Sacrificios(Justin Bieber y tu) ORIGINAL

Capítulo 9

Ahora todo encajaba: la amenaza del otro día, las salidas de Jake en horas tardías, el nuevo trabajo, su nerviosismo…..todo tenía que ver con él. Justin siempre había estado detrás de todo esto.

La expresión de Megan se contrajo y me miro expectante. –¿De que estás hablando? –Frunció el ceño– ¿Por qué crees que él está detrás de todo esto?

–No lo creo, estoy segura de que es así –dije muy convencida.

–¿Y cómo es que estás tan segura de eso? –preguntó mientras limpiaba las lágrimas que recorrían sus mejillas.

–Porque escuche cuando...–no pude terminar de hablar al ser interrumpida

– ¿Familiares de la señorita Katherine Morgan? –Habló un hombre alto, de cabello negro y gafas.

–Soy su cuñada… ¿Cómo está? –dije con preocupación.

–La señorita Morgan en este momento se encuentra un poco débil. Tuvo una crisis de nervios, pero ya todo está bien –aseguró el doctor.

–¿Puedo pasar a verla? –Pregunte mirándole a los ojos.

–Claro, solo no permita que la señorita Morgan entre de nuevo en una crisis nerviosa; no resulta bueno para su embarazo –Abrí mi ojos de par en par.

–¿Cómo que embarazo? –Preguntó Megan con incredulidad quitando las palabras de mi boca.

–Em, bueno, la señorita Morgan tiene dos semanas de gestación según estos análisis –Revisó los papales de la tablilla que traía y luego volvió a asentir.

No, es que es increíble. ¿Por qué todo tiene que pasar justo ahora? De seguro que esa era la noticia que ella quería darle a Jake.

Sentí una fuerte puntada en mi pecho y nuevas lágrima cegaron mi visión. ¿Y si Jake muere sin conocer a su hijo? El horrible nudo se formo en mi garganta y rápidamente cubrí mi boca con mis manos. Esto no podía estar pasando. Jake no puede morir. No puede dejar a su primer hijo solo.

–¡Quiero verla! –Tragué saliva con dificultada mientras limpiaba mis lágrimas.

–Sígame. –El doctor me hizo una seña y luego se giró. Yo hice una seña a Megan para que me siguiera y esta negó con su cabeza.

–Me quedare aquí para esperar noticias de Jake. –Sonrió levemente mirándome los ojos. Susurré un pequeño “gracias” y me gire para seguir al doctor.

–Le hemos inyectado un calmante para que descanse, así que muy pronto se quedara dormida –Informó el doctor durante el trayecto y yo solo asentí

Caminamos por un largo pasillo hasta que el doctor se paró frente a una puerta, la cual tenía una pequeña placa de hierro que decía “habitación 193”, posó su mano en el pomo de está, abriéndola despacio, luego se hizo a un lado permitiéndome el paso. Yo le mire y él me sonrió para tranquilizarme; le devolví el gesto y entré.

La puerta se cerró detrás de mí y mi mirada se posó en la cama en la cual se encontraba Kate acostada, conectada a una intravenosa.

–¡______! –me reconoció de inmediato–. ¿C-como esta Jake? ¿Le pasó algo? –Me miró con angustia.

Me acerque a la cama y me senté en una pequeña silla que estaba cerca de ésta; tomé las manos frías de Kate entre las mías.

–Todo está bien –Lamí mis labios–. Él se va a poner bien –Guarde un mechón detrás de su oreja–. Ahora lo que tienes que hacer es cuidarte. La pequeña criatura que se está formando aquí –Lleve mis manos a su vientre– te necesita fuerte.