El futbolista (Pausada)

CAPITULO 1 ✔

Amelia

Era una día normal con mi mejor amiga, platicábamos sobre que ella quiere un auto de preferencia rojo pasión, para su cumpleaños número 20 pero no solo eso la marca del auto que ella quería debía ser un Lamborgini. Mi amiga se fumó las hojas de su árbol de limones, ni que pudiera ahorrar con todos sus trabajos podría comprarse un auto de esos. Que se consiga un ''Sugar Daddy'' o ''Christian Grey'' no se, esta loca.

-Enserio? mmm interesante, amiga ese auto solo es un sueño. Al menos que estudies mucho consigas un trabajo que pague bien y después del esfuerzo laboral te compres un auto de esos. -observo su rostro y me consigo con su mirada molesta, me rió un poco pero es la verdad ya debe aceptarlo- 

No deja de quejarse, y hablar mi amiga Peyton Dallas es una parlanchina desde los 4 años, un día de estos le cerrare la boca con cinta de empaque, en un momento dejo de oírla y me giro hacia ella para mirarla,  saber porque el tan repentino silencio de su parte, se queda viendo un punto fijo con cara de ¡no puedo creerlo! sigo su mirada y a continuación yo pongo esa misma expresión. Si no tuviera mi mandíbula pegada a mi cara ya se hubiera caído al suelo. frente a mis ojos estaba el mismísimo Tobias Eaton.

-Humm ¿Amelia? creo que se acerca a nosotras.

Es lo que escucho de mi amiga pero ignoro su voz , y solo me concentro en Tobias Eaton. Que de cierto modo si se estaba acercando a nosotras en una caminata de cámara lenta o algo así como en las películas.

-¿Tu eres Amelia Williams?- pregunta el chico alto con esa mirada intimidante que ahora esta frente a mi.

Tobias Sexy Papasito Eaton

Su estatura enserio que era alta, yo parezco una estúpida hormiga a su lado, es un condenado poste junto a mi. Esa característica estatura de minion es algo pobre. No se como pero solo asentí. Llévame contigo Tobias soy Divergente, deja a tris y me quedo contigo. Con razón es 4 ese cuerpo esos labios...labios o Santo Dios

No supe como ni cuando paso, pero sus labios se acercaban cada vez a los míos. instintivamente cerré mis ojos esperando ese roce tan deseado de sus labios contra mi boca, sentía su respiración, cada vez mas cerca. no podía creer esto...

-¡Amelia!! ¡despierta!!

Despierto de golpe, y con el pulso a mil por hora para darme a notar que mi hermano menor esta saltando en mi cama y riendo.

-¡Maldición Albert! Tobias Eaton estaba por violarme- contesto muy frustrada

-¿Violarte? ¿Que es eso?-  Se siente en la cama mirándome con ese gesto interrogativo

-Bueno pues violar es cuando...es eso de amar mucho a una persona- asiento levemente mientras lo observo y espero su reacción 

Mi hermano sale corriendo de mi habitación gritando:

¡Yo violo mucho a mamá!

Estampo una de mis manos en la frente con un leve golpe y niego divertida, sencillamente lo dejo pasar y me levanto de la cama, pero como hoy los planetas se alinearon para ponerse en mi contra. No me doy cuenta que estoy toda enrollada en las sábanas y que no puedo sacar mis piernas, lo siguiente que pasa es el sonido que ocasiona mi cara al besar el suelo frió de mi habitación.

-¡Por Voldemort! este no es mi día-

Como puedo me levanto y quito las sábanas de mi cuerpo, mi cara arde se que tendré un hematoma luego pero camino al baño y entro con toda la flojera del mundo, y hago lo básico. mis necesidades fisiológicas, me lavo los dientes, me ducho y me arreglo para salir. Ordeno mi habitación y me siento en el borde de la cama para ponerme los zapatos. Pero de repente la puerta de mi habitación se abre dejándome ver a un hermano mayor desnudo solo tiene una toalla que rodea su cintura.