Era un domingo, bastante temprano, tomé mi celular para ver la hora y recién eran las 6:34 am. Miré a mi alrededor y mis ropas estaban tirada por toda el lugar, estaba totalmente desnudo, descontando que a mi lado había una chica desnuda durmiendo plácidamente, la contemple por unos instantes antes de tomar mis cosas para irme.
Intente meter el menos ruido posible, pero para mi suerte ,no fue así.
Se escuchó como la chica de apoco se levantaba somnolienta mientras soltaba unas palabras a mi persona.-J-Jack...-somnolienta-... ¿ a dónde vas?... es muy temprano para irte... - se escuchó algo triste.
-Ah pues...-pensé algo rápido mientras seguía de espalda a la chica con solo mi pantalones puestos- pues la verdad me levante para hacerte algo de desayunar antes de irme....
Esperó que me dejé ir al darle esa excusa tan tonta -pensé-
Pero no fue así.
-¡Oh que eres muy amable! -me respondió animadamente- espero que seas... tan bueno como en la cama -soltó una risa bastante pícara.
Por dentro suspire para que ella no notara que de verdad no quería hacer tal cosa. Me puse mis zapatillas y fui a la cocina a hacer algo rápido, mientras estaba en vuelto en la cocina intenté recordar algo de anoche y ya ni me impresiona que a penas me acuerde.
Cuando terminé volví a donde ella me estaba esperando, aun sin vestir y con una amplia sonrisa, le deje el desayuno en el velador para que se lo comiera y poder irme tranquilamente, pero aun así no terminaba esta estúpida escena.
-¡¡Muchas gracias, Jack!! -me sonrió- no pensé que fueras así, pensé que te irías tan solo despertar -empezó a comer tranquilamente.
-La verdad - me senté en una esquina de la cama buscando mi polera- sería muy descortés de mi parte irme sin darte las gracias... -le sonreía mientras me ponía mi polera, que lamentablemente estaba pasada a alcohol.
-Eres amable, me gustaría tener un novio como tú -me miro coquetamente.
-Sucy, no digas estupideces -puse una voz un poco enojado- esto fue solo para una vez y listo, no sirvo para esas cosas...-me paré inmediatamente tomando todas mis cosas, me quedé mirándola y antes de irme le bese la frente-...no pienses que soy amable por ser agradecido...
Me encamine a mi hogar lo más rápido posible, sólo quería darme una ducha y dormir. Mientras caminaba en dirección a mi casa, observabando mi celular, me di cuenta que nisiquiera eran las 9 de la mañana y ya quería que terminará el día.
[**]
Al llegar a mi casa, me tiré en el sillón, mientras miraba al techo pensaba que ya me estaba aburriendo de tener esta vida, paso en muchas fiestas, conozco a muchas mujeres y simplemente me cansa. Daba vuelta en el sillón pensando que para cuando iba a cambiar, pero solo me dio un dolor de cabeza que me resultaba imposible pararlo y sin darme cuenta me quede dormido.
Estaba mirando el cielo azul mientras estibara mi mano, escuchaba voces de muchas personas de fondo entonces baje mi mano y miré al horizonte, había un chica que me sonreía, parecía que me estaba buscando por su cara de felicidad.
Me levante de mi lugar de descanso y fui en busca de la chica pero más me acercaba más a la chica, más se alejaba, intente gritar su nombre pero mi voz no salía seguía gritando pero no podía soltar palabra volviéndose todo negro.
Abrí mis ojos...soltando un nombre...
-Kate...-
Seguí mirando el techo de mi casa, totalmente perdido, no sabía quién era ella o porque me sabia su nombre, si es que ese era su nombre. Me levante del sillón un poco sudoroso y me fui a tomar una ducha, pero algo me tomo de sorpresa cuando me dirigía al cocina.
-Oh, buenas tardes Jack -me soltó una sonrisa una chica que estaba cocinando algo al parecer- ¿Descansaste bien? Me tome la libertad de entrar y prepararte algo de comer, ya que se no comerás nada si no te preparo algo - soltó una risa picarona.
-Vicky...¿que haces aquí? Deberías estar en tu casa, es domingo y es muy tarde - observé a la chica de ojos color miel- tienes que irte, ya sabes que no me gusta mucho la compañía...-suspire exhausto.
-Vamos, eres cruel siendo tan frio y eso que soy tu mejor amiga, eres malo, ¿lo sabias? -su voz se apagó un poco-...déjame pasar la noche, se que no te negaras - me lo decía mientras me daba la espalda observando la cocina.
