Capítulo 45 ◽◼⬜

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Narrador omnisciente :

La noche había caído, Lloyd, Nya y  Garmadon estaban a punto de infiltrarse al templo de Chen. El ojiverde trataba de concentrarse en su plan cuando sintió que alguien le observaba desde la maleza. Con mucha duda se acerco, pero al ver que tal vez lo que había ahí era un enemigo lanzo una esfera de energía que con facilidad fue desviada por otra de la misma magnitud pero de un color oscuro

— tranquilizate — dijo Gaizka saliendo de su escondite — que buena bienvenida le das a tu hermano mayor

— ¿Gaizka? — dijo sorprendido — tu tienes la culpa, no me asustes así — decía aliviado — ¿te lastime?

— No para nada — dijo tranquilo — necesitas mas que eso para derribarme, una simple esfera de energía no me detendría, aunque esa que lanzaste, no estuvo mal

— si lo se, pues gracias — dijo el ojiverde — bueno, ¿ya estas al tanto de lo que pasa aquí?

— no mucho, ¿qué debo hacer? — preguntó colocándose sus guantes

— debemos entrar, sin que nos vean para sacar a todos de ahí, tengo que destruir el cetro de Chen y si te soy sinceró no se que nos espere ahí, te dejaré a ti la tarea mas difícil por que se que puedes hacerla — explicó Lloyd

— ¿cuál? — preguntó ahora posándose a su lado

— quiero que saques a ________ de aquí, no tengo ni la menor idea de donde este, la última vez que la vi, fue en el comedor justo después de que … — se detuvo al recordar lo que Chen le había obsequiado "el anillo", se llevo una mano a la bolsa y ahí estaba este en su cajita bien guardado

— ¿qué te pasa, Lloyd? — cuestionó Gaizka sacándolo de sus pensamientos

— no es nada, ¿cuento contigo? — preguntó ahora viendo al ojigris 

— si claro que si — dijo confiado — entrare primero ¿esta bien?, ustedes entren después

El pequeño equipo había entrado justo después como Gaizka había pedido, por desgracia había alarmas que avisaban de los intrusos y no tenían mucho tiempo para pelear contra todos los esclavos. Nya se ofreció a quedarse mientras Garmadon y Lloyd seguían el camino, pero al doblar la esquina de un pasillo fueron casi envolvidos por un aura oscura que provenía de su siguiente enemigo, Clause

— ¡ve hijo, te necesitan aya, dejame a Clause a mi! — dijo Garmadon

— suerte — contestó el ojiverde saliendo del aérea de combate

— tu padre no tiene fe en la suerte — dijo Clause

— lo se — respondió lloyd — pero no se lo dije a el

Lloyd continuó con su camino, corriendo por todos los pasillos hasta caer en uno de las trampas de Chen, callo unos cuatro metros al subterráneo. El ojiverde muy molesto se levantó, y continuó hasta encontrarse con kai entre los pasillos, quien lo ayudó a encontrar una ruta segura

— ¡kai! — dijo sorprendido — escapaste, ¿qué paso?

— logre liberarme — dijo muy tranquilo mientras sostenía una antorcha en su mano izquierda — Chen ya tiene todos los poderes en el cetro, necesitas hacer otra cosa antes

— no hay tiempo — le interrumpió el menor — debo detener a Chen, solo si es necesario, ¿Kai, ________ esta bien?

— ah … ella, si esta bien — respondió seriamente, se paro en seco y dejo la antorcha sobre el suelo, se volvió para quedar de frente con el ojiverde y apretó los puños con fuerza

EL DIARIO DE LLOYD [LᥣoყdXLᥱᥴtorᥲ] {Nιᥒjᥲgo}. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora