•Trastorno De Ansiedad•

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Mi abuelo me recomendó
escribir para la depresión
para la ansiedad, para el corazón...
para mediante versos
desfogar poemas, estrés y
una cruda verdad.

A la poesía la considero amiga
quien esta siempre conmigo con un abrigo de palabras que colman de calma el ánimo de aquel niño
que se robó mi nombre, aquel niño que duerme mucho aunque lo veas despierto en las noches, hasta parecer un
muerto en vida, con aquella mirada adictiva hacia un mundo inexistente,
una utopía en mi mente que carcome
mi cordura con tal soltura que
ya ni me reconocí...

Un espejo puede decirme que soy
pero ante mi reflejo...

¿Quién soy?

Un espejo que refleja mi apariencia
pero...

¿Que reflejará mi ser y mi conciencia?

¿Para que escribí éstos versos?

Veo mis manos pero ya no son las mías,
camino viendo unos pies que no son los míos,
ya nada me pertenece, si no a una ingenua mente,
que me controla más a mi que yo a ella,
y sin Ilusiónes, no estoy demente...

Corazón a mil, revoluciones,
¿estómago por que te revuelves?
fatiga, ausencia, fea sensación..

Me persiguen, olvidé algo,
tengo todo, lo reviso y lo reviso
pero...

¿Olvidé algo?

No quiero salir,
éste mundo me agrada,
perdón... a su ira malograda,
ésta tierra no tiene culpa
Lucifer te pido disculpas
por todos aquellos que te culpan,
te destruyen por un pecado
que desahucia fantasías,
riquezas que al morir nadie lleva,
sólo unas manos y alma vacía.

¿Me he dejado el corazón de nuevo?
te reviso, por si te estropeas.

Sonrisa tras sonrisa para evitar tristeza,
de menú hay arroz y melancolía como presa.

Preocupaciones insignificantes,
para mi puede ser un efecto mariposa,
tristeza, ansiedad, catástrofe
y obsesión por cada detalle.

Cada noche despierto en un mundo extraño
tan extraño que me veo feliz, un vagabundo
con éxito, con amor, profesión y sin daño
pero lo repetiré, para mi, un mundo extraño.”

Hicimos Lo ImposibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora