Brujas

Personal

Nota 1;
Si algun dia leen esto sepan que son mis sentimientos en sus labios y que me encantaria leer sus consejos, gracias.

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Ya han pasado dias en los que sufri como una mendiga el frio de tu lejania y la ignorancia de tu actitud. Ya han pasado noches enteras y madrugones asperos por esta alarma que vos pusiste "ya no querer estar".
Si, duele como un clavo en el pecho. Tengo lagrimas agrupadas en mis parpados, que ahora pesan, Y solo me queda reir. Falsamente.

Mi alma me pide a gritos pasar en la madrugada por cafes amargos mientras me siento a contemplar la vida, mas bien para alentarme de seguir viviendo.

Pero pienso. Nunca me ha gustado el cafe amargo, siempre he sido adicta a la dulzura como tus gruesos labios. Siempre me he derretido ante la mirada llena de pasion y sensacion de tus ojos cada vez que nuestras pieles se rozaban e tu dejabas pequeñas formas de amor sobre ella, tu lengua siempre me causo una explosion de sensaciones y juro, que tu sonrisa decorada con esos hermosos hoyuelos me hacian sentir tan afortunada...

Pero ya no estas, nos hicimos daño estúpidamente, tu saliste más herido al principio y ya luego con el tiempo me empezó a afectar a mi.
Yo quiero mas, intentar y tu pareciste abandonar.

El tiempo te sanó las heridas mientras que a mi  me las abría y el dia que Dios decidio cruzarte de nuevo en mi vida solo fue para darme una leccion que desencajo toda mi coraza.

Nunca he sido de las personas que les gusta sentir demasiado,  hasta el punto de volverse loca y no saber que hacer. He sido de las que toman sus pequeñas dosis de sentimientos, las agrupan en diminutivos frascos y solo se permiten ese limite. Buscar formas de alejar a gente toxica y que dañe o perjudique lo que yo tanto he cuidado.

Pero cuando te vi de nuevo despues de tanto tiempo...
El amor presionado estallo en ese instante, senti cosas que aun no entiendo ni entendere.

Ganas de amarte, de estar a tu lado, de  tus besos, tus protectores brazos, tu mirada, que tu sonrisa fuera mia, de correr a ti, de llorar en tu costado y decirte honestamente:
"Te he extrañado demasiado"

Por que lo hago.

Y lo seguiré haciendo hasta que Dios me vuelva a hacer justicia y el tiempo sane este primer amor ingenuo y exagerado que no se es correspondido.

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Siento un dolor en mi pecho por que tu ya no estas. El vacio de tu ausencia. La culpabilidad por haberte dejado ir.