Same Mistake [Fillie]

My secrets become your truth

N/A: Estaría super genial si escuchan Breathe Again de Sara Bareilles (está aquí arribita) pues me inspiró todo el cap jiji. Chance y se adentran al aura de esta vaina xd juasjuasjuas

Gracias a  por haber sido la primera persona que leyó y comentó el primer capítulo. :3 la quiero mucho mucho.

También, una mención especial para Ally @-radi0active porque siempre me apoya en cada locura que escribo y la verdad, sin ella, no existiría nada de esto. (Te re amo ❤)

A las insensibles squad: no sean tan crueles o me vengaré y les haré ver que sí tienen corazón. MUAJAJAJAJA bai :3

ADVERTENCIA: Soy super floja y no revisé nada antes de publicar:D

Millie vivía en un profundo estado de negación ante el accidente de tráfico que sufrió con Lucas. Su cerebro se encargó de suprimir recuerdos que le causaban estrés y moldeó otros tantos a su conveniencia, los más significativos, para que no experimentase tristeza alguna.

He ahí el motivo por el cual afirmaba que yo era su prometido. Su mente recurrió a mi para reemplazar la imagen de Lucas. Si él no existía en su memoria, no tendría que decirle adiós ni enfrentarse al inmenso dolor que conllevaba hacerlo.

En su momento estuve furioso con ella. ¿Por qué se deshizo tan fácilmente de Lucas? Él merecía ser recordando como el gran hombre que fue. Recordado principalmente por la mujer que lo amó, ella mejor que nadie sabía cuán maravilloso era. Detestaba a Millie porque de Lucas quedaba ya muy poco en éste apesto mundo, por su culpa.

Estaba tan enojado que no volví a verla desde ese día en el que aseguró recordarme como el hombre que la amaba y le propuso matrimonio. No lo toleraba, Lucas no merecía ser sustituido por una basura como yo. Corté toda comunicación con los Brown, no quería saber nada de ellos, en especial de Kelly pues me imploró seguirle la corriente a Millie.

Y justo cuando comenzaba a concentrarme en mi presente y aceptar que la vida seguía para mi, Ava Brown se apareció en mi puerta pidiéndome que visitara a Millie o moriría de tristeza.

—Por favor, Wolfhard.

—¡De ninguna manera! No pienso mentirle, no me haré pasar por Lucas o lo que sea que ustedes quieran que haga. No es correcto.

Ava me contó que Millie continuaba diciendo que yo le amaba. Se pasaba las horas hablando de momentos espectaculares, románticos y celestiales que vivió conmigo, supuestamente. Afirmaba que sólo podía confiar en mi y también se preguntaba si acaso ya no la quería o ya no me importaba porque la había abandonado. Decía que sin mi, se sentía perdida. Me necesitaba porque tenía la certeza de que yo tenía el poder de consolarla y guiarla en medio de todo el caos de su interior.

Estaba dispuesto a ir con ella y protegerla de todo el mal que le aquejaba, pero no en esas condiciones. Quería presentarme en su casa siendo Finn, su amigo, el que siempre fui y debía recordar.

Ella creía tener el corazón roto pero el mío lo estaba realmente porque fue Lucas quien la hizo feliz, mas no yo. Yo no sabría cómo hacerla sonreír tal como lo hacía Lucas. Ella añoraba esa felicidad y yo jamás podría regresársela. No sabría cómo sacarla de ese abismo que la atormentaba. Odiaba a Millie porque en su realidad, yo la besé tantas veces como estrellas en el cielo y la sostuve en mis brazos susurrándole al oído lo mucho que la amaba; en mi realidad, aquello eran cenizas de mis sueños, deseos imposibles, postales para coleccionar e historias para cantar en una noche bohemia.

La odiaba, la quería, la volvía a odiar y la quería con más fuerza, tanto que no soportaba que sufriera por mi. Hubiera preferido que llorase por Lucas, así ambos nos apoyaríamos en nuestro dolor.