-Haz lo que quieras, me tomaré una ducha -mientras me encaminaba al baño soltaba un fuerte suspiro.
Al entrar a la tina, me puse a pensar sobre Vicky, para ser una chica popular se había convertido en mi mejor amiga hace mucho tiempo ya, tenía mi misma edad, 17 años, era agradable con todos y buena en todo, que me llegaba a dar rabia la verdad, mi padre me la presento cuando tenía 13 años, teniendo recuerdo muy vagos de años anteriores.
Desde entonces se volvió común en mi mentir, ser un asco de persona que se tapa con su linda sonrisa y buenas intenciones, me enfermaba todo eso y por eso llegaba a odiar a Vicky, ya que ella no tenía esa necesidad que tengo yo.
Todas esas cosas pensaba y me repetía mientras tomaba mi baño, hasta que me di cuenta que era hora de salir.
Al salir de mi baño, tome una toalla y me la puse alrededor de mi cintura y salí como si nada bostezando, sin darme cuenta de que justo a la salida estaba Vicky, me quede observándola y con mi mirada tranquila solo dije un vago ''Lo siento'' y me dirigí a mi cuarto a ponerme algo para dormir.Cuando termine de vestirme me puse la toalla en la cabeza y me dirigí a la cocina a comer lo que sea que haya cocinado Vicky, estaba hambriento, no había comido desde ayer por la tarde. Cuando llegue a la cocina que también estaba el comedor en ella, me senté en la mesa he inmediatamente Vicky me sirvió un plato de guiso que estuvo haciendo mientras me bañaba.
-Oh, gracias -empecé a comer sin decir ni una palabra más.
-...Te quería pedir disculpas, por lo del baño...-mientras se sentaba con otro plato a mi lado.
-No te preocupes...-mientras comía- No es como si fuera o la última vez que pasara...mientras sigas ''viviendo'' conmigo -marque muy bien las comillas- seguirá pasando seguramente, así que ya me acostumbre.
-Sigo diciendo que eres muy frio conmigo, hasta cuando serás así, ni en la escuela eres así...eres más...más...-no quería terminar la frase.
-Amable -se la termine secamente-...en la escuela eres una chica popular y si te tratara más mis fans se sentirían mal y me odiarían si no fuera amable contigo -mis ojos cambiaron de dirección a la pared, no quería verla.
-...Entonces así eres, un tipo frio y sin sentimientos al parecer -suspiro-...no quiero que cambies, pero sería genial que, aunque sea una mentira el ser amable lo fueras para mí un poco más...
-CALLATE!! -Grité sin escrúpulos-...no me vuelvas a decir eso, jamás -me pare de mi asiento, tome el plato, lo deje en la bajilla y me dirigí furioso a mi cuarto-...si te vas a quedar, me gustaría que te fueras sin mi mañana. -esas fueron mis últimas palabras antes de entrar a mi cuarto.
Me lance a mi cama, enojado, totalmente asqueado, ella quería que siguiera mintiendo con esa faceta enferma que tengo de amabilidad, ella no lo entiende, soy así para que se pueda alejar de mí y no hacerle daño, en serio, es muy tonta a veces, por eso la odio, por eso le hago daño, por eso soy un estúpido con ella. No quería que se preocupara por mi y por eso le hago daño quizás no es la mejor forma, pero es lo único que me queda, es lo único que soy, estoy enfermo, estoy loco, soy un desquiciado que vive el día a día con una sonrisa he intenciones falsas, debería morirme por estos pecados que cargo, solo quiero desaparecer, quiero dejar esta vida, pero también soy muy cobarde para hacerlo.
Eso me repetía mientras mordía mi almohada en silencio para ahogar mis gritos y mi llanto y como siempre, sin darme cuenta me dormí.
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HEY! hola:c la verdad no pensé que algún día publicaría está historia, pero bueno a veces se necesita de valor para hacer estas cosas.Hasta ahora solo tengo unos capítulos más ya escritos (es una historia que comencé hace años) y quería confiar en las personas de aquí para poder crecer como escritora uwu
Bueno, alguna duda, algo se puede dejar en la cajita de cometarios (alto yutuber, ah), denle una estrellita y sigan la historia):
Bueno, me despido
Una "escritora" de tantas.
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La verdad del mentiroso.
JugendliteraturJack Rogers, el chico más amable, honesto, confiable, bastante risueño, es bastante guapo también, sus ojos café penetrantes, su corto cabello color castaño miel que tenía algunos rulos que eran rubio platino por sus largas teñidas de pelo. Lo que...