet. {kookmin}

VI. Who is he?

Jimin.

Como dijo su madre, había tratado de llegar temprano (y lo había logrado), llegando una hora antes de la cena, seguida por Jiyeon y las gemelas. Las pequeñas rápidamente fueron al cuarto de su hermana pues querían ver cómo seguía, sin embargo, al abrir la puerta se encontraron con una escena poco esperada.

Estaba su hermana mayor, sentada en medio de aquel chico raro que Jimin invitaba de vez en cuando y del mismo Jimin. Se encontraban viendo Toy Story 3. Joohyun abrazaba al tipo extraño mientras que Jimin abrazaba sus rodillas.

—¡No quiero que Andy se vaya a la universidad!—chilló la niña.

— ¡Yo tampoco!—respondió Jungkook.

Jungkook y Joonhyun tenían los ojos llorosos.

Jimin tenía hambre.

Las gemelas rieron.

— ¡Jimin, cariño, ya llegué! —anunció su madre, se le oía por el corredor.

— ¡En el cuarto de Joohyun, mamá! —contestó.

La menor de los tres salió de los brazos del más alto y se dirigió con sus hermanitas, la madre de Jimin entró enseguida.

— ¡Oh, Jimin! No me avistaste que tendríamos visitas—comentó en cuanto vio a Jungkook sentado en el suelo. Éste se levantó rápidamente.

—Creo que no nos conocemos, señora Park. ¡Yo soy Jeon Jungkook, un gusto!—se presentó, dándole la mano a la mujer.

Jimin pensó en que parecía un niño de preescolar.

—Que dulce eres, cariño—contestó con una sonrisa, estrechando la mano del joven-, y por favor, llámame Hye solamente.

—Está bien, Hye. Y perdone el que haya venido sin avisar, pero me tomé la libertad de traerle algunos apuntes a Jimin.

—Oh, no te preocupes, ¿te quedarás a cenar, Jungkook?

—Me temo que no, hoy irá mi hermana a cenar con mi madre y conmigo, será para la próxima, gracias.

Jimin estaba seguro que Jungkook era un maldito niño de preescolar atrapado en el cuerpo de un adolescente con estatura de gigante.

Una vez que Hye salió de la habitación, Jungkook volvió a hablar.

—Bien, Jimin, ya me tengo que ir—anunció, viendo su teléfono.

— ¡Oh, permítame acompañarlo hasta la puerta, señor Jeon! —contestó, imitando cómo había hablado el de negro mirar con su madre.

Jungkook sonrió-. Eres un tonto.

—Ya habló el que llora con Toy Story 3.

—Llorar con esa película es válido.

—Ajá.

Ya estaban en el lumbral, Jeon cargaba sus cosas.

—Supongo que nos vemos mañana—habló Jimin.

— ¿Irás?

—Sí, dudo que quieras volver a venir y terminar viendo todas las películas de Barbie.

—No me molestaría.

Jimin sonrió—. Adiós, Jungkook.

—Adiós Jimin.

Y la puerta se cerró.

— ¿Cuándo volverá a venir Jungkook, Jiminie? —preguntó Joohyun tan pronto como llegó al comedor.