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Mi corazón comenzó a latir rápidamente cuando llegó el momento de mi entrada y Wayne lo notó al instante. Aún no podía creer que me casaría, y menos sí era con Tom, me había hecho la idea muchas veces pero jamás pensé que se hiciera realidad.

Sentí un revoltijo en mi estómago, cuando estaba nerviosa me daban ganas de vomitar, tomé un poco de agua y me calmé, me decía una y miles de veces que esto saldrá a la perfección.

— No te pongas nerviosa, Am. —dijo en tono suave — Ahora muestra tu hermosa sonrisa.

Tomé su brazo y las puertas se abrieron, la música comenzó a sonar, los invitados presentes se pusieron de pie y fijaron su mirada en mí. Caminamos en dirección al altar y segundos después Tom se volteó, podíamos notar su gran felicidad y la emoción que tenía. Al estar en el altar, Wayne me dejó al lado de Tom y se colocó a un lado.

— Estamos aquí reunidos para unir en sagrado matrimonio a Thomas Hiddleston y Amelia Collingwood, dos almas que están destinadas a estar juntas. —habló el sacerdote — ¿Ya tienen preparados sus votos? —los dos asentimos — Los anillos. —ordenó —

Kourtney, la encargada de llevar los anillos, se los entregó al sacerdote.

— Comencemos con usted, señor.

Un poco tembloroso, tomó un anillo y mi mano izquierda, le sonreí tratando de calmarlo.

— Con una promesa de amor delante de los aquí presentes hago mis votos de amor eterno. Estoy bien seguro de este gran paso que estoy dispuesto a dar contigo. Te amo, eres la persona que mi corazón, mi alma y mi mente ha elegido para formar un hogar y nunca me separaré de tu lado. Yo, Tom Hiddleston, en este día tan especial para nosotros te tomo a ti, Amelia Collingwood, como mi esposa. Con nuestros amigos y familia presentes, juro pasar el resto de nuestras vidas amándote, dándote alegrías y apoyándote siempre que me necesites. Te quiero tanto por tus virtudes como por tus defectos, y me ofrezco a ti esperando que me quieras por los míos. Desde este día estaremos unidos para siempre. —colocó el anillo en mi dedo anular —

— Sigamos con usted. —dijo el sacerdote —

Tomé el anillo y la mano izquierda de Tom.

— Yo, Amelia Collingwood, prometo amarte a ti, Tom Hiddleston. Prometo apreciarte y honrarte a partir de hoy durante todos los días de nuestras vidas, tanto en los buenos como en los malos. Juro serte fiel siempre, y apoyarte cuando me necesites. Te entrego mi alma y mi corazón para toda la eternidad; tanto en los momentos de salud y felicidad como en los de tristeza y enfermedad. Como símbolo de todas estas promesas, te entrego este anillo para recordarnos siempre lo que significa nuestro amor. —le coloqué el anillo —

— Por el poder que se me concedió, yo los declaro marido y mujer, puede besar a la novia.

Enrolle mis brazos alrededor de su cuello y el me tomó de la cintura uniendo nuestros labios en una apasionante beso. Los invitados presentes aplaudieron felices y comenzaron a tomar fotos.

(...)

Luego del momento de los discursos, decidí en darles las noticias sobre mi embarazo, pensé que este sería el mejor momento, ya que familiares y amigos de nosotros estaban presentes. Tom tomó una copa y con una cucaracha dio pequeños golpes en la copa llamando la atención de todos. En segundos ellos voltearon a vernos y guardando silencio.

— Tenemos que darles una noticia muy importante. —sonreí —

— ¿Más sorpresas? —preguntó mi mamá feliz —

— Sí. —asentimos —

— Hablen y dejen el suspenso. —dijo Rob —

— No arruines el momento. —le dijo Wayne —

Todos nos veían curiosos sobre la noticia que daremos, estaba nerviosa pero emocionada de poder compartir la noticia con todos reunidos. Se acercaron a nosotros para poder escuchar bien. Tom me tomó de la cintura y me pegó a él, podía sentir lo nervioso que estaba.

— Amelia está embarazada. —colocó una mano en mi vientre —

Dieron pequeños gritos de felicidad y nos abrazaron.

— Pero que hermosa noticia, felicidades, esperaremos a ese bebé con ansias. —nos abrazó mi mamá —

— Muchas gracias, señora Collingwood. —dijo Tom sonriente —

Y en un grupo llegaron los amigos de Tom muy felices, me abrazaron y me felicitaron.

— Estoy tan felices por ustedes, no lo puedo creer, ¡un bebé! —me dijo Chris —

— Quien lo diría, nuestro Tom siendo padre, estamos orgullosos de ti. —le dijo Rob dándole unas palmadas en la espalda —

— Nuestra familia crece aún más. —dijo Mark feliz —

Y aparecieron Stassie, Kendall, Kourtney, Sarah y Wayne. Nos dimos un abrazo grupal y nos felicitaron.

— Seré Tía, no lo puedo creer. —dijo Sarah feliz —

— Cada día nos sorprendes Amelia. —me sonrió Kourtney — Sabes que aquí estaremos todos para ti en tu nueva etapa.

— Muchas gracias a todos ustedes, son los mejores.

(...)

instagram ; tom hiddlestonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora