Capítulo 16

24 0 0
                                    

Narrador omnisciente

El frio del invierno empezó a azotar la ciudad cada vez más, de vez en cuando por las mañanas había una neblina no muy espesa, así que era normal ver que todos empezaban a usar suéteres, bufandas y a veces hasta gorritos de lana tejidos, esa mañana sin embargo había hecho un poco más de frio de lo normal y eso mismo hacia que las ganas de abandonar la cama calentita fueran casi nulas, de hecho Charlie sabía perfectamente que podía quedarse dormido otro rato más, al fin y al cabo no tenía gran cosa que hacer, así pues se dio vuelta y se volvió a acurrucar tranquilamente bajo las cobijas empezando a agarrar sueño casi de inmediato, sin embargo esto no duro mucho puesto que segundos después su estómago empezó a rugir indicando que tendría que levantarse para preparar el desayuno, un poco molesto consigo mismo, todavía despeinado y amodorrado entro a la cocina

-buenos días- dijo Guro con una sonrisa cuando vio entrar al rubio

-bue...nos días- contesto Charlie en medio de un bostezo- ¿Qué haces?

-el desayuno

-ah, está bien entonces yo.... ¿el desayuno?- se interrumpió asustado

-sí, apenas es de mañana y me levante un poco más temprano, tiene bastante tiempo que no cocino, de hecho extrañaba un poco hacerlo

Charlie sonrió de forma nerviosa, desde que él había llegado a la casa había evitado por todos los medios posibles que el castaño cocinara, no porque lo hiciese mal, sino porque todavía sentía un poco desconfianza desde el pequeño incidente con el café

-Oye- dijo Guro rompiendo el silencio- me estaba preguntando, ¿te gustaría salir de aquí a dar la vuelta un rato?

-¿salir? Pues.... me encantaría pero creo que no puedo, no sé si recuerdes pero la policía me está buscando

-sí, lo se

-¿entonces?

-bueno lo he pensado un poco, ha estado haciendo algo de frio...

-muy observador- interrumpió el rubio

-si verdad, ¿a que no te habías dado cuanta?- los 2 rieron un poco- no es eso, déjame terminar, ha estado haciendo frio y no es raro ver gente yendo de un lado a otro con chamarras, gorros o esas cosas, lo que quiero decir es... que podríamos aprovechar eso para salir un rato sin que nadie te mire raro por cubrirte tanto

-suena arriesgado

-a mí me gustan los riesgos – contesto el castaño guiñándole un ojo

-está bien pero ¿a dónde iríamos?

-será una sorpresa, ¿pero bueno que dices?

-no lo sé, es demasiado y algo podría salir mal... además ¿Por qué quieres que salir?

-pues... la verdad tengo algo preparado, quisiera que ambos tengamos algo asi como... una cita

-¿cita?

-sí, cita

-¿c-cita cita?

Guro dio una pequeña risita y se acercó a Charlie para darle un beso y susurrarle al oído

-sí, una cita de pareja, solo tú y yo divirtiéndonos por ahí

Al rubio se le subieron los colores a la cara, su corazón le latía muy rápido y no sabía si era por el beso y la cercanía del castaño o porque la propuesta le causaba una agradable sensación de adrenalina, salir era una imprudencia peligrosa y sin embargo en vez de miedo sentía unas ganas enormes de aventurarse a regresar al exterior, además al lado de Guro no parecía que nada fuese a salir mal

FugitivosWhere stories live. Discover now