Sesión de Estudio.

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-Bueno, Ororo, puedes seguirme por aquí y te estaré mostrando los casilleros. -Informaba el gran Charles Xavier con su típico tono amable y sus ademanes de guía turístico abriéndose paso dificultosamente entre un montón de adolescentes sudorosos que venían de sus prácticas de fútbol americano. Apenas logró salir y respirar aire puro, miró hacia atrás con la esperanza que a la chica nueva no la hubiera arrastrado la avalancha. -Oh, allí estás. -Comentó aliviado viendo como la joven resaltaba entre los demás con la nevada característica que llevaba por cabello. Le ofreció su mano caballerosamente, pensando que no podía dejar que una estudiante se perdiera entre aquella confusa neblina de nervios y testosterona, no cuando el director había confiado en sus manos su primer recorrido por la escuela.

-¿Aquí todos siempre están tan apurados y tan encerrados en sus propios asuntos? -Su voz curiosa e inexperta llegó a los oídos de su guía, haciéndolo mirar a su alrededor, algo divertido por la manera en que todos parecían tener un plan exacto que seguir cada día.

-Así lo creo, los del último año están tomando el tiempo para hacer lo que nunca pudieron antes o tratando de ganar los puntos que necesitan. Es un año muy agitado. -Explicaba el mayor, saludando con la mano a cada persona a medida que caminaba, parecía bastante acostumbrado a que todos lo conocieran y apreciaran. -¿Qué tal, Marie? ¿Tu madre está bien? ¡Scott! ¿Nuevos anteojos? -Intercalaba conversaciones y cada una con una sonrisa honesta, como si todo aquello le llenara y complaciera. -Mira, ahí está tu casillero. -Señaló y se dirigía hacia allá cuando alguien se puso en su camino para evitar que siguiera caminando.

-Hola Charlie, veo que tienes una nueva amiga. -Al momento de alzar la vista se encontró con la expresión burlona de Shaw y dio un paso hacia atrás más por desagrado que por otra cosa. -¿Es nueva? Yo podría mostrarle algunas cosas. -Su vista se fue a la chica y ésta no pudo evitar una mueca de desconfianza.

-Ya déjala, la pobre apenas está llegando hoy. -Se oyó la voz glaciar de la rubia que acompañaba fielmente a Shaw, Emma Frost. Su tono no era compasivo ni defensor, era más de aburrimiento.

-No voy a dejar que siquiera la toques, es parte de mi responsabilidad asegurar su comodidad. -Se mantuvo firme aún sosteniendo la mano de su protegida, quién no se veía asustada en lo más mínimo, pero seguía las instrucciones de su guía.

-Te ves muy seguro de ti mismo, Eggsavier. Nada parecido a tus primeros años. -Una sonrisa retorcida acudió al rostro del más alto y el otro sintió una punzada de pena cuando esa frase trajo memorias a su mente que lo hicieron perder el equilibrio por un momento. -¿Recuerdas esos días de gloria? -Charles odiaba que Shaw siempre encontrara las palabras para hacerlo sentir inseguro otra vez.

-Las personas se van a amontonar en la cafetería si no nos apuramos. -Dijo uno de los acompañantes de Shaw pareciendo impaciente, golpeando leve y repetidamente el suelo con el pie.

-Erik tiene razón, te veo luego, Charlie. -Recalcó la última palabra sabiendo como le disgustaba al otro aquél diminutivo. Entonces retomó su camino y pasó una mano interesada por el cabello de Ororo, recibiendo a cambio, un golpe en la mano de parte de ésta, pero eso sólo lo hizo sonreír más.

Detrás de Shaw caminaba la rubia haciendo resonar sus tacones con orgullo y luego el hombro de Erik chocó con el de Charles, pero ninguno de los dos pareció inmutarse.

-¿A qué se refiere con 'Eggsavier'? -No pudo evitar preguntar ella apenas y los bravucones se habían abierto paso a la cafetería.

Charles se aclaró la garganta con algo de incomodidad y se dirigió al casillero que había señalado antes. -No es una historia que me encante recordar. -Evadió, aprovechando para contestar un mensaje de texto que le acababa de llegar, entonces volvió su atención a ella. -Aquí está tu casillero, recuerda no forzarlo porque varios han dañado de esa manera los suyos, sólo colocas la contraseña, haces una ligera presión y se abre, sino, puedes llamar a Sean, él siempre sabe como desbloquearlos.

Stubborn (Cherik)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora