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Un nuevo día llegaba con el unas amigas que no se dirigían la palabra.

Una estaba más que furiosa porque su mejor amiga jamás le había comentado para quien iría a trabajar.

La otra sólo hacía caso omiso al enojo de su primera amiga.

Buenos dias- intento entablar una conversación la Latina.

Te dije que no quiero escuchar tu voz en lo que me queda de vida- dijo lauren aún un poco ofendida.

Como quieras ojiverde culona pero si te decía que tu nueva jefa era la misma a la que insultante la noche anterior, no te hubieras presentado- se encogió de hombros la Latina.

Siempre me preguntaré esto- dijo lauren sentándose junto a su amiga en la mesa para desayunar- será que si te mato y me declaro culpable, me darán menos años en prisión?- Vero trago con pesadez el pedazo de pan que había llevado a su boca.

Vamos Lau tampoco es que te vas a casar con ella, ni nada por el estilo- la miro y la ojiverde sólo negaba.

Mejor lo dejemos ahí y apresurate que llegaremos tarde a nuestros trabajos- dijo lauren- por cierto de que conseguiste trabajo tú?-pregunto y su amiga salió disparada

Llegaremos tarde Lauren- dijo saliendo de la cocina.

Lauren sólo la vio irse sin entender nada.

Una hora más tarde Lauren tomaba asiento en su lugar frente a el escritorio que ocupa a metros de la oficina de la señorita Cabello.

Buenos días- escucho esa voz que tanto detestaba.

Levantó su mirada para mostrar su mejor sonrisa. La verdad era que su trabajo era bueno y el pago muchísimo mejor, pero sólo debía aguantar a alguien y ese alguien estaba frente suyo en estos momentos.

Que sucede no te enseñaron a dar los buenos días?- pregunto Camila viendo como la pelinegra aún no respondía a su saludo- aunque no me interesa, cuelga esto- le ordenó tirando su abrigo y su cartera sobre el escritorio.

Lauren sólo asintió y tomando las cosas fue directo al perchero a colgarlos. La morena no pudo evitar recorrer el cuerpo de la pelinegra.

Dios que mujer- pensó y dio media vuelta para salir de allí antes de que su cuerpo la traicionara y no lo entendía porque.

Lauren terminó de colgar las cosas de su jefa y vio como está se dirigía hacia su oficina. No pudo disimular y miro como el traje que llevaba su jefa ahora le quedaba tan bien y ni hablar del trasero que le hacía.

No Lauren, tu la odias no te olvides- penso- es una engreída, idiota y creída- finalizó su pensamiento.

La mañana transcurría de manera muy lenta. En estos momentos Lauren seguía cargando los papeles que su jefa le había indicado. Cuando de pronto sintió alguien que carraspeaba delante de ella.

Levantó su mirada y se encontró con una mujer delgada, algo bajo, trigueña con ojos color marrones, más oscuros que de los de Camila.

En que puedo ayudarla?- pregunto hacía la mujer quien tenía su mirada en su móvil.

Dile a Camila que estoy aqui- dijo la mujer y Lauren levantó su ceja sin creer como prácticamente la mujer frente a ella le ordenó que lo hiciera.

Tiene cita con ella?- pregunto Lauren, nadie la intimidaba.

Sólo dile que Ariana Grande está aquí, ella sabrá quien soy- dijo la mujer y sonrio para volver su vista a su móvil.

Lo siento pero si no tiene cita con la señorita Cabello, no puedo dejarla pasar- dijo lauren y volvió su vista a la computadora para seguir trabajando.

Escuchame bien estu.......- pero no continuo cuando la puerta de la oficina de Camila se abría.

Camila, bebe- dijo la trigueña y Lauren sólo frunciendo sus cejas vio como la mujer se acercaba a Camila.

Que haces aquí?- pregunto Camila con su cara de pocos amigos- no quedamos en nada, que yo recuerde.

Pero te extrañe, quería verte y ver si podíamos repetir lo de al otra noche-susurro para que sólo Camila pudiera escuchar.

Lauren negaba mientras volvía su vista a la computadora, había conocido a alguna mujer ofrecida, pero como Ariana Grande jamás, si sólo faltaba que cogieran delante de ella.

Camila vio la expresión de asco en el rostro de Lauren y luego de susurrarle algo a Ariana en su oido y está entrar en su oficina con una sonrisa en el rostro. Se acercó hacía el escritorio de su secretaria y habló.

Jáuregui, no me pases ninguna llamada, ok?- dijo apoyándose en el escritorio para mirar que hacía la ojiverde en la computadora.

Está bien señorita Cabello!-le salió en un tono como de reproche y no entendía porque.

Jaja- carcajeo Camila frente a ella tambien lo noto comoun reproche, acaso estaria celosa?- pasa algo Jáuregui?

Lauren levantó su mirada y sintió que estaban muy cerca una de la otra y sonrio, ella también sabía jugar ese juego. Y Camila no la intimidaba para nada.

Ninguno señorita Cabello- dijo tomando el lápiz y llevándolo hacía su boca.

Camila recorrió con su mirada todo el trayecto del lápiz. Trago en seco y se alejó.

Bien gracias, y ponte a hacer tu trabajo- dijo la morena acomodandose su camisa y volviendo a su oficina.

No entendía porque había sentido ese fuego recorrer cada parte de su cuerpo, cuando Lauren hizo ese movimiento con el lápiz. Pero no podía desear a esa mujer, ella nunca caía tan bajo, nunca.

Lauren sonreía mientras recordaba como había jugado con el lápiz en su boca, bajo la atenta mirada de Camila. Por un momento sintió la necesidad de tomarla por el cuello y acercarse a ella para besarla. Pero no podía hacer eso. Nunca podría desear a una mujer como Camila, nunca.

Nunca- dijeron cada una en sus pensamientos- Nunca- repetían como si en sincronía estuvieran.

















Espero les guste este pequeño capítulo...

Muchas gracias por leer..

Perdón por los errores....

Mi secretaria (camren) En Pausa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora