Pero que tonta fui mi amor, debí robar de tus suaves labios un último beso.
Paso los días recordando tu boca, tu sonrisa brillante que deslumbraba mi vida. Recuerdo como sentía que la gravedad dejaba de existir cada vez que uníamos nuestro amor con un beso ardiente. Puedo recordar mil momentos y un millón de alegrías pero no puedo traer a mi memoria la sensación que dejaba el roce de tu cuerpo contra el mio, el roce de tus labios y tu entrecortada respiración susurrando tu amor por mí.
Ayúdame a recordar, revive mi alma y si decides irte para siempre, al menos dame un beso de despedida.
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Gritos del silencio
Short StoryEstos escritos son pensamientos que surgen en los momentos más emotivos de mi día, generalmente los más caóticos. Pensamientos que no puedo expresar en el momento pero continúan dando vueltas en la oscuridad de mi mente.