CAPÍTULO 5

12 1 0
                                    

Invité a Harper a cenar esta noche en mi casa, le dije lo mismo a Caleb pero no aceptó y lo entendía, no podía en estos momentos estar cerca de ella luego de saber lo de este chico de San Francisco.

Mis padres se llevan genial con Harper, aunque al principio, cuando la conocieron, les dio la impresión de que era de esas chicas problemáticas y que me llevaría por el mal camino, pero al contrario, pese a que ella es distinta a mí en muchos sentidos, me ha demostrado ser la mejor amiga que cualquiera puede pedir y tengo suerte.  Mis padres cada vez se iban dando cuenta de que era una gran persona, y lo confirmaron aún más cuando terminé con Ben, quedé tan destrozada que ni quería salir de mi casa y Harper me acompañaba todos los días con una buena y típica dosis de películas románticas y helado pero no de chocolate, sino de capuccino.  

Luego de conversar una hora más con Harper, la dejé en su casa para dirigirme a la mía.  Mis papás habían salido para comprar cosas para la cena.

Subí a mi habitación y saqué el libro que leí hace poco para continuar con la lectura.  Acomodé mi almohada en la cabecera de mi cama y abrí el libro sacando un separador celeste con la frase "KEEP DREAMING".  Capítulo número uno y ya estaba emocionada por leerlo.

Abro mis ojos, me encuentro frente a todos mis compañeros, doy un respiro profundo debido a los nervios que siento en ese momento, nervioso por trabarme al hablar, nervioso por equivocarme al leer mi primera historia, la primera de muchas, la primera que hizo que mi pasión por la escritura y lectura despertara.  Di otra rápida mirada a mis compañeros y maestra, me armé de valor.

- Dos amantes tan particulares, los cuales creyeron jamás enamorarse, pues era notable el odio que se tenían. ¿O solo era una barrera para ocultar el amor que en verdad sentían?  

No, no son adolescentes de preparatoria, tampoco de la universidad. Podríamos decir que no pertenecen a la vida de los mortales, tampoco pertenecen a la mitología griega. Estos dos personajes principales son muy conocidos para aquellos creyentes en la Iglesia.  

En esta historia no nos basaremos en Dios o Satanás, claro que tendrán su participación en esta historia, solo que esta vez, nuestra atención irá hacia un ángel, tierno, inteligente, bondadoso, con todas aquellas características que definen a un ángel. Y a una demonio, el mismo nombre lo dice todo, malcriada, egocéntrica, soberbia, en ella viven los pecados capitales.

Prohibidos de enamorarse fue la primera regla que se dio para que haya un equilibrio entre el cielo y el infierno, aunque no lo crean, hace siglos, una guerra estaba a punto de desatarse, pues un despiadado demonio y una carismática ángel, el amor habían encontrado entre ellos, negándose al principio pero luego aceptando que no podían estar lejos ni un minuto. Nadie parecía sospechar nada o eso es lo que ellos pensaban, pues como se sabe, los más traicioneros son los seguidores de Satanás; uno de ellos vio el amor que estos dos se tenían y no dudó en ningún momento en ir a contarle al ya mencionado lo que estaba ocurriendo. Terremotos e incendios en la tierra ocurrieron al mismo tiempo que se enteró la noticia. Lleno de odio, empezó a destruir todo a su alcance, incluyendo a su mismo "pueblo" si podemos llamarlo así.

Horas después, le dio una visita a Dios, quien creía que cada ser malvado tiene su lado bueno lleno de esperanza, furioso lo amenazó preguntándose cómo podía haber sucedido tal barbaridad, es imposible que uno de ellos enamorara con un ángel.

Dios trató de hacerlo entrar en razón, pero al único acuerdo que llegaron fue a la ya mencionada regla.

¿Qué sucedió con aquella pareja dispareja? Desaparecieron, nadie supo a dónde pero algunos dicen que los mismos demonios mataron al de su misma raza y ella murió de tristeza. Otros aseguran que simplemente escaparon.

Puede sonar algo familiar esta historia, pues fue contada por todos los humanos como si fuera una leyenda de los mismos mortales. ¿De dónde creen que Shakespeare escribió Romeo y Julieta?

Esta historia dejó de contarse en el cielo e infierno, por lo que no fue necesario advertir, era claramente algo obvio. O no.

...

Sorprendida, esa es la palabra correcta para definir cómo me siento en ese momento.  Una pequeña historia pero con un gran mundo dentro de ella.  Una increíble imaginación del autor, me encanta la idea de leer un libro y tener que leer al mismo tiempo otro.

Dejo para mañana el siguiente capítulo y agarro mi laptop entrando rápidamente al buscador pero antes de escribir las iniciales de este misterioso autor, me pongo a pensar, por alguna razón no quiere hacer conocer su identidad, por alguna razón escribe de manera "secreta", tal vez no quiere que alguien se entere, pero mi cuestión es, si es un libro obviamente ya publicado, tarde o temprano (si es que pienso que no quiere que alguien se entere) este escritor tendrá que revelar quién es.  Pero no soy quien para juzgarlo, sus buenos motivos tendrá.

Mi alarma suena, siete y media.  En media hora llega Harper y soy capaz de bajar a cenar en pijama, pero me enseñaron que cuando hay visita hay que estar presentable.

Me quedo con mi mismo jean pero me cambió de polo por uno de manga larga manteniendo igual mis botines.

- Te ayudo mamá - Dije mientras tomaba los platos y los acomodaba en la mesa.

- Gracias cariño.

Mamá había preparado el plato favorito de Harper a modo de bienvenida, y papá ayudó en lo que pudo con la ensalada, por eso se ve que los pedazos de tomate no están cortados del mismo tamaño, pero lo que cuenta es la intención.

El timbre suena y voy a abrir recibiendo con un abrazo a mi amiga, quien entra gritando saludando a mis papás, quienes igualmente la reciben con un fuerte abrazo.

- ¿Qué tal San Francisco? - Pregunta papá.

- Es lindo, logré conseguir allá unos libros sobre Derecho, cosa que aquí iban a tardar en llegar unos meses y los necesito para mis clases en la universidad.  Los he estado leyendo y cada vez me encanta más mi carrera, no me equivoqué en escogerla.

- Eso es increíble Harper.  Seguramente serás una gran abogada.

- Eso espero en serio.

Empezamos a servirnos la comida entre charla y charla, entre risa y risa.  Sólo faltaba Ayden pero los días van a pasar rápido y en lo que menos esperemos, él ya va a estar compartiendo mesa con nosotros como la familia que somos.

El timbre suena como unas tres veces, y debo decir que de una forma extraña y desesperada a lo que creo.

- ¿Esperan a alguien más? - Les pregunto a mis papás.

- Mmm no, la verdad es que no - Responde mi papá.

- Que extraño; iré a ver quién está tocando.

Me levanto de mi silla y voy hacia la puerta, por desgracia no tenemos una mirilla en la puerta así que cuando abro me doy con una sorpresa para nada agradable.

- Hola Av.

- Ben.

...♡...

A Kilómetros De TiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora