La fiesta

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Miraculous pertenece a Thomas Astruc y este fic es por mera diversión.

Something about us.

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La fiesta.

Ladybug estaba totalmente sorprendida de ver a Chat Noir y él, al verla a ella, pudo percatarse de que sus sentimientos renacían nuevamente, o era posible que sólo hubiesen estado dormidos.

―¿Puedo sentarme a tu lado? ―preguntó con una timidez pocas veces vista en el héroe gatuno.

Ladybug no decía nada, sólo frunció su ceño y miraba a quien era su compañero casi con lágrimas en los ojos.

―Hasta que... te dignaste a aparecer Chat Noir ―dijo fríamente desviando su mirada.

Chat sintió el filo de aquellas palabras, sin duda, su querida lady estaba más que molesta con él por sus años de ausencia. Sin esperar una respuesta a cambio se sentó a su lado, contemplando también las luces de la ciudad y la paz que se respiraba en París.

Ladybug giró su rostro para que él no viera como sus lágrimas caían silenciosamente por su rostro. Estaba feliz de verlo, pero sentía que todo el dolor por su desaparición hubiese vuelto a nacer. Tenía deseos de gritarle, de golpearlo y de decirle que no necesitaba más de su compañía para cuidar la ciudad que tanta acogida les dio en su momento. Apretó sus puños por sobre los fierros de la torre y se mordió los labios tratando de evitar soltar algún quejido por culpa de su llanto.

―Lamento mucho haberme ido, bugaboo.

―No me llames así... ―cerró sus ojos.

―¿Puedo al menos decir algo? Justificarme ante ti... ―Ladybug no dijo nada, sólo dejó que hablara― Sé que... puede sonar como excusa, pero todo este tiempo, en verdad lo necesitaba. Alejarme de París. Después de lo sucedido con Hawk Moth, me replantee muchas cosas... ―suspiraba mirando de reojo a la catarina, pero ella seguía con su rostro dado vuelta―. No sólo soy un portador del Miraculous de la mala suerte, como civil también tuve bastante mala suerte bugaboo.

Ladybug relajó sus hombros ante las palabras de su compañero, aun así no se inmutó en querer girar para poder observarlo.

―¿Q-qué fue lo que te sucedió? ―preguntó ella intentando limpiarse sus propias lágrimas.

―Problemas familiares... ―intentó decir más, pero aún no sabía cómo se sentía ella con respecto al tema de sus identidades―. La persona que soy debajo de esta máscara decidió alejarse de ellos. Me decepcioné mucho de... ―apretó sus puños― creyendo que era alguien, pero resultó ser otra...

―Podrías habérmelo dicho, que no seguirías siendo Chat Noir... ―dijo incorporándose a la conversación y esta vez mirando de frente―. Al menos para haberme hecho la idea, o... o quizás apoyarte en algo chaton. ¿Somos amigos, no? Éramos los mejores amigos, eras mi compañero ¿Por qué no confiaste en mí?

―Confío en ti más de lo que imaginas, ma lady. Quería decirte quien era en verdad, hubieras entendido muchas cosas... Pero tú no querías saber de nuestras identidades, por eso... debí... ―se estaba debatiendo entre decirle la verdad o no, hasta que suspiró hablando en voz baja―. Me fui del país.

La cabeza de Ladybug comenzó a armar el rompecabezas, y su corazón latió con velocidad... ¿Era demasiada coincidencia? No, no iba a creerlo...

―¿A dónde te fuiste? ―preguntó dejando escapar apenas un hilo de voz. Chat miró a su lady pensante, pero no le respondió―. ¿Con quién tuviste problemas chaton, con tu madre o quizás... tu padre... o probablemente con un hermano o una tía...?

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