💫Cap 5💫

5K 405 14
                                    

A Soo le encantaba dormir en los brazos de Kai, le encantaba que éste lo abrazara y le diera mimos cada vez que despertaban. Y más aún si Kai intentaba consentirlo por la pelea de la noche anterior, no es que Soo se estuviera aprovechando de Kai, pero si era un pase seguro para que el mayor lo abrazara y le diera besitos, él estaría de acuerdo.

-Soo, ¿aún estás molesto? -preguntó mirando a su bebé jugar con sus dedos.

-No... bueno, un poquito -claro que seguía un poco molesto.

-¿En serio?, ¿Y qué puedo hacer para que mi bebé ya no esté molesto? -Kai estaba más que dispuesto a cumplirle cualquier capricho, porque quería que su bebé le diera una mamada.

No es que pensara solo en sexo, pero los labios de Soo eran una tentación muy grande y él era débil.

-Um... no sé ... Sabes, hay una nueva pijama de Pororo -dijo mirando a Kai, a esos ojos tan penetrantes que tenía Kai y mordió sus labios para pasar la lengua por estos.

-Sí, bebé, pues ¿y si nos bañamos para ir a comprarte tu pijama y vamos al cine? -sabía que era un niño manipulador y, para colmo, lo seducía.

-Sí, Nini, yo me baño primero -Kyungsoo se paró y se fue al baño. Allí cerró la puerta y se empezó a desvestir. Pronto se dio una ducha enjabonando su piel con un jabón de rosas y lavó su cabello con la misma fragancia. Luego se secó y se puso la toalla para salir, se asomó y Kai ya no estaba. Seguro se fue a duchar al otro baño.

Kai entró y se secó la piel para tomar una crema y empezar a poner en sus piernas, cuando sintió unas manos conocidas en su cintura.

Kyungsoo se sonrojó y tapó la parte del frente con la toalla, mientras Kai se restregaba contra él, podía sentir su cosita cada vez más grande.
Entonces Kai lo jaló más hacia su pecho y empezó a repartir besos en sus hombros para luego pasar al cuello ajeno. Se dispuso a besar y morder a su antojo, mientras Kyungsoo se retorcía, jadeando e intentando no gemir por el placer que le brindaban sus caricias y besos.

Su vientre sentía un cosquilleo y en su columna una corriente que iba a parar en su miembro mientras Kai daba pequeños movimientos a su cadera, chocando con su pene ya erecto.


-Eres hermoso, Soo -Kai lo siguió besando en el cuello y dando esos movimientos en su cadera para calmar el dolor de su polla. El niño lo tenía loco, quería hacerlo suyo de todas las formas posibles, marcarlo como suyo.

-Puedo... hacerte el amor, bebé -Soo se estremeció en sus brazos, pero no se quitó, se dio la vuelta y lo miró a los ojos con ese brillo tan especial que desprendían estos. Se inclinó poniéndose de puntitas y le dio un beso suave, lo cual Kai tomó como un sí.

Entonces lo tomó por la cintura para tenerlo más cerca y lo guió hacia la cama donde lo fue acostando de a poco entre besos, no quería asustarlo, él era tan puro, tan inocente y, aunque supiera que estaba mal lo que iba a hacer, Kai lo amaba y sabia que él también lo hacía.

Cuando estuvieron acostados, Kyungsoo debajo suyo y Kai arriba de él con una mano al lado de su cabeza y la otra acariciaba la piel del vientre de Kyungsoo, era tan suave.

Tenía la vista más hermosa en toda su puta vida, su pequeño debajo suyo, jadeando y restregándose bajo su toque, respondiendo a sus besos.
Pasó la lengua por su labio, pidiendo permiso y al instante abrió su boquita dando paso a su lengua, que se enredó automáticamente con la contraria mientras el beso pasó a ser húmedo. Le chupó su lengua y él gimió, el sonido más sexy del mundo, haciendo que sus bóxers se apretaran más.

Se separó de él unos centímetros solo para ver un hilo de saliva bajar por su mandíbula, allí donde pasó la lengua y empezó a besar su clavícula, escuchando los gemidos más roncos de Soo y más necesitados.

Pasó la lengua por su botoncito derecho y Soo se estremeció soltando un gemido fuerte, tomando su cabeza y empujándola hacia su pezón para que no parara.
Kai mordió y chupó su botón hasta que pasó al otro, podía sentir la entrepierna de su bebé dura como una roca.

Así que le dio tregua y se puso en su cintura, moviéndose para hacer fricción entre ambas pollas. Kai se desvistió y quedó igual que él como Dios los trajo al mundo.

Empezó a dar pequeñas embestidas aún arriba de él, mientras ambos soltaban gemidos cada vez más necesitados.

-Ahh... M-más... p-por... f-favor.

-Como... desees, amor. Ah...

Tomó a Soo y lo puso arriba suyo, quería que él llevará el control, que él mismo fuera a su ritmo, así que empezó a dar pequeños saltos en su polla fingiendo embestidas mientras su polla chocaba con su entrada.

-Ahh... Soo...

Le puso dos dedos en su boca.

-C-chupalos, bebé.

Y así lo hizo. Chupó y los dejó tan llenos de su saliva, era tan excitante y en ningún momento dejó de dar saltitos.



Después de Kai dilatar a Soo y muchos gemidos y besos húmedos, Kai puso la cabeza de su polla en la entrada de Soo y lo miró a los ojos preguntándole con la mirada si podía seguir y éste sólo asintió, poniendo su cara en el cuello de el mayor, respirando con dificultad debido a la excitación del momento.

Kai se introdujo de a poco en Soo, sabía que al menor le dolía, ya que éste lo estaba mordiendo y sintió las lágrimas de su bebé en sus hombros, lo cual bastó para detenerse.

-Lo siento... Bebé, voy a salirme.

-N-no... P-por favor... ah, muévete.

Soo estaba tan apretado, la sensación de la entrada de su bebé apretando su polla era increíble.

Después de muchos jadeos y besos, de Kai clavarse una y otra vez en la entrada tan apretada y húmeda de su bebé, entre gemidos y gruñidos llegaron al orgasmo, Soo en el pecho de Kai y Kai en la entrada de Soo.

Soo era bueno montándolo.
.
.
.
.
.
√ Gracias por leer este fics

√Si te gustó deja la estrellita ⭐.

√Creditos de corrección a
[NoPosWish]

💫El niño de los labios Sexy💫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora