Sacrificios(Justin Bieber y tu) ORIGINAL

Capitulo 8

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No sé de qué manera logré salir.

Ni mucho menos creo estar consciente de cómo voy vestida.

Solo dos cosas se arremolinan en mi mente: “Tu hermano fue golpeado” y “Hospital Central”.

Mis sollozos sordos no se han detenido desde que Kate llamó para avisarme. Y el miedo de perder a mi único hermano se acrecienta cada vez más mientras nos acercamos al hospital, solo escucho a lo lejos la voz de Megan repitiendo algún consuelo y el eco del “todo va a estar bien”.

Aparcamos. Salgo del auto inmediatamente y corro. Corro sin importarme parecer una psicópata. Corro sin importarme el agudo dolor en mi tobillo por habérmelo doblado al salir de casa. Corro, sin importarme nada, solo mi único hermano y además mi mano amiga, quien me enseñó a andar en patineta y a darme ánimos desde el primer día en que me subí en la resbaladilla en el parque y caí, hasta ahora.

Me detengo jadeante frente a la enfermera que informa en Emergencias y ésta me mira expectante. Los pasos de Megan repiquetean detrás de mí y espero a que llegue a mi encuentro para que sea ella quien hable con la mujer, yo mientras observo todo a mi alrededor.

–Buenas noches señorita.. –saluda Megan también jadeante– ¿Me puede dar información sobre el joven Jake Walker? Tengo entendido que fue traído a este hospital.

–Oh, si, un momento... –dice la mujer y revisa entre una tablilla de papeles a su derecha–. Fue ingresado a terapia intensiva hace unos diez minutos.

–Gracias. Em, ¿dónde está terapia intensiva? –pregunta Meg.

Suena el teléfono de recepción y la enfermera lo toma dejándolo sujeto entre su hombro y la barbilla, nos señala un pasillo a su izquierda y nos dice “Tercera hilera a la derecha” antes de pisar un botón y contestar la llamada en espera.

Megan me toma del codo y me hala suavemente para que corra de nuevo con ella. Al llegar al pasillo señalado doblamos a la izquierda, y al final de éste, se encuentra Kate sentada en una de las sillas, con su mirada puesta en el suelo. Parece ida, como si todo se hubiera paralizado. Camine hacia ella, pero sentí como tomaban de mi brazo para detenerme.

–_____, no creo que sea buena idea que te presentes así delante de Kate. –Dijo Megan y con su mirada cargada de tristeza, miro en su dirección–. Mírala, está muy mal. ¿No crees que verte así la afectara más?

–Pero ¿qué puedo hacer? Es mi hermano el que se está muriendo, no me pidas que esté como si nada – Dije exasperada.

–Yo no te estoy pidiendo eso. Solo te estoy pidiendo que seas fuerte por ti, por Kate, por Jake y por tus padres –Susurró con suavidad y yo le mire fijamente. Ella tenía razón, solo que me era imposible hacerme la fuerte en este momento.

–Lo sé. Pero... no puedo, esto es…demasiado. –Rompí en llanto y Megan me abrazó fuerte.

–Tranquila, sé que esto es duro, pero estoy contigo. –Acarició mi espalda dándome confort–. ¿Te acuerdas cuando Jake chocó su auto y terminó también en el hospital? –Asentí. Lo recordaba perfectamente, ese día estaba tan preocupada que no pude ni comer ni dormir hasta que el doctor nos dijo que ya se encontraba estable–. Tu prometiste ser fuerte –siguió Megan–, y no tener miedo ¿Lo recuerdas?

Asentí nuevamente– Se lo que prometí pero… –Megan me interrumpió antes de terminar la frase.

–Escúchame bien _____ –Se apartó de mí y me miró directamente a los ojos–, yo estoy aquí y no permitiré que te derrumbes –Pasó sus dos pulgares por mis mejillas para desaparecer las lágrimas que caían, luego me sonrió cálidamente–. Todo estará bien ya verás cómo Jake se recuperará en un abrir y cerrar de ojos.