•Segunda parte de Bajo el Infierno del Italiano.
La vida de Ámbar caerá a los infiernos, cuando David Ferrazzano aparece en su vida, tras tres años de no dar con su paradero.
Dedicada a: @FerFranco
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He llegado demasiado lejos como para poder regresar. Como para darme por vencido, para dar vuelta atrás.
Joder no, esta vez nadie me diría que hacer.
Yo iba a recuperar todo mi imperio.
Iba directo a una cena para los mafiosos reconocidos. Hasta ahora me mantenía en el anonimato.
El evento es llevado a cabo en Moscú, Rusia. El presidente esta presente. Junto con miles de hombres a su cuidado. El salón contiene una perfecta combinación de colores medievales, con un estilo rústico. Colores combinados de manera más intensa hasta más baja. Las mesas adornadas con manteles de oro. Sillas talladas en porcelana, con la altura perfecta para cada quien. El gran candelabro al centro de la pista. La cual no pierde lujo de nada. Tiene un lujo exquisito de diamantes los más caros de esta región.
El salón ya esta lleno de mafiosos de todas clases. Con sus esplendorosas mujeres.
-Bienvenido sea señor Ferrazzano, estoy para servirle esta noche. Su mesa reservada es de tres personas sino me equivoco.- asiento.
-Es correcto.- respondo.
-No pidió exclusividad por lo que será compartida con alguien más.-
Esa idea no me agrada, pero se me paso por alto ese detalle. sin más el chic me indica mi número de mesa, la cual se encuentra con la vista a la pista.
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Mi amigo Iván y Álvaro han llegado.
Platicando tranquilamente de como llevan acabo sus negocios por España, alzo la cabeza para verificar porque la gente pone su vista en alto.
En la entrada principal se encuentra mi peor enemigo.
Alesandro Megalos y su linda esposa, aquel mafioso griego quien algunos años atrás traiciono mi confianza. Su amada esposa Sara Williams-Megalos. La tan modelo de USA que se ha dedicado fielmente a su adorado marido.
Seguido de esa pareja entra Hoffman, con su aspecto alemán tan característico. De la mano de una chica que no es Ámbar, una rubia sacada de revista. Quien logra llamar la atención con su escotado vestido hasta la parte baja de su espalda.
Aleksander, Aleksander Sokolov, el jodido cabrón quien tiene de los huevos al presidente de Rusia. Tal parece que el menudo hombre ha llegado solo.
-¡Joder tío!- exclama Iván.
-David os ha llegado tu karma.- ante esas palabras no logro entender.
Devuelvo la vista a mi objetivo.
Mi quedo pasmado ante la chica que va del hombro de él.
Ámbar va de la mano de aquel jodido cabrón de mierda, vista esta puesta en ella, con su vestido rojo que ha encendido mis neuronas, me ha llenado de una energía inexplicable. Pero al mismo tiempo mi enojo aumenta por estar con él.
