Capitulo 4 : Perdición

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Negro...era la única palabra que definia todo lo que veia el albino, lo último que recordaba era estar hablando con Lenalee por teléfono cuando unos hombres desconocidos lo raptaron. Ahora estaba encadenado por las muñecas a lo que deberia ser el techo, con una venda en sus ojos y amordazado, estaba de pie, descalzó, y con un horrible dolor en las muñecas por la fuerza en que levantaba todo su cuerpo, casi sin tocar el suelo. Tenia frío su ropa la tenia toda destrozada, el chaleco negro sin mangas, ya no quedaba nada de el, sus zapatos también desaparecieron. Su pantalón por suerte aun lo tenia pero sucio y en algunas zonas roto, su camisa sucia y con los primeros botones abiertos.

De pronto escuchó el sonido de pisadas acercarse, se escucho el sonido de la puerta abrirse y pudo escuchar a dos personas hablando.

-Aqui esta, él es el nuevo- indico uno de los hombres al albino, el otro por otra parte mantuvo silenció y se acerco al menor.

-Es un niño? - preguntó mientras acariciaba la mejilla del menor, este se estremecia ante el tacto.

-Si, pero a pesar de eso su belleza no se opaca, tiene unos rasgos muy peculiares- la venda de sus ojos fue soltada y ambos señores vieron sus ojos grisaceos-amatista. El menor pudo ver el rostro de los dos, el que le acariciaba la mejilla era castaño de pelo corto y vestia un pantalón negro con una camisa manga larga del mismo color, su piel era blanca, de alta estatura y unos ojos azul oscuro que lograba intimidar al albino. El otro por otra parte era rubio de pelo más largo lo suficiente para una pequeña colita, no tan alto como el castaño pero lo suficiente a comparación del menor, sus ojos de un gris opaco y con un saco y corbata de color gris y un pantalón del mismo color.

-Sus ojos son preciosos- respondió el castaño con una sonrisa, mientras levantaba su rostro.

-Asi es, son de un color peculiar, al igual que su cabello. Al tacto es suave y liso- el rubio empezó a acariciar los cabellos del menor. Allen se intentaba liberar, haciendo sonar las cadenas de sus muñecas, reflejaba en sus ojos el miedo a aquellos hombres desconocidos.

-Tranquilo pequeño, solo te voy a revisar- dijo el castaño en un intento por tranquilizar pero al sentir su mano abriendo su camisa, se alteró.

-¡Mmmnnhhmnhh!- intentaba hablar con la mordaza en la boca.

-Joooo! Tiene un buen cuerpo- dijo el castaño tocando su pecho desnudo pasando a la cintuta- y su cintura es casi como el de una mujer, aparte su piel es suave.

-¡Mnmmhgg!

-Su voz también es preciosa- agregó el rubio quitandole la mordaza al menor y acariciando uno de los penzones.

-Mmg! Ahh!...Deten-ten Ahh!Te!- el albino gemia por cada acaricia que recibia, le desagradaba la manera en que tocaban su cuerpo, cuando sintió que le arrebataban de un tirón el pantalón junto con la ropa interior.

-Q-que! Inten-tentan ha-hacer?!!SUELTENME!!- las manos del castaño empezaron a tocar suavemente el miembro del albino, luego dirijio su mano a la pequeña entrada del menor, acarició un poco esa zona y metió un dedo en la entrada.

-Ahhh!!Mnhgg!!

-Al parecer es virgen y realmente tiene una hermosa voz...es...perfecto...- el castaño soltó el miembro del menor y se apartó- Viendolo completo tiene un belleza impecable, y a pesar de tener un brazo completamente quemado es hermoso- lo tomó de la cabeza viendo de cerca su rostro.

-Sueltame!-gritó el albino con una mirada amenazante.

-Y su actitud lo hace ver indomable- sonrió con gracia y lo soltó observo al rubio y aceptó al menor.

-Bien, sera de nuestra mercancia como nuestra joya- respondió y los dos se fueron de la habitación, dejando al menor desnudó y sucio según el al ser tocado por ellos. Suspiró cansado queriendo ver a Mana y Nea, Ver a sus amigos y a Tim, e incluso extrañaba a su maestro; luego de un tiempo escuchó la puerta abrirse y varios hombres musculosos se acercaron a el albino, este avergonzado por estar desnudo y con miedo por lo que vayan a hacer. Lo soltaron de las cadenas en la muñeca y calló con fuerza al suelo, intentó levantarse para huir pero en eso lo tomaron de los brazos y colocaron unas esposas en sus manos, luego le colocaron un collar de color azul oscuro en el cuello y lo levantaron sosteniendolo por ambos brazos arrastrandolo hacia la salida de la habitación, Allen pataleaba hasta que llegaron a una habitación diferente, esta tenia luz adentro, una mesa de metal en el centro y a los alrededores varios accesorios que perturbaron la mente del menor. Ropa muy provocativa, correas y collares de animales, juguetes sexuales, látigos, en un estante varios envases con pastillas y en la esquina al fondo un pequeño horno con carbón caliente. Esto alteró al albino quien  golpeó a los hombres en un intento por soltarse, lo colocaron en la mesa de metal y lo volvieron a encadenar a esta boca abajo, avergonzado por estar desnudo mostrando su retaguardia, lo tomaron de la cabeza y la mantenian pegada a la mesa de metal. No pudo ver bien pero observo a uno de los hombres acercarse al horno, lo tomaron con firmeza de sus extremidades hasta que un desgarrador grito salió de la garganta del albino, al sentir un fierro caliente de metal quemando a un lado de su espalda baja.

-Que...hacen?- dijo suspirandó el menor al sentir como alejaban el fierro, en eso pudo detallar una estrella de cinco puntas al final del fierro, el menor supuso que tendria una cicatriz con esa estrella en la espalda. Luego sintió algo húmedo en su quemadura, se estremeció al sentir un paño mojado limpiado esa zona, le dieron la vuelta y con un pequeño bisturí le hicieron una herida a lo largo de su ojo izquierdo y asi continuaron hasta que lo bañaron completamente para limpiar la sangre. Su ojo dañado quedo cerrado, lo sentaron y empezaron a colocarle esa ropa provocativa, la cual era de color blanco, lo vistieron con unas largas tiras medio transparentes en la cintura como "cubriendo" su entrepierna, varias tiras blancas fueron envolviendo los brazos y piernas del menor y un trozo de tela del mismo color fue colocado en su pecho cubriendo los penzones, vistiendolo prácticamente como a una mujer.

Allen luchaba y empezaron a dolerle las extremidades, le quitaron el collar azul de su cuello y lo remplazaron por una cadena atada a su garganta. Y así lo arrastraron como a un animal a una jaula grande en una especie de escenario, el albino se sorprendió al ver más adelante de el otras jaulas con varias mujeres jovenes vestidas con ropa parecida a la del albino o hasta desnudas.

-Bienvenidos! Caballeros!!- escucho a un maestro de ceremonias, en eso calló en cuenta las jaulas, las chicas, el escenario...era una subasta, pretendian venderlos a pervertidos, para despues pertenecerles como un juguete sexual viviente. Esto alteró al menor quien golpeaba la jaula y gritaba porque lo saquen de hay.

-Muy bien, a nuestra primera mercancia, les presento a esta hermosa joven ella poseé unos...- el presentador las describia y decia comentarios y sugerencias vulgares de cada chica, luego ponia un precio y escuchaba a los viejos pervertidos subiendo el preció hasta que alguien las comprara. A cada minuto su jaula se acercaba más al escenario, y apunto de que las luces lo iluminaran ante las miradas del público.

-¡Vendido!- escuchó el albino, sin despegar la mirada de la última joven.

-Ahora nuestra última mercancia, es un chico, pero a pesar de eso, poseé una belleza divina...les presentó a nuestra joya!!!- la jaula se movió y con eso el albino fue observado por el público, por lo que pudo observar la mayoria eran hombres de edad avanzada. Los ojos lujuriosos penetraron en el cuerpo del albino, se estremeció ante sus rostros.

-Tiene aproximadamente 15 años, poseé unas perlas entre grisaceas y amatista, su piel blanca y suave como porcelana y su cabello suave y sedoso...toda una belleza...y otra cosita...es completamente virgen- las sonrisas no se hicieron esperar, la cabeza de Allen palpitaba de dolor, temblaba...a parte del frío de la habitación...el miedo de toda aquella gente, escuchó números de lejos solo escuchaba ecos de las voces desesperadas por tener al menor...y...ahí...

¡VENDIDO!

Antes de que lo sacaran del escenario, un color azul oscuro, tomó su atención, pero ahí empezó su perdición...

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Hola patatis...saben lo que es pensar un nombre para un capitulo...se que suena estúpido pero para mi el título de los capitulos son *eshpeshiales* bueno vamos progresando y moyashi esta apunto de vivir algo hermoso...o...horrible.

MUAHHHHHHJAAAAJAJAJAJ SOY TAN MALA!

Bueno, voten comente y disfruten leyendo, chauss

My Pet - Yullen (D Gray Man)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora