|09|•Mala suerte

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—Jihyun.

—Salí temprano del trabajo y quise invitarte a comer —rió con amargura— pero ya cenaste.

—Lo siento, me hubieras marcado.

—¿Crees que no lo hice? Te marqué varias veces y todas me mandaban a la maldita contestadora. Vine a tu casa y la gruñona de tu tía no me quiso abrir y me corrió diciendo que aún no habías llegado siendo que ya habías salido de la tienda hace dos horas. —dijo molesto.

Saqué mi celular y me di cuenta de que lo tenía apagado, recuerdo haber tenido 5% de batería y por eso lo apagué. Se me olvidó por completo volverlo a prender y verificar si había subido algo de batería como usualmente lo hace y para ser sincero no creí haber tardado mucho cenando con Jae Sun pero al parecer era verdad.

—Me quedé sin pila. —le mostré el celular y él solo suspiró hondo, supongo que más molesto que antes— lo siento.

—¿Y no pensaste en la hora? Se supone que siempre nos vemos en la cafetería y por estar con ese supongo que tampoco llegarías a tiempo. Te gustó tanto que ya hasta programaron otra cita. —elevó la voz.

Fruncí el ceño con ligera molestia.

—¡Solo fuimos a comer! No malinterpretes las cosas por favor. —le contesté igual.

En ese instante miré a Jimin viéndonos desde la ventana con curiosidad, me miró intimidado por mi rostro molesto y bajó la mirada apenado desapareciendo entre las cortinas.

Sentí una opresión en el pecho y decidí relajarme tomando una fuerte inhalación.

—¡Le gustas a ese chico por eso me molesto! —me gritó.

—No pienso discutir esto y piensa lo que quieras, que tengas buena noche. —sin esperar respuesta me di la vuelta y de un portazo me adentré a la casa.

Subí a mi cuarto y me tiré a la cama mirando al techo, solté un bufido y tapé mis ojos con el brazo derecho mientras alejaba de mi sistema el reciente suceso.
Me relajé tanto que sin darme cuenta me quedé totalmente dormido hasta el siguiente día.

El sonido de la ventana golpear violentamente a causa del aire me despertó en la madrugada, me levanté rápido y cuando estaba a punto de cerrarla miré a la ventana de Jimin.

Oh no.

Olvidé nuestro encuentro, corrí a mi mesita de noche donde estaba mi reloj 6:58am. Eish, me senté en la cama abatido y despeiné mi cabello.

Volví a mirar a la ventana, el cielo seguía oscuro al ser entrado el mes de diciembre y la brisa era fría. Un escalofrío me recorrió la piel cuando el viento chocó conmigo y con una última mirada a la pieza de Jimin cerré la ventana.
Puse a cargar mi celular y me metí a dar una ducha con agua fría, tal vez me enferme pero era una forma de reprender mi falta con Jimin.

Salí de casa y me encontré con los señores Park subiéndose a su camioneta, los saludé.

—Buenos días. —hice una reverencia.

—Buenos días JungKook. —abrocharon sus cinturones— Adiós.

La camioneta se puso en marcha y se fueron. Ladeé un poco la cabeza, eso fue raro, sumamente raro, ellos siempre me sonreían aunque quizás ya se hayan enterado de mi pelea con Jihyun y por eso se portaron fríos conmigo.
Este día no puede ir mejor, JungKook.

Llegué a la tienda y al momento de entrar me topé con mi jefe quien me detuvo rápidamente nada más al verme.

—JungKook gracias al cielo que llegaste, necesito mucho de tu ayuda con la mercancía de navidad que acaba de llegar. Jae Sun no va a poder venir hoy me avisó que se enfermó y que regresará en unos días así que el trabajo será más pesado. Acabo de poner un mostrador nuevo en el pasillo ocho y ahí quiero que acomodes la mercancía. Vete a cambiar. —apresurado se fue a su oficina y no evité resoplar este día.

PSYCHOPATH ~KOOKMIN~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora