7. Solo para aclarar, no hubo tantos "Mmm"

22 0 0
                                    

*Viktoriya en multimedia*

Para aclarar, este capitulo es el 7 y está antes del 6, lean primero el siguente y pasen por este. Disculpen los inconvenientes

Narra Víctor

Miro a las chicas pero cada una parece estar metida en sus pensamientos. Cata corta la comida de manera tan brusca, quiero preguntar pero puede que no solo la comida sea cortada de manera tan descabellada. Elena, por otro lado, mira a todas partes que no incluyan mí persona. Si trata de disimular su nerviosismo está fallando olímpicamente. Trato de pensar en alguna razón por la que ella esté nerviosa fuera de lo que hicímos anoche. Aunque también existe el factor de que ambos estábamos un poco pasados de alcohol. Quizás se arrepienta de lo que pasó, y de ese ser el punto, creo que yo estoy perdido porque a mí me encantó.

Miro finalmente a la bruja del ático y ésta mira su vaso con agua de manera concentrada mientras hace muecas con su cara. En serio me estoy comenzando a preguntar de dónde la sacaron. La miro detenidamente, ella se lleva el vaso a su boca, toma agua y luego me mira y me sonríe muy alegre.

Debí hacerle caso a mi Mami y quedarme en Madrid.

Desde que Alejandra despertó, asustándonos a todos cabe resaltar, se volvió a quedar dormida y ya nadie habló en la mesa.

-y... ¿cómo fue que se hicieron amigas?- pregunto rompiendo el silencio de una vez.

- Pues a Elena yo la conocí durante un internado que tuve en Estados Unidos, creo que ya te había mencionado que fui seleccionada para el internado en el club de diseño, pues coincidí con ella y algunos de su colegio en el mismo internado de verano. Eso fue como hace ya 5 o 6 años atrás. Al principio ambas éramos muy distantes y ninguna hablaba con otra además yo tenía a mi novio, ahora ex, quien también asistió al internado. La verdad no funcionaba bien esa relación que tenía y gracias a Elena pude ver que era algo tóxico y pues yo reaccioné. Fue gracias a una cachetada pero bueno, reaccioné que es lo que importa.

- Y desde ese día comenzamos a hablar más y todo surgió normal- continúa hablando Elena- Nos mantuvimos comunicadas desde que nos fuimos y hace ya 4 años y medio comenzamos a planear para estudiar en un mismo país. Decidimos que fuera acá en Inglaterra...Recuerdo que fue un proceso difícil al principio pero ya luego pudimos, ella se mudó de España y yo de América. Ya en la Universidad comenzamos a quedarnos en hospedaje pero ambas tuvimos experiencias un poco desagradables así que llegamos a la decisión de vivir juntas... llevamos como 2 años y medio viviendo en esta casa.

- Pero tú no eres de Estados Unidos, o sí?- pregunto desconcertado

- América no es solo Estados Unidos. Soy de Cartagena, Colombia

- Ya... lamento el comentario, entonces- digo. Elena asiente, vuelve a concentrarse en su comida y de pronto vuelve a imbadir un silencio incómodo en la mesa.

-Y cómo es que llegó ella hasta aquí- señalo a la bruja del ático y ésta me mira expectante

-A Viktoriya la conocimos por pura casualidad de la vida- casualidad mis nalgas, eso no existe con ella- la muy inteligente se presentó en la Universidad incorrecta pensando que era donde ella estudiaría. Resultó que ese día estaba de buenas así que cuando ella preguntó yo la orienté- dice mi hermana

-Déjame a mí explicar ... a ver

- Aquí vamos- comenta Cata por lo bajo

-Mmm todo comenzó una tarde de enero-- se ríe de su propio chisme por unos segundos y luego adquiere un semblante serio y sin emoción alguna-- no, mentira fue el día que comenzaba la Universidad. Ese día yo fui a la Universidad y no aceptaban mis papeles, simplemente me decían que no era ahí donde tenía que estar. En mí defensa llevaba sólo un día de haber llegado de Rusia y en adición la orientadora parecía desorientada ¿puedes creerlo? -- Me mira directamente y asiento ya que me he metido un bocado de comida a la boca-- Era una pregunta retórica no hace falta que contestes. Luego de haber hecho todo un recorrido por el campus tratando de buscar quien me ayudara. Casualmente entré a una biblioteca y me encontré con Amaia a la cual ahora llamo Cata, aunque es obvio que yo no sabía su nombre, sería extraño yo saber su nombre sin conocerla antes. En fín, ella me orientó sobre la Universidad a la que yo iría y luego de una conversación de 4 minutos y 38 segundos me preguntó sobre dónde yo me hospedería y presta atención porque es aquí donde se explica como llegué hasta donde ahora estás sentado- me dice mirandome a los ojos

Un toque al pasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora